07| "Ojo de Dios"

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—No me puedo creer que aún no lleguen, ¿y si les pasó algo? —

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—No me puedo creer que aún no lleguen, ¿y si les pasó algo? —. Steve daba vueltas de aquí hacia allá, como la noche anterior mientras todos estaban sentados en la mesa.

—Relájate hombre, seguro que están bien —. Sam palmeó su hombro mientras él tenía sus manos sobre su cara, jalándola hacia abajo en un intento de calmar su ansiedad.

—Pero, ¿qué tal si hubo un accidente?, ¡o los osos!, aquí hay muchos osos, en especial en los bosques.

Clint soltó una pequeña risita mientras limpiaba las puntas de sus flechas.

—Capipaleta relájate, ya eres anciano, podrías sufrir un ataque —. Todos rieron al escuchar a Tony, menos Steve que le miró enojado.

Narcissa y James entraron a la casa riendo, está se puso un poco incómoda al estar dentro de un lugar tan grande otra vez pero trató de ignorarlo.

—¿Veees?, están bien, no se los comió un oso ni los hicieron puré en la carretera.

Steve soltó un suspiro aliviado y se acercó rápidamente a Cissy.

—Y aquí vamos... —. Susurró Wanda.

—¡Dios mío Narcissa!, ¿estás bien? —. La abrazo y comenzó a revisarla de arriba hacia abajo —. Perdóname, fui un tonto, de verdad, estaba tan preocupado, pensé que se los había comido un oso, o qué tal vez habían tenido un accidente, o que los había abducido una nave extraterrestre o tal vez—

—Steve, estoy bien —. Ella rió al ver la preocupación del rubio y le abrazó de vuelta —. Solo estábamos hablando.

Wanda trató de ocultar una sonrisa, hasta allí podía escuchar los pensamientos de Bucky que repetían lo que había pasado.

—Oh, bueno, lo lamento de verdad.

—No te preocupes, ya olvídalo.

Los tres se acercaron a la mesa de nuevo, donde Tony movía archivos por el holograma, y Nat apuntaba cosas en su libreta.

—¿Y bien, qué tal te fue Bucky?.

—Eh, bien, bien, todo bien —. Clint y Nat se miraron, había contestado demasiado rápido y repitiendo bien, algo había pasado definitivamente, y ellos no tenían ni idea, pero conocían bien a Cissy así que se imaginaban algo.

—¿Y bien?, ¿cuándo empezaremos a trabajar? —. Preguntó la chica.

Por el momento no hay nada que hacer señorita Brown —. La voz de Jarvis resonó por toda la casa.

—¿A qué se refiere?.

—Natasha y yo hemos estado buscando posibles localizaciones de donde podrían estar los códigos y el escudo, pero no tenemos nada, no los han activado.

Narcissa lo miró con una ceja levantada, confusa por el no los han activado. En su cabeza, esa oración era la mejor que le podrían haber dicho.

Etéreo | Bucky Barnes, Steve RogersDonde viven las historias. Descúbrelo ahora