Alfa & Omega~ Malec ????

Indigno

Él está ahí, durmiendo profundamente. Tan hermoso como siempre. Que tenga el sueño pesado me ayuda mucho. La despedida de anoche también.

Mi omega llora y me impulsa a volver, a enredarme entre sus brazos y quedarme ahí, pretender que nada pasó, seguir durmiendo y despertar a su lado.

Pero no debo. Ella tiene razón; no soy digno de nadie. Él necesita alguien como ella, una Alfa guapa, de buena reputación y mucho dinero, como él. No un Omega pobre como yo.

Le dejé una nota. Sé que es poco, pero tendrá que ser suficiente. Nunca volverá a saber de mí. Espero que no me odie. Lo que le dije anoche es verdad. Lo amo más que a nada, y justo por eso estoy haciendo esto.

Adiós mi amor,digo con lágrimas mientras le doy un último beso, y después me voy sin mirar atrás.

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Despierto y automáticamente palpo el espacio a mi lado buscando a mi Omega. Cuando no siento nada, todo rastro de sueño se esfuma de mi cuerpo. Me incorporo y abro los ojos rápidamente, y confirmo lo que ya sabía: Alexander no está.

Me levanto y lo busco por todo el loft, pero no hay rastro de él. Vuelvo a mi cuarto a buscar algo para ponerme y es entonces cuando la noto: una notita en la puerta del clòset.

Magnus:

Cuándo leas esto estaré muy lejos. Te amo, y espero que entiendas que es por tu bien. No te preocupes por mí, no me busques. Busca la felicidad con alguien que sea digno de tu amor.

Siempre tuyo.
Alexander.

Volteó hacia atrás y veo la ropa que Alexander traía anoche en el piso. Recuerdo un beso con sabor a lágrimas, y una despedida en la mañana, cuando pensé que estaba soñando.

Entonces la realidad me golpea: Alexander se ha ido de mi lado, y no piensa volver.

Pero no me voy a rendir, Alexander. Una vez te dije que amaba los desafíos, y ahora te lo voy a demostrar.

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Ha pasado una semana. Al parecer, por primera vez en su vida me hizo caso. Seguramente ya está con alguien que valga la pena.

Me deprimo pero no tengo ningún derecho a hacerlo. Al fin de cuentas, yo fui quien lo dejó.

Ahora trabajo en la librería donde nos conocimos; es algo sentimental de mi parte. Aunque no lo parezca, es un lugar seguro; una vez el propio Magnus me dijo que si no hubiera perdido esa apuesta con sus amigos, jamás habría venido aquí, y no nos habríamos conocido. Tal vez habría sido mejor así.

Salgo de mis recuerdos cuando mi jefe,un Beta ya mayor entra y me dice que hay un Alfa muy guapo que necesita información.Me dice que me arregle, y me guiña antes de irse.

Eso es extraño. Él sabe que soy un Omega soltero y se ha encargado de todos los clientes Alfa durante la semana. ¿Por qué hoy es diferente?

Me paso una mano por el cabello y me quito el uniforme;  será el último cliente del día. Tengo un buen presentimiento; tal vez  por eso mi jefe accedió.

Salgo al lugar donde están los libros, y su olor me golpea. No, no, no. No puede ser. No debería estar aquí. No.

Doy la vuelta y empiezo a correr de regreso, esperando en vano que no me haya visto. Siento su mano tomar mi brazo, y en un movimiento fluido, estoy entre sus brazos.

No lo puedo negar más. Mi lugar está entre sus brazos. Estoy calmado y feliz y por primera vez desde que me fui de su lado, me siento completo.

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