59. ❝¿Desconocido?❞🌙

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No hago más que quejarme por cinco minutos

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No hago más que quejarme por cinco minutos. Tal vez no parezca mucho tiempo, pero sí lo es teniendo en cuenta que me duele la espalda por haber dormido en el suelo. Me caí sobre mis zapatos, y allí quedé. Al parecer, dormí de esa manera toda la noche. No lo comprendo. Tampoco comprendo qué hace mi gato de mascota sobre mi colchón. Se llama Gato. Y no tengo mascota, de todos modos, pero sé que es mío. Lo habré tomado de la calle y me lo habré quedado. De pequeña me gustaba hacer eso. Mi madre me regañaba, recuerdo. No era algo que me importara, de todos modos. Sigue sin importarme. Pero sí me interesaría saber de dónde salió el gato Gato. Será el misterio de la mañana, supongo.

Me levanto del suelo, muy despacio. Me sujeto de los bordes de la cama para ayudarme un poco. Recuérdame no dormir en el piso nunca más. Gracias, te lo agradeceré de nuevo más tarde, seguramente cuando la jodida espalda me deje de doler. Y dejemos en claro que ya he aprendido la lección: no dejar los zapatos al lado de la cama. Toma nota si quieres, estoy segura que te será muy útil por si te ocurre lo mismo que a mí alguna vez.

Intento hacer a Gato a un lado, muy despacio para que no se enfade. Todos los gatos que he tenido antes fueron bastante malhumorados. Me gustaban por eso mismo: era idénticos a su dueña. O sea, yo. Claro. ¿En qué pensabas?

Escucho cómo Gato ronronea, y me da pena despertarlo. Lo dejo tal como está, y tras buscar mis patuflas y encontrarlas, me las pongo para ir hacia la cocina. Me prepararé el desayuno, no sabía que dormir sobre tu calzado daba tanta hambre.

Me encuentro a mi abuela Isabella en aquel lugar. Le doy los buenos días, y me contesta de la misma manera mientras me acerco al refrigerador para tomar de allí la leche. Ni siquiera sé por qué lo hago, ya que detesto la leche.

—¿Sabes de dónde ha salido el gato Gato? —le pregunto, ya que tengo la oportunidad—. Porque simplemente no lo recuerdo...

—Pues, sí —contesta—. Te lo ha regalado David.

Volteo para verla a la cara. También veo que no está bromeando, y eso me hace estar más confundida. A él no le gustan los gatos...

What is love? © [WIL #1] Disponible en Amazon (Tapa blanda y Kindle)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora