Capítulo 37

733 103 0
                                    

                                 
Todo es un jaleo, para arriba para abajo, mi padre está nervioso no para de decirme si lleva bien puesta la corbata si se ha dejado algo olvidado. Intento tranquilizarlo que pesaito, yo termino de maquillarme me pongo mi vestido, mirándome al espejo me veo hermosa.

-—Denisa— me dice mi padre posando su barbilla en mi hombro. Mírate eres igual que tu madre, eres su mismo reflejo, te ves tan hermosa tan bella. 

-—Gracias. Papá quiero decirte que me alegro que hayas tomado esta decisión de casarte con Macarena, es muy buena, te se ve muy enamorado eso hace que yo sea muy feliz viendote a ti. Te deseo la mayor felicidad del mundo.

-—Gracias hija, me siento muy orgulloso de ti, eres lo mas maravilloso que me ha pasado en la vida.— Nos abrazamos entre lágrimas de emoción.

La hora se va acercando, mi padre me ofrece su brazo, bajamos por las escaleras, delante de nosotros mi hermana que se ve como una princesita se une a nosotros para ir a al juzgado.
Llegamos al salón donde se va celebrar la ceremonia, todo está decorado con flores de varios tonos, sobre una alfombra roja nos dirigimos hacia la mesa donde nos espera el juez.
Intento tranquilizar a mi padre está muy nervioso, los invitados comienzan a entrar, de pronto me percato en la chica que vi en mi casa, está muy sonriente, va acompañada de otra chica. Siento una furia que recorre mi cuerpo, mis ojos se entornan mirándola con más rencor, entonces suena la música nupcial. Madre mía pero que guapo está Dumas con su chaqué, lleva del brazo a su madre que lleva un vestido liso color beige con un tocado en el pelo, que guapa está. Pero no consigo apartar mis ojos de Dymas, cuando estamos a la misma altura nuestras miradas se encuentran como dos mares chocando, me sonrojo, le dedico una sonrisa al mismo tiempo que  me guiña un ojo. Ambos nos ponemos a los extremos, el juez comienza leyendo hasta que la ceremonia acaba. Mis padres se besan entre aplausos y gritos de ¡¡Vivan los novios!!.

La ceremonia a sido preciosa, pero Dymas no me ha mirado solo ha tenido ojos para ella, de hecho no para de echarse fotos con ella, lo miro desde la distancia, no lo puedo evitar siento un ahogo en mi pecho que hace que me desprenda de algunas lágrimas. 

La comida ha sido deliciosa, ahora toca el baile.
Una orquesta no deja de tocar piezas de vals, los invitados se animan y bailan. Yo solo bailo con dos hombres mayores mientras Dymas no deja de bailar con unas y otras, siento como una pequeña traición o mas bien unos celos terribles.
Entrada la madruga los invitados comienzan a irse, yo me quedo para última, mis padres se han marchado para comenzar su luna de miel. Sentada en una silla miro a mi amiga Aline, ella intenta animarme pero yo me siento con la moral por los suelos, mis lágrimas comienzan a brotar, entrelazo mis dedos en mi regazo, preguntándome por que me duele tanto este amor que siento hacia el. 

-—Denisa no quiero verte así por favor anímate.

-—Aline, dime que debo hacer para arrancarme este amor que siento hacia Dymas, como voy hacerlo, porque fingiré una torpeza ignorando que el final ha llegado, aun que no quiera admitirlo estoy enamorada como una idiota fracasada, cuantas veces he llorado en mi almohada por no tenerle entre mis brazos, he sentido que mi corazón se ha echo mil pedazos.

-—Creo Denisa que lo mejor es que lo olvides, e intentes hacer tu vida conocer a otro hombre y ser feliz.

—-Gracias por tu consejo, creo que me marcharé por unos meses así intentaré olvidar todo, o por lo menos hacerme a la idea que Dymas no es para mi.

Comienzo hacer mi maleta, necesito alejarme de todo intentar poner en orden mis ideas y mi vida. Aprovechando que tenemos una reunión con los jeques de Dubai me voy para Venecia, allí pasaré una temporada con mi tío. 

No me Juzgues, Ponte en mi lugarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora