Haibara vio el corte que se había hecho el chico y se acercó a él. Sin pensarlo dos veces, se metió el dedo del corte en su boca.
- ¿¡Haibara!? 0////0
- Es mejor que la herida esté limpia, ¿no crees?
- Sí... o////o
- Vosotros dos... ¿Qué hacéis? -preguntó la voz inocente de Ayumi, que acababa de volver con los demás niños y el profesor.
- ¡Nada! ^ ^u -respondió Conan inmediatamente.
- ¿Seguro? ¬_¬ -insistió Genta- ¿No estarías intentando hacerle nada raro a la pobre de Haibara, no? ¬¬
- ¡¡Claro que no!! O////O -respondió un Conan ruborizadísimo.
- Ejem. -intervino Agasa, con una aclaración de voz- ¿Por qué no ayudamos todos a Ai a preparar la cena?
- ¡Sí! -respondieron los tres niños.
Pasadas unas horas, ya estaban todos durmiendo o intentando dormir. Conan se despertó a causa de los ronquidos del profesor, y gracias a ello se percató de que el saco de dormir de Haibara estaba vacío. El chico se puso las gafas y se ató los zapatos y salió de la tienda de acampada. Encontró a la niña de cabello castaño sentada junto a la hoguera.
- Ey, ¿qué haces? -preguntó Conan.
- Me gusta observar las estrellas... Con su presencia hacen que la oscura y negra noche aparezca agradable al humano... ¿No te parece bonito un cielo estrellado? -le preguntó la chica al joven detective.
- Me pareces más bonita tú -respondió Conan, inconscientemente.
- ¿Eh? 0////0 -se sorprendió la niña.
- ¡Quiero decir...! 0////0 -intentó rectificar Conan al comprender lo que acababa de decir- ¡Quiero decir que tú eres comparable a una estrella!
- ¿Cómo? -preguntó extrañada la niña.
- ¡Pues eso! -agregó Conan, nervioso- ¡Qué eres comparable a una estrella! Dentro de La Organización negra, tú eras como una estrella, ¿no?
- ¿Yo? -preguntó todavía más extrañada la niña.
- ¡Sí! En medio de ese color negro tan característico en sus ropas, tu bata blanca de científica debía resaltar, ¿no? ¡Como una estrella en la noche! ^ ^u
- Que comparación más estúpida... ¬¬ -dijo Haibara.
- ¿Tú crees? ^^u -intentó disimular Conan.
Haibara se cansó de la conversación y se levantó de la piedra sobre la cual se había sentado.
- ¿Eh? ¿A dónde vas? -preguntó Conan, intranquilo.
- A buscar un lugar despejado para orinar. ¿No puedo? -respondió Haibara como si nada.
- ¿Eh? 0////0 -se ruborizó de nuevo Conan- ¡Oh, sí, claro! ^^u
- No vayas a seguirme ¬¬ -ordenó ella al chico.
- Tranquila, no te preocupes... ^_^ U
Conan vio como Haibara desaparecía entre los matorrales y después suspiró.
- ¡Maldita sea! -se dijo a sí mismo- ¿Qué me pasa? ¿Qué me está pasando con ella? ¿Por qué me cuesta tanto expresarme libremente con ella cerca? Antes no era así...
A los pocos minutos llegó Haibara, limpiándose las manos con un pañuelo.
- ¿Nos acostamos ya? -preguntó la niña.
- ¿¡Quéééééé!? O////o -exclamoó Conan, ruborizado y sorprendido- ¿¡Quieres que nos acostemos juntos!?
- "¿En que está pensando éste?" ¬_¬u -se preguntó Haibara.
- Haibara, aunque tengamos mente de adulto, no debemos olvidar que nuestro cuerpo es... -iba diciendo Conan, cuando ella le interrumpió.
- Ey, ey... No se qué habrás entendido. Yo sólo pregunto si nos vamos a dormir ya.
- ¿Eh? O_o ¡Ah, si, claro! ¡Sólo estaba bromeando! ^_^ U -Conan salió como pudo de aquella conversación mal interpretada.
Al poco rato ya se habían metido cada uno en su saco. Ella se durmió rápidamente, pero a él le costó bastante, debido a un conflicto interior que le mantenía despierto.
- Esto es muy extraño... -se repetía una y otra vez el chico- Lo que me está pasando con Haibara... Esta sensación... Ya la había notado antes... ¿Dónde fue?
Conan recordó su etapa infantil siendo Shinichi. Recordó lo que empezó a sentir por Ran y cuando empezó a sentirlo. Alarmado, levantó la parte superior de su cuerpo y dijo en voz alta:
- ¿¡No me habré enamorado de Haibara!? O////O
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Un amor de doble filo
RomanceEsta historia no es mía pero es una excelente historia que la voy a publicar aquí. Esta historia trata de un romance entre Conan Edogawa o mejor dicho Shinichi Kudo y AI Haibara o mejor conocida como Shiho Miyano Esta historia fue creada por: Sherr...