Capítulo. 41. Secretos
Wen Ning era muy joven cuando perdió a sus padres, posiblemente tenía tres años, apenas y podría recordar sus rostros, solo sabía que alguna vez existieron, que su madre lo sostuvo en sus cálidos brazos, bañándolo de ese hermoso aroma a Lirios y el aroma mentolado de su padre. Pero era muy joven, en ese momento no entendió por qué su mamá y su papá ya no estaban abrazándolo, sino su abuela y su hermana mayor.
Su abuela lo cuidó un par de semanas antes de mudarse con su hermana mayor a una ciudad más grande, brillante y donde el sol parecía nunca dormir, y una casa mucho más grande que su pequeña casa con el jardín lleno de hierbas y flores medicinales. Había jardines hermosos, pero casi no había las flores que su mamá le enseñaba para hacer medicina.
Fue presentado ante un hombre, un alfa, era enorme y aterrador. Se mantuvo oculto de tras de su hermana mayor, sin entender en ese momento quién era esa persona. Ella había dicho que vivirían con uno de sus tíos, pero los tíos de su pueblo no se veían así, eran hombres simples que siempre reían estridentemente, le daban dulces a escondidas de la abuela, le cargaban en sus hombros o lo molestaban con los peces que recién salían de las redes de pesca. Ese hombre, alto, aterrador y con un aroma a bosques en llamas, no parecía un tío, en lo absoluto.
-Jie-Jie- Wen Ning correteó detrás de su hermana mayor en medio de esos inmensos pasillos.
-A-Ning- Su hermana se detuvo y suspiró antes de tomar su mano- ¿Por qué no estás con la niñera? Sabes que tengo que volver a mis lecciones, cuando termine jugaré contigo.
-No me gusta ella- Frunció su pequeña nariz- Apesta, y me deja encerrado en mi habitación mientras se va con uno de los guardias a otra, y vuelve apestando mucho peor.
-A-Ning- Su hermana se veía entre molesta y desesperada- Mira... Yo...
-Wen Qing.
Ambos voltearon al mismo tiempo, venían dos niños a su encuentro, uno tenía diez años al igual que Wen Qing, era apuesto, cara afilada, ojos de fénix, piel clara, las túnicas rojas y blancas resaltaban su piel, sus ojos oscuros como el carbón, cabello negro atado en una cola de caballo y un tocado de oro y rubís. A su lado un niño de cinco años lo acompañaba, fruncía el ceño y le sacó a lengua a Wen Ning, quien solo se ocultó detrás de su hermana.
-Wen- Gongzi, Wen er-Gongzi- Wen Qing hizo una reverencia, a su lado vio de reojo a su hermanito, aun en sus tiernos tres años, hizo un adorable saludo a los mayores.
-Wen Qing, ¿por qué no estás en las lecciones? Sabes que mi padre te dijo que debías de cumplir con tu deber de volverte la líder de la rama médica- Wen Xu vio a ambos niños- ¿Él es?
-Mi hermano pequeño, una disculpa. Su niñera lo descuidó y me siguió.
-Ya veo- Vio fijamente a Wen Ning, se acercó un par de pasos a los hermanos y se arrodilló hasta quedar a la altura del más joven- ¿Cómo te llamas?
-We... Wen... N... Ning... Em...- Vio a su hermana asentir con la cabeza. Acunó sus manitas para hacer un saludo- U... Un... Gu... Gusto...
-¡Ya cállate!- Gritó Wen Chao- Eres molesto, ¿acaso tienes frio? Habla bien, ¿o eres idiota?
-Wen Chao- Calló a su hermano con una fría mirada, pero al volver a Wen Ning, sus ojos se suavizaron y limpió la lágrima que escapaba de sus grandes ojos verdes- No lo escuches, llámame Wen-gege o solo gege. Es muy lindo tu hermano, ¿omega?- Sin levantarse vio a Wen Qing.
-Sí.
-Ya veo, ¿Cuántos años tienes?- Vio a Wen Ning mostrar tres deditos- Aiya, pero ya eres muy grande para estar pegado a la falda de tu hermana- Soltó una risa suave al ver como el pequeño se aferraba aún más fuerte a la túnica de su hermana- Tu Jie-jie, tiene mucho que estudiar, ¿quieres acompañarme a tomar un refrigerio?
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El omega de Yunmeng Jiang
FanfictionUn omega debía ser elegante. Un omega debía ser delicado. Un omega debía ser educado. Un omega debía ser una gran esposa. Un omega era ser un trofeo. Un omega era ser una incubadora. Un omega era ser llamado 'prostituta' solo por su casta. Un omega...