HOUSE OF CARDS

17

Apenas sintió el timbre, Jungkook se levantó de la mesa y le dijo a Namjoon.

—Dile a Taehyung que estoy dormido, que me deje aquí. No quiero ir a su casa. Necesito descansar un poco y pensar, estar con él no me ayudará —hizo una mueca y le dio golpecitos en el hombro al mayor mientras se dirigía hasta la que era su habitación. Namjoon sólo asintió y se dispuso a recibir al visitante.

Abrió la puerta y Kim Tae Hyung estaba mirándolo fijamente. Namjoon no terminaba de entender la expresión del rostro ajeno, por lo que simplemente le dijo que pasara.

Apenas entró, Taehyung buscó a Jungkook con la mirada, pero no lo vio por ninguna parte, así es que se dispuso a preguntar.

—¿Dónde está Jungkook hyung? —Taehyung parecía demandante.

—Está dormido, dijo que tenía cosas que hacer en la madrugada, que no quería molestarte así es que mejor se quedaba aquí.

Namjoon fue por un par de tazas y preparó un café para ambos. Al recibir la propia, Taehyung no pudo evitar fijarse en que la temperatura era la correcta, así es que dio un suspiro.

—¿Por qué no quiere verme? El agua aún tiene una temperatura agradable para preparar esta cosa que tanto le gusta... él está escuchando ¿verdad? —el menor miró a Namjoon casi suplicando que dijera la verdad, más no hizo falta, porque Jungkook apareció por el pasillo.

—No me sorprende que te hayan transferido, después de todo, sí que tienes pasta de detective —Jungkook se sentó en una de las sillas del comedor—. Siéntense, ambos. Tengo que contarles algo importante.

Namjoon y Taehyung hicieron lo que el policía les pidió y se sentaron junto a él. En esa conversación, Jungkook relató lo que había pasado durante los últimos días. La escena en la que Jimin mató a esos hombres, el golpe en la nariz, el encuentro con Ho Seok... y la parte en la que debía ir a Busan junto a toda esa mafia.

Taehyung estaba furioso. Jungkook estaba exponiéndose innecesariamente a que le pasara cualquier cosa mientras trabajaba para esa gente, encima ¿en qué estaba pensando el jefe Song? ¿Por qué perpetuaba este círculo vicioso de corrupción y poder? No podía creerlo, además ese estúpido Park Ji Min había golpeado a su amigo ¿qué se creía? Espera a que te conozca, pensó, realmente sorprendido ante todo lo que le había ocurrido a Jungkook en tan sólo dos días. Por otra parte, sin entenderlo muy bien, sentía que algo en su estómago se removía, como si tuviera un mal presentimiento. Fijó su mirada en Jungkook y su amigo, quienes seguían conversando sobre cualquier cosa, riendo... ¿y si esta era la última vez que veía al mayor? No, no quería creerlo, él era fuerte, él era protector, valiente... inclusive si estaba metido en líos con Red Swan, Jungkook tenía coraje. Ni siquiera él se hubiera atrevido a aceptar... entonces lo recordó "Tae, creo que Red Swan tiene algo que ver en el caso..." ¿Era por eso? ¿Jungkook se estaba metiendo en apuros sólo para conseguir un poco más de información?

Agachó la mirada, siguiendo el curso de los giros que hacía el líquido dentro de la taza al meter el dedo y revolver un poco. Realmente no sabía qué pensar, qué decir o qué hacer. De pronto, todo se había nublado, es decir, él sólo iba por Jungkook, lo llevaría a casa, comerían algo rico, bromearían, quizás dejaría que le diera un beso o dos, pero... quería volver con él a casa. Ojalá este y todos los días.

Se permitió ser un poco egoísta.

Se permitió caer y desear.

Soñar.

—No vayas, Jungkook —Taehyung interrumpió la conversación y ambos le miraron.

—No es una opción, Taehyung — Jungkook contestó.