Fired & Hired

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-Señor Lightwood, me temo que tendremos que despedirlo.

Alec escuchó la fría declaración, mirando sorprendido a los ojos de su más grande amor.

Y Magnus trató de no quebrarse al ver la sorpresa y la tristeza llenando esos ojos que alguna ves lo habían mirado con tanta adoración y amor.

-¿P...Puedo saber por qué?- Alec estaba haciendo su mejor esfuerzo para no quebrarse, y Magnus lo sabía.
-Cuando le di su ascenso, fue porque vi el excelente trabajo que usted realizaba... Pero últimamente la calidad de su trabajo ha disminuido, se queda dormido en las reuniones, e incluso ha habido ocasiones en las que no me ha entregado el trabajo que le pido... Cómo imaginará, no puedo permitir esa clase de fallos, y a menos que tenga una muy buena excusa, no puedo darle más tiempo- la expresión de Alec se volvió determinada.

-La tengo- Magnus se incorporó.
-Lo escucho.
-Hace aproximadamente un mes, mi relación con mi Alfa llegó a su fin, y aunque era más que evidente que iba a terminar, aún así me afectó... Por eso le pido de su consideración, y le prometo que si me da otra oportunidad, en una semana me recuperaré, y le tendré todo lo que le debo al día- el moreno lo analizó.

-También hace un mes mi Omega terminó su relación conmigo, y no me ve durmiendome en las reuniones ¿O sí?- replicó tranquilamente, haciendo enojar a Alec.

-Bueno, no sé porque lo habrá terminado su Omega, pero tal vez no era tan importante para usted, y por eso no le afectó- la expresión del Alfa se endureció.

-Señor Lightwood, le pido de favor que no mezcle mis asuntos personales en asuntos de trabajo.
-Si no quería que lo hiciera, no debió haber empezado - respondió el Omega, desafiante, y Magnus respiró hondo.

-Señor Lightwood... Quiero que tenga presente que yo traté de ser paciente con usted, y que lo que pase de este momento en delante, se lo buscó usted mismo- Magnus se dirigió a la puerta, y cerró con seguro.

Después se giró y lo encaró.

-Alexander, yo te entregué mi corazón, y mi alma, tú lo sabes ¿Y aún así te atreves a dudar de mi amor por ti?- Alec desvió la mirada.
-Entonces si era personal- Magnus se jaló el cabello, desesperado.
-Eso nunca fue personal... Lo que te dije era cierto... Si te di el ascenso fue porque te lo habías ganado... No tenía nada que ver el que estuvieras saliendo conmigo- Alec bufó.
-No mientas- Magnus frunció el ceño.

-Si tuvo que ver, fue sólo por el hecho de que, al salir contigo, pude ver de cerca lo increíblemente inteligente que eres, y el impecable trabajo que realizas, nada más - Alec se puso nervioso, pero lo ocultó.

-¿Y entonces por qué el despido, si sabes que mi trabajo es bueno? Si son razones personales¿cierto?¿Te molesta que haya terminado contigo, y por eso me quieres castigar, haciendo que yo también pierda algo que amo?- Magnus soltó una risa triste.

-Tienes razón. Sí son razones personales- Alec bufó -...pero no es lo que tú crees.
-¿Entonces por qué?- exigió Alec, y Magnus volteó a verlo con una expresión triste.
-Porque me preocupo por ti.- Alec rio.
-¿Te preocupas por mí, y me despides? Si es así como va a ser entre nosotros, preferiría tu indiferencia.
-No es como piensas...
-¿Entonces cómo es? Por favor explícame, porque no lo entiendo- Magnus suspiró.

-Alexander ¿Crees que no he visto los cambios en ti? Desde que terminamos, llegas tarde, te duermes en las reuniones, y cometes errores básicos en tus trabajos.
-Nadie es perfecto- dijo Alec, a la defensiva.
-Eso es cierto... Pero te conozco, y te he visto de cerca... Siempre has sido muy dedicado a tu trabajo, siempre procurando que quede lo mejor posible, casi perfecto.- Alec abrió la boca para responder, pero al ver la expresión de Magnus, lo pensó mejor, y la volvió a cerrar - Y sé que si ahora estás fallando, no es porque te estés descuidando, sino porque no estás bien- se arrodilló delante de él - Me preocupas, Alexander, porque sé que no estás bien, y es por eso que quise hablar contigo- Alec desvío la mirada.

Alfa & Omega~ Malec ????Donde viven las historias. Descúbrelo ahora