El omega de Yunmeng Jiang

Capítulo 61. Buscando una Peonia.

Capítulo 61. Buscando una Peonia.

El regreso de Jiang FengMian y Madam Yu fue más que bien recibida por los civiles y los discípulos. Todos gritaban emocionados su regreso, otros se vieron más atrevidos al acercarse al matrimonio obsequiándoles bollos de carne, dulces y uno que otro niño regalaba flores a los Jiang. Fue agradable para ambos estar de vuelta en casa.

Jiang FengMian casi se pone a llorar por milésima vez ese día, lloró en el QingHe Nie al escuchar lo que realmente pasaron sus hijos por más de un año de guerra, lloró por la pérdida de muchos y solo no lloró la casi boda de YanLi porque Madam Yu lo miró mal. Pero esta vez su señora no tenía razones para regañarlo si soltaba una lágrima o dos, ella misma tenía los ojos cristalinos, la entrada de la secta ya no estaba quemada, bañada en sangre y a punto de derrumbarse, era una estructura nueva, fuerte, aun olía a madera recién cortada y barnizada.

FengMian no pudo resistir el impulso de tocar el tallado del loto de nueve pétalos, y acariciar las brillantes bisagras y clavos de plata.

-¿Qué es esto?- Notó un pequeño relieve, muy sutil, sobre los clavos.

-Wei WuXian puso varios conjuros de protección en los alrededores- Jiang Cheng explicó a sus padres con orgullo, viendo a su omega engullir los pasteles dulces que le obsequiaron en el camino. Bufó divertido al verlo con las mejillas llenas- Se encargó de armar un nuevo escudo, mucho más fuerte y también difícil de encontrar para romperlo.

Las puertas se abrieron cuando Jiang Cheng asintió hacia las dos jovencitas que vigilaban en la parte superior, ellas saludaron respetuosamente, y abrieron las puertas.

-¿Son omegas?- FengMian vio a ambas jovencitas vistiendo atuendos grises y rojos, y sobre sus espaldas arcos con carcaj-¿Arqueras?

-Sí, son los omegas y betas que Wei WuXian salvó todo este tiempo, pueden identificarlos con sus ropas, ellos son excelentes guardias.

Madam Yu y Jiang FengMian vieron con asombro el interior, ya no había destrucción y muerte, todo estaba limpio, aun había estructuras quemadas, pero ver y oler la madera, el acero y el barniz mezclándose con el aroma del lago y el bosque les sorprendió. Ambos se miraron para asentir satisfechos. Vieron a Jiang Cheng dar algunas instrucciones a los discípulos, posiblemente nuevos al no reconocerlos, A-Li también hablaba con algunos discípulos, ahí reconocieron a algunos, que al verlos los saludaron profundamente y vieron lágrimas amenazando por caer.

-¡A-Yang! ¡Wei-Gege ha vuelto!

Todos vieron a un pequeño de túnicas grises y purpuras asomarse entre uno de los pilares mientras los apuntaba con el dedo.

-¿Tenemos otro nieto?- FengMian sonrió al ver al niño y estaba por tomarlo, cuando escuchó unos pasos más rápidos y agresivos. Apenas desvió un poco la mirada al pasillo de dónde venían, sintió un fuerte golpe sobre su estómago, resistió y abrazó con fuerza al niño, acarició con afecto su cabeza- A-Yang, me alegro que lograras escapar.

-Abuelo tonto- Jiang Yang se aferró a las túnicas de FengMian.

-A-Yang- Wei Ying caminó hasta él y acarició su cabeza- Estamos todos en casa.

-Sí- Jiang Yang se secó las lágrimas con la manga de su túnica. Parpadeó un par de veces antes de fruncir el ceño y apuntar acusadoramente a Wei Ying- ¡A-Die! ¡A-Niang escapó! Incluso esquivó todas mis trampas.

-Ya veremos cómo castigarlo- Jiang Cheng bufó divertido ante la sonrisa de A-Yang y la dramática expresión de traición de su esposo.

-¡NaiNai! ¡NaiNai*!- Jiang Yang rebotó alrededor de Madam Yu antes de que ella lo detuviera con una mano sobre su cabeza, y aun así parecía rebotar sobre las puntas de sus pies- Funcionó, realmente funcionó tu entrenamiento.