Atracción a través de una ventana

Contando los días

Eren

Después de la fiesta de Mikasa llegue al apartamento de mi madre, era una de las mejores noches que había pasado desde que me fui de la ciudad, ver lo hermosa que estaba esa chica que hacìa enloquecer todos mis sentidos. Mire por la ventana y la vi, estaba buscándome con la mirada en el pequeño balcón de su cuarto y yo salí en busca de su presencia.

--Hola, no pudimos hablar mucho en la fiesta, te gustaría hablar un rato?.- me dijo con una sonrisa en los labios y una mirada curiosa, no podía negarme a esta oportunidad de estar tan cerca de ella y asentí recargándome en el barandal de el balcón.

--Claro, como has estado Mikasa?.. -le pregunte esperando ansiosamente su respuesta mientras ella jugaba con sus dedos pensando en que contestar.

--Pues muy bien, todo a estado muy bien, volví a la escuela, supongo que la tía Carla te lo menciono, me ha contado tanto de ti, siempre que volvía de visitarte los fines de semana llegaba a contarme. -dijo mikasa con una hermosa y emocionada sonrisa en sus labios. La verdad no me sorprendía que mi madre le contara todo a Mikasa, pues también me contaba todo de ella, supongo que ambos ganábamos.

solté una risa y negué con la cabeza, me parecía todo tan gracioso y Mikasa lo entendió, sabia que mi madre no había echo eso solo con ella, si no que a mi también me hablaba de su vida.

--Supongo que no soy la única que ha recibido noticias ehh. -dijo ella con un suspiro.

El silencio nos invadió, nuestras miradas se entrelazaron y permanecieron así, como si esa fuera la única forma de comunicación que teníamos. Ella solo sonrió, su piel blanca brillaba con la luz de la luna que la hacía resaltar entre todas las cosas brillantes que yo había visto, su cabello lacio color negro, sus labios rojos por los residuos del labial, Mikasa era hermosa y me recordaba a la primera vez que la vi en este balcón, mi corazón enloquecía de felicidad.

***

Mikasa

Después de la fiesta le ayude a mi madre con la limpieza, estaba cansada y tenia mucho sueño, pero estaba muy feliz de lo bien que la había pasado, mis amigas, Jean, mi tía Carla, mi madre estaba feliz, y Eren, estaba sorprendida de su presencia el día de hoy pero estaba feliz por verlo de nuevo, sabia que no se quedaría mucho tiempo pero igual quería saber de su boca como la había pasado. Termine de limpiar, pero vi la luz prendida en el cuarto de Eren, salí al balcón esperando poder intercambiar algunas palabras con el y funciono, el salió y hablamos un rato, aunque al final nuestra conversación se cortara por un profundo silencio, pero su mirada con la mía fue algo que ni el silencio pudiera tocar, esa era la mejor conversación que Eren y yo pudiéramos tener después de tanto tiempo, el estaba tan diferente, parecía un chico mas maduro y fuerte, quizás el trabajo en el campo le estaba ayudando, "¿Pero que estoy pensando?" me dije a mi misma, por mas que mi corazón latiera de felicidad por verlo, tenia el sentimiento de Eren como una hermano pequeño, fue poco tiempo el que estuvimos esa relacion de hermandad pero nuestra fuerte conexión se debía a eso, no?...

____DOS DIAS DESPUES____

Eren

Después de estar dos días con mi madre en la ciudad tuve que volver con Zeke al campo, no tuve la oportunidad de despedirme de Mikasa, pues ella se iba muy temprano a la escuela, así que me fui. Llegue a casa emocionado, me encontré con Armin y le conté todo lo que había pasado en esos dos días, empecé a contar los días esperando volver a la ciudad, cualquier excusa que pudiera hacerme ir a verla, pero no se presto la oportunidad.

Pensaba en ella en todos lados, en la escuela, en el pueblo, en casa, incluso cuando estaba con Armin, pero no era raro para mi, era un sentimiento que siempre había existido en mi desde la primera vez que vi a Mikasa, ella era importante para mi aunque la distancia nos separara.

..

Pasaron los meses tan lentamente que eso me ponía cada vez mas ansioso, quizás en mi cumpleaños o en navidad, en año nuevo o el día de pascua, quizás el cumpleaños de mi madre o el de la señora Ackerman pero yo quería volver a la ciudad, vivir en el campo ya me había cansado y no me atrevía a decírselo a mi padre, pues sabia que la idea de que yo volviera a la ciudad le molestaría e intente recurrir a la esposa de mi padre por ayuda.

