broken pieces // ziam

41

Al día siguiente, Liam entró a la habitación donde Zayn se estaba quedando. Al instante Yaser y Trisha lo miraron con asombro, como si no creyeran que alguien fuera capaz de desafiarlos de esa manera, Abraham, por su parte, trató de ocultar la sonrisa en sus labios.

—Tienes cinco segundos para irte si no quieres que llame a la policía —soltó Yaser con un tono demandante. Liam lo ignoró por completo y saludó a Zayn dejando un beso en su cabeza.

—Liam no irá a ningún lado —respondió el moreno con total tranquilidad—. Ni tampoco yo, pueden dejar el teatro, sé muy bien lo que quieren hacer conmigo una vez me operen.

Yaser rió sin gracia, y Trisha se mantuvo en silencio.

—¿De qué estás hablando? —preguntó con ironía, y Zayn simplemente suspiró.

—No te hagas el desentendido, padre. ¿O debería seguir llamándote así?

El semblante de Yaser cambió de imponente a sorprendido. Liam quiso reír.

—No voy a operarme con tu dinero, ni voy a seguir bajo tu custodia porque tú no eres mi padre. Y, aprovechando la situación, madre —Zayn fijó sus ojos en Trisha, le dolía la situación, siempre quiso que su madre lo amara, pero jamás pasó—. Tú tampoco has sido una verdadera madre para mí, todos estos años, nunca estuviste.

—¿De qué demonios está hablando Zayn, Abraham? ¡Explícamelo ya mismo!

Zacharias entró a la habitación, luciendo calmado. Aprendió a no mostrar cómo se sentía internamente para evitar problemas. Pero realmente quería golpear a Yaser, quería acabar con todo este circo.

—¡Llamaré a la policía!

Zacharias no pudo evitar reír.

—Todos estos años y aún no has dejado de ser cínico. Ya escuchaste a Zayn, deja el teatro, ya todos saben la verdad.

Por primera vez, Yaser no supo qué decir. Y Zacharias sintió que este sería el fin.

—Zayn sabe toda la verdad, Yaser. Sabe que soy su verdadero padre y sabe todo lo que has hecho para evitar que él me conociera. Me engañaste, joder, no sé siquiera por qué me sorprende, era de esperarse, un tipo como tú... —Zacharias respiró profundamente, guardando todo el autocontrol que le quedaba. No era momento de exaltarse y echar las cosas a perder. Su vista se fijó en Trisha, era imposible que dejara de doler, después de todos estos años—. Trisha, realmente pensé que al menos tú te encargarías de nuestro hijo, pero tu corazón está igual de contaminado que el de mi hermano. Ya se acabó todo esto, basta de tanta falsedad, de tantas mentiras.

—Voy a llamar a la policía. Que no se te olvide que yo he sido el que ha mantenido a Zayn con vida, ¿crees que no fue nada? ¿Todo el maldito dinero que he invertido en un simple crío que ni siquiera es hijo mío? —soltó Yaser, sin remordimiento.

Zayn no pudo evitar estremecerse. Ojalá no doliera como lo hace, pero no puede no sentirse como una carga.

—No te atrevas a hablar así de mi hijo, Yaser —advirtió Zacharias y su hermano rió sin gracia.

—¿No quieres que te diga la verdad en tu cara? Desde que nació Zayn no ha sido más que una aspiradora de dinero, ¿y quién ha pagado por todo? Yo, únicamente yo. Sus medicinas, el tratamiento, el seguro médico, ¿crees que todo fue gratis? Su educación, todo. Todo ha salido de mi bolsillo.

—De haber sabido que no era más que un gasto innecesario para ti, ni siquiera hubiera recibido un peso de tu parte. Siempre supe que no me querías, que nunca fui suficiente para ti, ¿para qué entonces molestarse? ¿Para qué seguiste soltando tu dinero a una causa perdida, Yaser?

—Zayn... —Trisha trató de hablar pero la mirada que su hijo le dio fue más que suficiente para que se callara.

—Estoy seguro que ni siquiera fue por lástima, ¿entonces? —el moreno insistió.

—Fue por mí —finalmente Abraham habló.

Liam se mantuvo todo el tiempo detrás de Zayn, guardando silencio.

—Sé cosas que Yaser no querría hacer públicas. Básicamente nuestro trato fue que él daría el dinero y yo mantendría mi silencio —Abraham bajó la vista, sintiendo vergüenza—. Estabas muy mal, Zayn... sin el dinero no hubieras podido seg...

—Lo entiendo —el moreno lo interrumpió—. No necesitas darme más explicaciones, Ab —le sonrió un poco y luego volvió a dirigir su vista a Yaser y Trisha—. Quiero que se vayan de aquí, no quiero volver a saber de ustedes.

—¿Pero qué te estás creyendo? ¿Crees que tienes algún poder aquí? —Yaser soltó.

—Te vas a ir, Yaser —Zacharias habló—. Te irás si no quieres una demanda y un gran escándalo respirando en tus narices.

—Yaser, deberíamos irnos... —Trisha tomó a su esposo del brazo.

—Ten por seguro que esto no se quedara así, Zacharias —lo amenazó una última vez antes de abandonar la habitación junto a su esposa.

Todos permanecieron en silencio, hasta que repentinamente Zayn comenzó a llorar. Liam de inmediato se arrodilló para estar a su altura.

—Amor... ¿quieres hablar? —él asintió, y tanto Abraham como Zacharias entendieron que debían dejar a ambos jóvenes solos, así que también se fueron.

El moreno lloraba casi que en silencio, las lágrimas brotaban de sus ojos como cascadas y Liam solo quería que él estuviera bien. Sin decir mucho y con extremo cuidado, tomó a Zayn en sus brazos y lo acostó en la camilla para después ubicarse a su lado y abrazarlo. Zayn pareció agradecerle con la mirada, Liam siempre entendía lo que él necesitaba aún cuando no lo decía con palabras.

Permanecieron abrazados por un buen rato, Zayn lloró hasta que sacó todo lo que tenía guardado. No era inmune al dolor, saber que no fue más que una carga para Yaser y su madre, no puede no herirlo. Toda su vida lo único que espero fue recibir amor de su parte, pero lo que recibió fue la total indiferencia.

—He aprendido muchas cosas desde que llegaste a mi vida, ¿sabes? —Liam comenzó a hablar suavemente, acariciando el cabello de Zayn.

—¿Lo has hecho?

—Tú me enseñaste que el amor no tiene forma, ni límite. Zayn, sé que duele... yo no he vivido algo así, pero puedo imaginar el dolor que sientes. Tú amas demasiado... sin reservas, y algunas personas no merecen tu amor. Y aún así, tu sólo lo brindas, con brazos abiertos y sin juzgar. Eres una persona demasiado pura y hermosa para este mundo, y el daño que recibes ten por seguro que no es justificado.

—Yo... no creo ser tan puro como lo imaginas, Liam.

—A mis ojos lo eres —sonrió—. Eres la obra de arte más genuina que podré observar en toda mi vida.

Las mejillas de Zayn enrrojecieron y escondió su rostro en el cuello de Liam.

—Estoy para ti, así como Abraham y nuestros amigos... también Zacharias. Recibirás todo el amor que en verdad mereces, eso puedo asegurarlo, amor.

El moreno sonrió, sintiéndose en paz, Liam se había llevado toda su tristeza y en cambio había dejado su cariño. Zayn se sentía amado.