22 de agosto
Casa del rubio y común Taehyung
Horrible, esa casa era HORRIBLE.
Llevaban un mes juntos, y Jungkook no podía aceptar el hecho de que su investigación le hubiera quitado la poca vida social que llevaba. En cambio, dormía, comía y hacía sus necesidades con un vulgar y tacaño hoobae.
Ah, Jeon Jungkook, esto no ayuda a tu heterosexualidad.
Se reprendió a sí mismo. Porque, a pesar de que ese chico era desordenado, no planchaba su ropa y tenía el peor café del mundo a su haber, ya no había un momento o algo que pudiera imaginarse haciendo solo.
Jeon Jung Kook se estaba acostumbrando a Kim Tae Hyung.
Como era costumbre, y un pequeño lujo que se permitía, dejaba que el menor de ambos se despertara primero para preparar el café. Lo cierto es que, Jungkook siempre se despertaba, al menos, una hora antes. Lo observaba como un tonto durante cuarenta y cinco minutos y luego se hacía el dormido y dejaba que el otro hiciera toda su ceremonia mañanera.
Kim Tae Hyung tenía la peor marca de café del mercado, pero cuando él lo preparaba, sabía a gloria para Junkook.
Un aroma que meses antes no habría reconocido como algo bueno, ahora le era familiar. Indicaba el comienzo de un nuevo día junto a Taehyung como cómplices.
Como una costumbre ya adoptada durante semanas, llegaba hasta el umbral de la puerta del dormitorio, soltaba uno que otro comentario desagradable para hacer que el menor de ambos se apresurara (siempre funcionaba) y luego todos felices al trabajo.
Pero esa mañana no fue así.
Jungkook se pasó de la raya y terminó con una bolsa de grano de café estampándose contra su rostro. Al contrario de estar molesto, se sintió preocupado al ver el rostro enrojecido de Taehyung mientras daba un portazo.
Jeon Jung Kook, la cagaste.
Si su asombrosa memoria no le fallaba, habían pronosticado lluvias durante todo el día, y si en ese momento no estaba precipitando, lo haría en unos minutos.
Al parecer Taehyung iba caminando bastante contrariado. Jungkook lo observaba desde atrás, y no pudo evitar reparar en la mirada y expresión que tenía su hoobae cuando una pareja de chicos, que parecían de instituto, pasaron frente a él y se soltaron las manos al verlo.
Más que una mirada de asco o repulsión, Taehyung los miraba con tristeza y nostalgia.
Algo no se sintió bien dentro de Jungkook. Repentinamente sintió como si su estómago estuviera revolviéndose, pero no era por comer algo en mal estado. Siempre tan lógico y centrado en sus asuntos, no tuvo una explicación para aquel extraño sentimiento.
Se limitó a seguirlo.
La manera en la que ese flacuchento le sonreía mientras le llevaba esa característica lata de chocolate, no le gustó.
Escondido tras una pared, asomaba su cabeza para cerciorarse de que todo estuviera bien. Si Taehyung lo descubría, aham, ya se le ocurriría alguna estúpida excusa.
No fue hasta ese momento, en el que unos niños de primaria pasaron por ahí, que notó cómo iba vestido. Sus molestas risitas le hicieron despertar de aquella misión de rescate y revisar un poco su situación actual. Realmente era un tonto, porque en cuanto su compañero salió de casa, ni siquiera procesó que estaba en boxers. Simplemente se colocó una chaqueta que estaba colgada a un lado de la puerta, unas sandalias, ambas pie izquierdo, para aclarar, y ya.
Puso los ojos en blanco.
Aish sessange.
Jungkook, a lo lejos, pudo notar que algo iba mal. No supo cómo, pero en menos de dos segundos estaba caminando hacia él y luego lluvia.
Abrió el paraguas sobre Taehyung y se quedó ahí, escuchando sus sollozos. Si no se viera tan triste, podría regañarlo por estar chillando, pensó. Pero se limitó a quedarse allí.
Seguramente el menor de ambos estaba demasiado ensimismado porque no había notado su presencia allí.
Kim Taehyung se voleó hacia él y... ah, algo más que el tiempo se paró en ese instante.
Sus ojos llorosos, la marca de la lata de chocolate sobre sus labios o simplemente todo él.
Jeon Jung Kook no lo entendió hasta ese momento, pero creía saberlo todo ahora. Creía saber por qué los chicos se habían espantado de tal forma al ser vistos, creía entender por qué Taehyung ahora lloraba.
Ah, por buda y los dioses de los tres reinos... Kim Tae Hyung estaba llorando porque, al contrario de Jungkook, él no era un heteropolicía.
En serio, jamás dejaré de estar agradecida con Valentina y Aelita TTnTT
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HOUSE OF CARDS
FanficKim Tae Hyung es nombrado jefe de la investigación que acaba de reabrirse después de 10 años. Luego de un "pequeño" incidente, el detective Kim y su compañero en el caso, el oficial Jeon Jung Kook, se ven arrastrados a los sucios asuntos de la agru...