--Oye Dina, puedo hablar contigo?... -Le dije cuidadosamente al acercarme, ella estaba en el fregadero lavando los platos cuando volteo a verme.

--Claro Eren, dime que sucede. -se detuvo de lavar para prestar toda su atención en lo que yo estaba apunto de decir, su mirada era cálida pero igual me ponía muy nervioso.

--Pues sucede que... extraño a mi madre, extraño la ciudad y a los amigos que tengo ahí, quisiera volver pero se que mi padre no me lo permitiría es por eso que pensé en recurrir a ti, quizás el pueda escucharte y podrías convencerlo de dejarme ir, el ya te tiene a ti y a Zeke, siento que yo solo sobro en todo esto y mi lugar es estar con mi madre. -le solté todo lo que pensaba mientras miraba al piso por miedo a la reacción que tendría su cara, pero al mirarla de frente sus ojos contenían lagrimas "¿Que carajos?" pensé.

--¿Eso es lo que piensas Eren?, que tu solo estas aquí por capricho de tu padre y no porque te quiera a su lado porque eres su hijo... entiendo tu frustración y entiendo que no todo puede ser como tu quieres pero quiero que sepas que yo también te veo como un hijo aunque tu no me veas como una madre, me he encariñado contigo y ahora que Zeke se ira a la ciudad para estudiar tu también quieres irte... -las lagrimas de los ojos de Dina corrieron por sus mejillas y no supe que mas hacer así que la abrace.

Quizás estaba siento egoísta con Dina o con mi padre, se que no éramos la familia perfecta pero jamás pensé que Dina lo viera de ese modo, preguntas rondaban por mi cabeza "¿Dina me veía como un hijo?¿Podíamos ser una familia?¿La lastimaría si me voy?", pero había una decisión en mi cabeza, quería quedarme también, aunque no creo que por cariño o amor, si no por culpa. Después de eso le conté a Dina casi todo de mi y ella me conto de su vida, creo que era la primera vez que sentía tanta confianza de estar con ella, le hable sobre como vivía en la ciudad, sobre la amiga de mi madre, y sobre Mikasa, al pensar en ella fue como si mi boca tuviera vida propia y dijera todo lo que pensaba y sentía por Mikasa, sin notar como mis mejillas se tornaban rojas, sin darme cuenta que Dina sabia lo que estaba pasando.

--Te gusta esa chica verdad?. -dijo ella con un tono de emoción y curiosidad al ver mi cara enrojecida por su pregunta.

--N-no, ella solo es mi amiga, no me gusta... -dije sin ser consiente de que Dina era una mujer inteligente y ya era mas que obvio que sabia de mis sentimientos. Una gran duda lleno mis pensamientos... "¿Me gustaba Mikasa?"...

Ella solo se limito a sonreír ante mi respuesta mientras veía mi cara roja.

--Y... como podría saber...que ella me gusta?... -le pregunte sin voltearla a ver, tratando de esquivar su mirada y su sonrisa llena de alegría por mi completa inocencia.

--pues veras... cuando hablas de la persona que te gusta sientes que es lo mas hermoso que conoces, y tu corazón enloquece, sonríes sin darte cuenta cuando estas con ella, o incluso no necesitas estar cerca de ella para sonreír, con el simple pensamiento, te la pasas pensando en ella todo el día, creo que eso es lo que sucede en ti, pude darme cuenta de eso Eren, ella te gusta, y no esta mal que ella te guste, es normal enamorarte y es aun mas hermoso cuando la otra persona siente lo mismo que sientes tu.

Sus palabras golpearon fuerte mi inocente corazón, que no podía sacarlas de mi cabeza y darles vuelta una y otra vez, antes creía que enamorarse era raro y que eso no me sucedería a mi, estaba tan acostumbrado a estos sentimientos por Mikasa que jamás me puse a pensar en que era un enamoramiento, pero las palabras finales de Dina dieron un golpe aun mas fuerte...

"Es aun mas hermoso cuando la otra persona siente lo mismo que sientes tu"

Si yo amaba a Mikasa, que era algo de lo que ya estaba seguro ahora, ¿ella podría amarme también de la misma manera?