tal vez me arrepienta de escribir esto 👍.
💎
Katsuki corrió hasta los brazos de Izuku y lo abrazó, alzándolo y haciéndolo girar en el aire mientras el peliverde acariciaba sus mejillas suavemente y le daba un beso en los labios.
— Te extrañé idiota.
— También te extrañé Kacchan.
Habían pasado tres meses separados, Izuku era un pediatra muy conocido en Japón ya que era muy gentil y amoroso con los niños, incluso, para bien o para mal -aunque era obviamente para bien- a veces tenía cinco citas con pequeños al día. Las mamás de los niños estaban muy contentos de tener a Izuku como su médico de cabecera. Por otro lado, Bakugo, un héroe reconocido por todo el mundo, se la pasaba viajando con sus compañeros de trabajo, siempre quería llevarse a Izuku con él pero el peliverde le decía que tenía que atender a sus mini pacientitos.
— ¿Quieres ir a comer?
— Kacchan... Tengo que ir a trabajar, tengo cita con el hijo de Todo-
— Ya arreglé todo, no aceptaré un no como respuesta.
— Pero Kacchan-
— No amor, está vez serás todo mío, estuve sin el amor de mi vida tres malditos meses, quiero recompensar ese tiempo.
Midoriya abrazó a Bakugo por el cuello y le dió un beso en la mejilla para después tomar su mano, el rubio acarició el rostro de su novio y besó su frente.
— ¿O quiere ir a dónde siempre?
— Me parece bien, quiero ir a ver si aún está nuestro árbol que sembramos.
— Está bien mi vida.
. . .
Tenían agarradas sus manos y de vez en cuando Katsuki le robaba un beso a Izuku, los paparazzis siempre estaban tras de ellos pero no le hacían caso, después del sexto mes de novios, dejó de importarles. De todos modos, no tenían de que esconderse.
— Izuku, de verdad te extrañé.
— Waah-cchan.
Izuku escondió su cara en el pecho de su novio por la pena y este sonrió para después tomar su carita con sus dos manos y besó sus labios, escuchó el sonido de los flashes y miró enojado a las idiotas.
— ¡Déjenos en paz por un maldito día, voy arrancarles los ojos a cada uno de ustedes y voy a dárselos de comer a-!
— ¡Kacchan!
— Pero amor-
Los paparazzis salieron corriendo y Bakugo sonrió, Izuku de igual manera sonrió y tomó el cuello de la playera de Katsuki para darle un beso.
— Deja de asustar a la gente.
Bakugo hizo un puchero y Midoriya de nuevo lo besó en los labios, el cenizo dirigió sus manos a la cintura de su novio y lo atrajo más a su cuerpo.
— Estuve sin ti tres meses, no te escaparas tan rápido.
— No quiero hacerlo.
Bakugo besó la frente del oji verde y acarició sus mejillas pecosas, volvió a tomar su mano y se dirigieron al parque en donde siempre jugaban de niños.
Cuando Katsuki se dió cuenta de que le gustaba Izuku, a veces iba al parque para pensar bien, lo había jodido todo con Deku y no sabía como arreglarlo... Pero afortunadamente, tenía a sus amigos que eran unos idiotas pero supieron ayudarle.
Un 17 de enero, en el último semestre de preparatoria, Katsuki le pidió a Izuku que fuera su novio, a lo que Izuku le dijo que sí.
Todos creían que iban a terminar pero era tan grande la atracción, que todos los obstáculos que se les presentaban, con éxito lograron superarlos.
— ¡Ahí está Kacchan!
Izuku jaló a Katsuki de la mano y corrieron hacía el gran árbol que habían plantado juntos en su segundo mes de noviazgo, al llegar al parque, se sentían como si aún tuvieran dieciocho y no veinticuatro.
— Ya creció mucho.
— Sí, ¿pero sabes que está más grande?
— Kacchan, no empieces.
Bakugo sonrió y miró como las mejillas de Izuku se pusieron coloradas y suspiró, abrazó al peliverde y lo miró a los ojos.
— Mi amor por ti.
Midoriya sonrió y abrazó con fuerza a Bakugo, este besó su frente y su cabeza, metió su mano en su chaqueta negra y suspiró, comenzó a temblar y sentía como si sus manos quisieran crear explosiones.
«Vamos idiota, tú puedes hacerlo»
— Deku.
— ¿Mhm?
Katsuki tomó de la cintura a Izuku y comenzó a caminar hasta el árbol, un pequeño post-it estaba pegado y Midoriya lo tomó.
— ¿T C C?
— Sí Deku.
— ¿Es alguno de tus códigos?
— No idiota.
Bakugo se arrodilló frente a Midoriya y este lo miró asombrado, Katsuki sonrió y le mostró el bonito anillo de compromiso a Izuku mientras seguía en shock.
— ¿Te casarías conmigo?
Izuku se lanzó al cuerpo de Bakugo y ambos cayeron en el pasto, el pecoso comenzó a besar toda la cara de su novio y el rubio puso sus manos en la cintura de su pareja.
— ¡Pensé que nunca me lo dirías!
— Claro que sí lo iba a hacer idiota, eres el amor de mi vida.
— También eres el amor de mi vida Kacchan.
Bakugo sonrió y sus lágrimas se formaron en sus ojos, Izuku besó las mejillas de Katsuki y suspiró.
— Sí, sí quiero casarme contigo Katsuki.
— Bien dicho Izuku, ahora nada ni nadie podrá separarnos.
— Y aunque trataran, jamás me alejaría de tu lado.
— Lo mismo digo... Te amo.
— Te amo más.
💍
Asies banda,, estoy comenzando a sentir esta cosa llamada amor. metanme un balazo en la cabeza.
