Tae Hyung jamás se sintió más a gusto con una persona como lo estaba con ese chico nuevo, Min Yoon Gi. Le recordaba tanto a sus días como principiante, que quería protegerlo y mantenerlo en su burbuja del honor. Le había dolido mucho cuando se enteró de todo lo que la policía hacía junto a la mafia, y no permitiría que el pequeño a su cargo viviera esa decepcionante experiencia.
— Y bueno, compañero ¿Qué te gustaría de desayunar? —le preguntó al otro, quien inmediatamente le miró con una sonrisa en sus labios.
— No lo sé, hyung*. Cualquier cosa estaría bien.
*Hyung
Honorífico coreano para denotar cercanía entre un hombre y otro de mayor edad. Se utiliza con amigos o hermanos.
— Ah, cierto, tienes 21 años ¿no? La verdad Jungkook me distrajo, por eso no pude retener mucha información.
Luego de aquella conversación, se dirigieron hasta los mismos lugares que había frecuentado Taehyung junto a Jungkook. A pesar de que ya casi se iba a cumplir un mes y medio de su llegada como nuevo detective, no habían avanzado y eso lo estresaba. Se suponía que él debía encontrar nuevas pistas. Pero, en realidad, quería resolver el caso.
Por una parte, estaban su ética y honor, quienes le pedían a gritos que hiciera algo por su amado uniforme, y por el otro, estaba Jungkook. Este caso estaba directamente involucrado con él, y la verdad, aunque siempre moría de ganas por preguntar, cada vez que se atrevía a pensarlo su mente volaba hasta la dolorosa expresión en el rostro ajeno. Aquella que solamente había visto dentro de esa habitación de hotel cuando fueron amenazados y sobornados por Jin, integrante de Red Swan. Esa misma expresión que no quería volver a ver en la cara del mayor.
A pesar de sus negativas y el aparente rechazo hacia Jungkook, Taehyung tenía que admitirlo. Él solía ser alguien demasiado severo y rígido con el trabajo, por lo que las bromas de Jungkook, aunque estuvieran fuera de lugar en algunas ocasiones, siempre lograban sacarlo de sus lúgubres estados de ánimo. Debía agradecérselo, pero no ahora, ya que justamente se estaba atreviendo a analizar lo que sentía por él. El mayor de ambos no parecía una mala persona, pero el enterarse de sus turbios tratos con la mafia, hacía que se sintiera inseguro respecto a él ¿amigo o enemigo? ¿estará diciendo la verdad? Tenía mucho miedo de ser manipulado nuevamente a través de sus sentimientos. No quería que Jungkook se transformara en un segundo Ho Seok.
Con la mente enredada, los sentimientos y la atracción que le había generado el otro desde el momento en el que lo vio, Taehyung no sabía cuánto tiempo aguantaría escapando de él. Debía ser sincero, lo único que quería, desde esa noche en el hotel, era dejarse llevar mientras el esculpido cuerpo del mayor hacía lo suyo.
Mente sobre la materia, Taehyung.
No había notado lo tarde que era, hasta que Yoon Gi se despidió por el término de su horario laboral ¿acaso... se había pasado todo el día pensando en ese...?
Salió de su cuchitril y se dirigió hasta su auto.
No puede ser.
Jungkook, con el rostro sudado y sus cabellos revueltos por el viento, le esperaba apoyado en el capot de su auto mientras veía algo en su celular.
Por un segundo pensó en esconderse o ir a casa en taxi. Si el mayor preguntaba le diría que su auto se descompuso y ya. Luego se dio cuenta de lo tonto que era, de seguro le diría que al día siguiente le echaría un ojo para repararlo. No, no. Hasta en su mente Jungkook era un tipo amable.

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HOUSE OF CARDS
FanfictionKim Tae Hyung es nombrado jefe de la investigación que acaba de reabrirse después de 10 años. Luego de un "pequeño" incidente, el detective Kim y su compañero en el caso, el oficial Jeon Jung Kook, se ven arrastrados a los sucios asuntos de la agru...