XXIX

57 7 0
                                    

MARINETTE:

-Hola nena- saluda cuando se planta frente a mí en el lugar que acordamos.

-Hola- correspondo su saludo, dándole un beso rápido en la mejilla.

-Te ves hermosa- dice, dándome un beso corto en los labios para después pasar un mechón de mi cabello detrás de mí oreja.

-Gracias, aunque tú también te vez muy guapo- le halago, logrando que él sonría con falsa arrogancia que me hace sonreír divertida.

-¿Y porque querías verme con urgencia?, ¿ocurre algo?- pregunta con un toque de preocupación.

-Sí, hoy vamos a romper algunas reglas- le digo, logrando que él me mire confundido.

-No vamos a ir a prisión ¿cierto?- pregunta, logrando que lo mire entre la ironía y la diversión.

-Claro que no, y menos en tu cumpleaños- le digo con una gran sonrisa.

Él se sorprende al principio, pero después me mira con una sonrisa ladina.

-Te acordaste- afirma, y yo asiento con la cabeza mientras le doy un abrazo.

-Felicidades- le digo, dejando que me abrace por la cintura todo el tiempo que quiera. A fin de cuentas me gusta estar entre sus brazos- te traje un regalo- le digo, abriendo mi pequeña bolsa que cuelga de mi hombro en busca de la caja negra aterciopelada con un moño verde encima.

-No debiste molestarte- dice cuando le doy la caja.

-Ábrela- le pido. Era la primera vez que le daba un regalo a alguien que no era mi padre en muchos años, así que sí, estaba algo nerviosa y expectante por su reacción.

Cuando lo hace me mira sorprendido pero después sonríe, negando débilmente con la cabeza.

-¿Te gusta?- le pegunto, curiosa.

-Me encanta, gracias- responde, colocándose el reloj de oro que compre para él desde hace un par de días.

Me da un beso en la frente antes de entrelazar su mano con la mía.

-No esperaba que te acordaras de mi cumpleaños- dice, bajo mi mirada curiosa.

-No soy tan mala novia como parezco- respondo con falso enfado, pero al darme cuenta de lo que acabo de decir, el calor sube a mis mejillas.

¿Acabo de autonombrare su novia?

No éramos una pareja oficial, pero Adrien era lo más cercano a un novio.

Eso me daba derecho ¿no?, además, a él no pareció molestarle, al contrario.

-No lo decía por eso, solo que al parecer todos olvidaron mi cumpleaños hoy- responde, y yo disimulo una sonrisa cómplice.

-Oh- respondo con falso pesar, ya que sabía el trasfondo de esto- no te preocupes por eso ahora, yo haré que tengas un cumpleaños memorable- le respondo, volviendo a sonar emocionada y que él me sonría de nueva cuenta.

-Todos los días a tu lado son memorables- responde casi inconscientemente, despertando las mariposas en mi estómago que ya estoy acostumbrada a sentir cada que estoy a su lado.

-Eres muy cursi- le digo en broma.

-Es lo que provocas- responde, tirando de mi mano hasta que mi costado choca con el suyo.

Dios, este hombre va a terminar matándome.

[...]

Un parque de diversiones era mi excusa perfecta para mantenerlo lejos de casa. Estuve investigando y era un lugar seguro gracias a los filtros de seguridad, no había edificios cerca para posibilidad de algún francotirador rondando, solo debía tomar ciertas precauciones.

BAD LIFE//FINALIZADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora