Draco salió, a duras penas en uniforme, del despacho de su padrino. Se sentía enojado, avergonzado que el estúpido de "San Potter" lo haya visto en tales condiciones; sabía que su padrino haría lo que sea para que Potter mantenga la boca cerrada pero él no podía permitirse eso, era ridículo.En aquel momento sintió como unas lágrimas brotaban de sus ojos, quizás de impotencia pero se alegraba de que nadie es encontrá a cerca.
—¡Draco!.Sintió su piel erizarse al oír su nombre salir de los labios y ser dicha por el moreno.
—¿Qué quieres Potter?.
Pregunto sin darse la cuenta, manteniendo su cabeza en alto y su voz altanera que no se dejaba flaquear.—Yo...lo siento...El rubio le interrumpió.
—Si, aunque haya sido una...bestia anoche aún recuerdo varias cosas. Debo admitir que fue demasiado "Slytherin" de tu parte.
—Escucha Malfoy—El moreno le tomó de los brazos y lo obligó a darse la cuenta topándose con los ojos llorosos de la serpiente—¿Estabas llorando?.
—N-No...
Negó siendo delatado por su voz temblorosa y las lágrimas traicioneras, Draco sabía que en cualquier momento iba a romper su límite en cualquier momento, ¿Pero por qué ahora?¿Por qué justo delante del estúpido Potter?. Harry se le quedó mirando, pues era la primera vez que lo veía tan vulnerable, tan frágil y le hacía recordar que solo tenía 16 años.—Yo...te voy a ayudar.
—¿Qué?
El león puso su mano en la pálida mejilla de Malfoy, con su dedo limpio una lágrima que iba brotando.
—Yo, quisiera poder ayudarte, así puedas pasar las noches con más, libertad...
Balbuceaba mientras trataba de encontrar las palabras correctas.—¿Cómo se que debo confiar en ti?.Potter tomó el brazo de Malfoy y subió un poco su manga y con la yema de su dedo índice y acarició la herida que ya estaba cicatrizando.
—Haré que confíes en mí, si quieres hacemos que no nos conocemos.
—¿De qué hablas?.Harry extendió la mano con una sonrisa.
—Soy Harry Potter, si el de la cicatriz, un honor.
Draco no pudo evitar sonreír algo abobado.—Soy Malfoy, Draco Malfoy.Y tomó la mano del moreno, leyendo lo que dice la cicatriz del torso de esta"No debo decir mentiras"
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El día habia acabado y fuera de la excéntrica charla con los Slytherins no había nada interesante de que contar. Al final del día Potter camino hacia su cuarto, agarro un pergamino y tomó prestada una de las plumas y tintas (quién sabe de quién es) y escribió:"Te tengo noticias, no me gustaría escribirlo por aquí, hablemos en persona–Harry"La enrollo y cerró, para luego mandarlo con Hedwig y ella sabría donde ir