El omega de Yunmeng Jiang

Capítulo 17. Una vez más en GuSu.

Capítulo 17. Una vez más en GuSu.

El camino de Yunmeng hacia Gusu fue bastante tranquilo, la primera parada fue en Yiling, cerca de la frontera entre la secta del Loto con la secta del Sol. Fue ahí donde Wei Ying lloriqueó porque su amigo no podría acompañarlos a Cloud Recesses, pues aún tenía que seguir con sus estudios para ser un gran médico como su hermana mayor.

Resignados, los hermanos jurados siguieron su camino una vez se despidieron de los hermanos Wen. En el camino Wei Ying no paraba de hablar, como era costumbre. Lan WangJi contestaba de vez en cuando con monosílabos o con cortas oraciones, uno se sentiría aburrido por el frío trato del alfa, pero para Wei Ying esa era su manera de relacionarse.

-Lan Zhan, debes de ser un poco más aventado con A-Ning, él es tímido- Aconsejó el omega al otro, ya habían entrado a Yun Shan, y dentro de poco verían la elegante entrada de piedra de la secta- Sé que eres de pocas palabras, pero un saludo y una invitación a salir, ayudaría a romper el hielo entre ustedes.

-Yo también soy tímido- Dijo en voz baja el alfa, ocultando su vergüenza.

-¡Lan Zhan!- Wei Ying casi hace que ambos caigan de sus espadas por la manera en que casi se cuelga del brazo del otro- Lo siento. Pero tú puedes Lan Zhan, yo te ayudaré- Ambos descendieron con sus espadas hasta quedar en la entrada- Aun deben de estar en clases, ¿verdad?- Vio al Lan asentir con la cabeza mientras cruzaban sin problemas el campo de protección.

-Debemos anunciarnos.

-Claro, claro. El tío QiRen no querrá que esté correteando por el lugar- Soltó un suspiro.

-¿Qué sucede?

-¿Se nota mucho?- El travieso y desvergonzado Wei WuXian, jugueteaba con la campana de plata de la secta Jiang con nerviosismo, incluso sus mejillas empezaban a colorearse en un tierno y pálido rosa.

Lan Wangji sabía a lo que se refería, el aroma de Wei Ying había cambiado después de su primer celo. El claro aroma de los alfas Jiang aun lo envolvían, pero la esencia láctea e infantil se había perdido por completo, ahora el dulce aroma a flores de melocotón lo envolvía. Un aroma que ante cualquier joven alfa se vería encantado, el claro aroma de un joven omega fértil, listo para tener cachorros. La sola idea de ver a Wei Ying siendo intimidado por otros alfas le molestó, su lindo hermano omega no era una incubadora.

Instintivamente empezó a rodear a Wei Ying con sus feromonas, el fuerte perfume del alfa envolvió a su hermano, dejando en claro a otros alfas que su hermano era protegido por otro.

-Mmn- Negó con la cabeza- Yo te cuido.

-Gracias, Er-ge- Wei Ying sonrió con ternura, ante el instinto protector de su hermano jurado- Pero, tu aroma me pica un poco la nariz- Apenas terminó la frase estornudó- No creo que a A-Ning le guste que me envuelvas en tu aroma- Vio a Lan Zhan negar suavemente la cabeza, mientras sacaba algo de entre las solapas de su ropa.

-Cuidar de Wei Ying- Le entregó una linda bolsita negra con conejitos bordados.

-¿Para mí? – Se sorprendió al reconocer el bordado del omega Wen, lo tomó con cuidado, olfateó la bolsita. Su aroma era agradable, el aroma a sándalo y canela le relajó, al igual que las diversas hierbas medicinales que tenía dentro- A-Ning es muy dulce, ¿verdad?

Rio suavemente al ver a Wangji asentir con la cabeza y las orejas levemente sonrojadas.

Ambos estaban acostumbrados a rondar los caminos empedrados de GuSu lado a lado, los discípulos y ancianos ya estaban más que al tanto de la buena relación del alfa y el omega, siempre juntos, siempre conversando y sonriendo, al menos en Wei Ying. Así que nadie prestaría atención a la suave risa del omega y bufidos bajos del alfa al ser "intimidado" por el otro, perdiéndose entre los caminos hasta llegar al pabellón de la biblioteca, a los campos de entrenamiento o el pabellón de viejo Lan, lugar donde se dirigían ahora.