HYBRID II

Capítulo 13.

Dione.

Alice nos llevó al colegio la mañana siguiente, no había podido aguantarse, así que el preciosos Porsche ahora estaba en el estacionamiento de la escuela.

—¿Y si está noche salimos o algo así?

–¿Y si vamos a bailar? - murmure.

Ambas me miraron.

-No es mala idea - dijo Bella con una pequeña sonrisa.

Ya de acuerdo con eso, nos despedimos de Alice y ambas nos dirigimos a nuestra clase de Lengua. Estuvimos molestando en casi toda la clase, jugando cualquier cosa.

Cuando sonó la campana, nos levantamos sin mucha prisa, Mike nos esperaba en la puerta y la mantenía abierta para nosotras.

—¿Se va Edward de excursión este fin de semana? - le preguntó  a Bella con afabilidad mientras caminábamos bajo un fino chirimiri.

—Sí.

–¿Entonces saldrán con Jacob?

–No creo, esta algo ocupado - murmure.

El asintió y entonces me miro fijamente.

—¿Te apetece hacer algo esta noche?

¿Cómo era posible que aún albergara esperanzas?

—Imposible, esta noche tenemos pijamada - dije con una pequeña sonrisa.

—¿Quiénes van a...?

Detrás de nosotros, un par de motores bramaron con fuerza en algún punto del aparcamiento, todos los que estaban en la acera se volvieron para observar con incredulidad cómo dos estruendosa motos negras llegaba hasta el límite de la zona asfaltada sin aminorar el runrún del motor. Una enorme sonrisa se es tendió por mis labios solo al verlos,

Jacob nos urgió con los brazos, mientras Paul Lucía una enorme sonrisa divertida en los labios.

—¡Vamos, chicas! —gritó por encima del rugido de los motores.

-Nos vemos Mike.

Sin pensármelo dos veces corrí hasta él y subí a la moto, bese rápidamente su mejilla, lo sentí sonreí.

—Di que me he sentido mal repentinamente y me he ido a casa y Dya me acompaña, ¿de acuerdo? —le dijo a Mike, con la voz llena de repentino entusiasmo.

—Vale —murmuró él, sin apartar la mirada de mi, tenía el ceño fruncido. Bella le pellizco la mejilla antes de subir detrás de Paul —Gracias, Mike. ¡Te debo una!

Ambos chicos aceleraron las moto sin dejar de sonreír. rodeé su cintura con los brazos, escondí mi cara en su espalda al ver a Alice petrificada en la entrada de la cafetería, con los ojos chispeando de furia y los labios fruncidos, dejando entrever los dientes.

A continuación salimos disparados sobre el asfalto, solo esperaba que Charlie no apareciera por allí, no me imagino la cara que pondría al vernos en esas.

—¡Agárrate fuerte! —gritó Jacob.

Me abrace más a su torso mientras él dirigía la moto hacia la carretera. Sabía que aminoraría la velocidad en cuanto llegásemos a la orilla del territorio quileute.

Fue muy evidente el momento en que llegamos a zona segura. Ambas motocicletas redujeron la velocidad y Jacob se enderezó y aulló entre risas, a las cuales se le unió Paul.

—¡Lo logramos! —gritó —Como fuga de la cárcel no está mal, ¿A qué no?

—Bien pensado, Jake - grito un poco alto Bella para que la escucha ramos.