¡PELIGRO, ES MAYOR! || L.P

capitulo 31.

otro día rutinario como tantos, esta vez con un poco más de nervios de parte de la pelinegra qué era su primer día de contaduría con otro profesor.

bajo a hacerse su desayuno normalmente y cuando terminó este agarro sus cosas para buscar a su amiga.

en el camino fue pensando que estaba haciendo algo mal en no decirle que se cambio de clase pero al fin y al cabo se iba a enterar por lo que prefirió ocultarlo unos segundos más.

llego y toco timbre para después de cinco minutos encontrarse con su rubia amiga del otro lado, caminaron en silencio hasta que Amelia se dio cuenta de algo.

- estas bien? estas nerviosa -señaló los dedos de su mano qué no paraban de moverse

- ah, eh si. Bueno no, no se

- es en serio? -río- preciera qué te estás por cagar encima clau

- juró que odio que me conozcas tanto. Pasa lo de la clase, te acordas lo de que me cambie de aula en contaduría?

- si, para que no haya más sospechas, que tiene? estás nerviosa porque no vas a ver a tu novio? el del otro aula también es lindo

- no es eso tonta -suspiró- pasa que no le dije a Li, ayer tuvimos una noche tan hermosa que no se me dio cosa decirle

- no.. noche hermosa? CÓMO QUE NOCHE HERMOSA? DEJASTE QUE TE LA META?

- AMELIA -rio con intensidad tapándole la boca- por favor, no quiero que media calle se entere

- ay bueno perdón! pero hoy me quedo en tu casa y me contas ABSOLUTAMENTE TODO, seguí con lo de la clase

- bueno -hizo una pausa para seguir- si se enoja me daría un poco de culpa, ósea no se tiene porque enojar pero no se, me da esa sensación -jugó con las mangas de su buzo en modo de nervios

- ay amiga, no creo que se enoje, no tendría por qué hacerlo. Supongo que va a entender el por qué, vos solo queres que no se siga esparciendo el rumor pelotudo y no arriesgarlo, es por el de todas formas

- si, aunque también es para no quedar tan mal yo, no quiero que todos me digan que aprobé solo por estar con el, de todas formas es buena la opción que tome

- si sabes que es buena para que seguís cuestionándola tonta, apura el paso que llegamos tarde

ambas pasaron por las grandes puertas del colegio y fueron corriendo a su primera clase, que esta vez por motivos era contaduría separadas.

Claudia fue hacia el otro salón de la materia y con vergüenza tocó la puerta ya cerrada, indicando que habían empezado.

- señorita Mileghar -hablo el profesor- pense que ya no venía, adelante

- gracias profe -miro todo el lugar buscando un asiento

- puede sentarse en el fondo, solo espero que no hagas quilombo

luego de eso la alumna dio una sonrisa y fue a sentarse a su nuevo lugar, un poco avergonzada ya que no conocía a nadie.

la clase transcurrió tranquila como cualquier otra, ni bien sonó el timbre corrió al patio para encontrarse con su mejor amiga.

cuando la encontró con la mirada vio que su cara no era de buen humor.

- qué pasó linda? por que esa cara?

- el profesor payne estuvo de mal humor toda la clase y nos mando creo que 15 ejercicios, a lo ultimo ya no lo escuche, me dolía la mano de tanto copiar

- que raro, el no es de dar mucho, seguro le pasó algo

- desde que le dije que te habías cambiado de clase estuvo así, yo creo que no fue por el café de la mañana, y te espera en su salón ahora

a Claudia se le paró el corazón por un segundo al escuchar eso, alcanzó a decirle gracias cuando ya se veía corriendo hacia la otra punta para el salón.

después de casi necesitar una ambulancia de tanto correr llego hacia la puerta y entro sin golpear después de ver por la ventana que solo estaba el.

- me mandaste a llamar? -estiraba su buzo como un signo de nerviosismo

- si, siéntense

desde el segundo que la trato de usted ella sabía que no venía bien la mano, tomó asiento donde le indicó con la mano y espero a que hablara

- así que -hizo una pausa revisando papeles con una no amigable cara - te cambiaste de salón en mi materia, se puede saber el motivo?

- déjame explicarte, había tantos rumores de nuestro noviazgo que decidí cambiarme en tu materia para que no tengan más motivos

- y no era más fácil negar todo y no vernos cerca de la institución? era lo que habíamos acordado

- se que era lo que habíamos acordado pero cuando vi a mi padrino dudando sabía que nos iba a estar vigilando y no quería eso, no quiero sentirme insegura de si alguien nos ve todo el tiempo

- y por qué no me dijiste? me lo desayuné por boca de tu amiga, porque ni siquiera tuya, mandaste a tu amiga

- para, una cosa es que pidas explicación de por qué no te lo dije y otra es que me acuses de algo, le pedí por favor que te lo dijera porque llegaba justo con el horario, perdón por no decírselo personalmente señor -contesto del mala gana

- no era necesario decírmelo en la cara, con un mensaje estaba bien, creo que tenes mi número al menos que lo hayas eliminado -respondió con peor tono

- sabes que liam? esto no va a ningún lado y no veo el sentido de seguir discutiendo por algo que no tiene sentido. Cuando estés más calmado nos juntamos en casa y lo hablamos

- para que? para que terminemos arreglándolo en la cama? -soltó sin pensar

- asi que eso pensas de mi, muy bien, me doy cuenta que de a poco se te cae la cara. Sabes que? ándate a la mierda, vos y tu pensamiento de machista -se fue dando un portazo

las lágrimas en los ojos eran más fuerte pero aun así trato de que no se viera, no podía creer que su novio le haya dicho eso, pensando eso.

esa pelea le sacó el hambre y las ganas de todo por lo que fue directo al salón que le tocaba para evitar tener que dar explicaciones.

sacó sus cosas y se preparó para la clase que le seguía, trato de no pensar en nada y concentrarse al cien por ciento en las materias que restaban.

a la salida le dijo a su amiga que tenía trámites por hacer que se había olvidado y que no podía ir a su casa, luego de un par de preguntas de Amelia logró irse sola como ella quería.

la noche había caído y se estaba preparando su comida mientras ignoraba las 20 llamadas por segundo que recibía de liam, si quería atender pero su lado orgulloso le decía que no lo haga.

a la llamada número 100 decidió atender, simplemente porque pensó que podía llegar a arreglar todo de una vez por todas.

- que queres -respondió de mala gana, tragándose las lágrimas

- odio que me dejen con la palabra en la boca, tenemos que hablar

- a si? odias que te dejen con la palabra en la boca? yo odio que mi novio se enoje en vez de apoyarme en una decisión que era mejor para los dos

- Claudia por favor, no seas tan chiquilina

- y ahora aparte de puta soy chiquilina, hacete un favor y anda a dormir, cuando dejes de tener esos pensamientos retrogradas y te des cuenta de las cosas ahí me llamas.

luego de colgar empezó a soltar todas las lágrimas que tenía atoradas, no podía creer que su novio piense eso de ella, le
dolía y mucho, más de lo que ella quisiera que le doliera.

se puso el pijama y entre lágrimas y balbuceos in entendibles se acosto, pensando en que momento su noviazgo de película se fue a la mierda, deseando que cambie su mentalidad y puedan hablar como se debe.

esa noche aunque no lo quisiera durmió abrazada a una remera que le había regalado de el, con su perfume aun impregnado en toda la prenda, sintiéndose más cerca de él.