CAPÍTULO 46 - La noche de Adora (Parte 1)

3K 260 73
                                    


 "Pero ¿cuándo las has metido? ¿Cómo sabías...?"

"Una siempre tiene que estar preparada para el amor."

Mara finalmente se fue a su deseada cita.

"Adora, querida, vamos a comer."

Con la tarde libre, y sin una Mara que la presione. La capitana tenía unos claros planes. Se dirigió a la casa de cierta gatita, con una caja de galletas como excusa. Catra se había tomado el resto de semana libre, pero el lunes ya no habría excusa para no asistir.

Llegó a la casa, y como siempre, nerviosa de cómo iban a salir las cosas.

Llamó a la puerta, impacientándose y aumentando su nerviosismo al no recibir respuesta. Ésta vez, tocó el timbre. Y ya que parecía que no había nadie, dio otra timbrada, antes de pensar en alejarse de la vivienda, derrotada, sin éxito.

"¡Ya va, ya va! Qué pesada es la gente." Una voz carrasposa se quejaba en el interior.

Al abrirse, pasó lo de siempre. Adora comenzó a babear para sí, deleitándose con una visión de la que nunca se cansaría. Una morena desaliñada, cansada de cualquiera que la importune. Con unos shorts grises con tiras blancas en las caderas, y un top a juego, que dejaba ver más de lo que se había esperado aquel día.

"¡Oh! Eres tú." - dio un rápido vistazo, analizando si había alguien más. - "Mmm. Pasa."

Adora la obedeció, como para no hacerlo. Una vez en el hall, se percató del silencio.


"¿Estás sola?"

"Sí. Mi madre ha salido." - seguía diciendo mientras subía las escaleras. - "Cierra la puerta anda."

La rubia se apresuró a hacerlo, para seguirla. Se dirigió a su cuarto, supongamos para seguir con lo que hacía. Se sentó en su desmoronada cama, apoyándose en la pared.

"¿Te he interrumpido?"

"Que va. Estaba leyendo, y casi me quedo dormida. Eso sí me lo has interrumpido." - dijo de manera bastante agradable. - "¿Qué llevas ahí?"

"¡Ah! Sí. Te traje galletas."

"¡Qué bien! La verdad tenía hambre. ¿Tú quieres leche?"

Se pusieron a merendar en aquel desordenadamente ordenado cuarto. Al menos estaba mucho mejor que el de la capitana. Las dos devoraban aquellas pastas como si no se hubieran alimentado aquel día, parecía una competencia, como todo lo que hacían esas dos. Cuando quedaba una, realmente no se percataron, y fueron a por ella. Hicieron contacto, antes de volver a la realidad.

"Ah..."

"..."

"Perdona, cómetela tú." - vergonzosa de aquel roce, de aquel comportamiento. Aquel irracional énfasis por llevarse algo a la boca.

"No, tú eres la invitada."

"Las traje para ti."

"Mi madre me mataría si me viera siendo descortés con el huésped."

"¿Desde cuando le haces caso a tu madre?"

"También es verdad." - Adelantándose y cogiendo la última galleta.

"¡Eh! ¡Espérate!" - abalanzándose sobre ella.

"No, ya es mía."

"Dijiste que para el huésped."

"¡Nada! Para mí." - decía mientras se la trataba de llevar a la boca. Adora lo impedía como podía.

"Un cachito, un cachito, por favor. Una mordida." - le intentaba suplicar.

TE DESEO (Omegaverse) (CATRADORA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora