Ladymoon《 Adrien Agreste y tú 》

《 Corazón de piedra 》

Jueves.

Desperté y como siempre hice mi rutina.

Me vestí con una blusa a líneas en colores cálidos, un jean azul y una chaqueta de jean del mismo color, me coloqué mis tenis blancos, cepille mis dientes, desayuné y Josh me llevó al instituto.

—Llegamos, señorita Baez —habló mi guardaespaldas abriendo la puerta para que baje del coche.

—Gracias, Josh.

El guardaespaldas se fue y antes de que llegaran los periodistas enloquecidos entré al instituto.

—¡________! —gritó alguien a mis espaldas.

—Oh, buen día chicos —Marinette, Alya, Nino y Adrien se acercaron a mí.

—¿Cómo estás ______-amiga? —preguntó Nino chocando puños conmigo.

—Muy bien, ¿Y ustedes? —sonreí.

—Igual —respondieron al unísono.

—¿Hoy no vinieron tus fans? —preguntó Adrien, divertido.

—No, entré antes de que me dejen sin aire —todos rieron ante mi comentario y la campana sonó indicando el inició de clases.

Nos dirigimos al salón y me senté junto a Alix, al parecer Marinette y Alya ganaron el lugar detrás de Adrien y Nino, pues Chloe junto a Sabrina estaban sentadas delante de mí.

La primera clase que tuvimos fue la de historia, la cual pasó muy rápido. Sonó la campana del receso y todos salimos a la cafetería.

—Oye ________ —habló Alix en mi dirección, mientras las dos estábamos en la fila para pedir nuestra comida.

—¿Si? —cuestione distraída, mirando la cartelera para elegir mi pedido.

—Soy yo ¿O Adrien no te quita la mirada de encima? —elevó una de sus cejas.

—¿De qué hablas? —volteé en dirección a donde apuntaba su mirada y estaba en lo correcto, a unos pasos de nosotras se encontraba el rubio junto a el de gorra sentados en una mesa.

Solo que mientras el moreno hablaba, el oji-esmeralda ponía atención en otra cosa.

Cuando nuestras miradas se cruzaron, Adrien volteó a ver a Nino con un tono carmesí en sus mejillas.

—Ahm... creo que solo lo estás imaginando, mira ya nos toca —traté de cambiar de tema mientras arrastraba a Alix para comprar la comida.

Nos sentamos en una mesa. Yo pedí un sándwich y un jugo de durazno, mientras que Alix solo pidió una manzana, pues no tenía mucha hambre.

—¡Chicas! —nos gritó Alya mientras se acercaba a nosotras con sus otros tres amigos.

Los cuatro se sentaron en nuestra mesa con su comida y comenzamos a platicar.

Pov Adrien:

Nos encontrábamos compartiendo un almuerzo con mis amigos mientras platicábamos, y no sé porqué razón, pero mis ojos siempre se desviaban hacia cierta castaña. Ella estaba sentada delante de mí, sus expresiones eran suaves, sus gestos delicados y cuando ríe por algo, arruga su nariz.

Sacudí la cabeza para salir de mi trance al notar que ya siquiera escuchaba lo que mis amigos decían.

Sonó la campana para volver a clases, así que todos recogimos nuestras cosas y nos dirigimos de vuelta al salón.

Apenas me senté en mi lugar, Nino me miró algo... ¿Pícaro?

—Y... ¿me vas a decir? —preguntó con un tono extraño, alzando sus cejas repetidas veces.