Omegaverse. Quirkless Deku. Pro Hero Bakugo.
❄️
El rubio miraba con sorpresa las pruebas de embarazo que se encontraban en su escritorio, la sonrisa de Izuku no desaparecía de su rostro haciendo que sus ojos tuvieran un especial brillo de felicidad.
— ¿Qué mierda es esto?
Bakugo miró al pecoso y este dejó de sonreír, miró hacía el suelo y comenzó a juguetear con sus manos. Katsuki suspiró cansado y sobó sus cienes, tomó las dos pruebas de embarazo y efectivamente, estas daban positivo.
— ¿Por qué pasó esto?
— Pues verás... Cuando dos personas se aman y quieren un hijo pues se unen mediante el cuer-
— ¡Eso sí lo sé idiota!
Se levantó de su escritorio y rodeó el mueble, tomó las pruebas de embarazo y tomó las manos de Deku para entregárselas. Suspiró e Izuku lo miró confundido.
— ¿No estás feliz, Kacchan?
— No, no lo estoy — se sentó en el escritorio y miró al techo como si buscara algunas respuestas de como habían llegado hasta ahí.
Eran pareja desde hace dos años, a sus veinticinco años se encontraba en la cima del ranking de héroes, incluso lo han llamado como el siguiente símbolo de la paz aunque no podían compararlo con All Might, eran muy diferentes. Demasiado.
Había logrado superar a su mentor, había superado a todos los extras. Había logrado todo lo que se propuso.
Pero, le llegaba la noticia de que sería papá, eso lo tomó desprevenido. Su edad ya era la correcta para ser padre pero, aunque le doliera a Deku, no quería tener hijos con él. Ni con nadie.
— Entiendo...
— Desaparece esas pruebas o no sé que mierda hagas pero que nadie te vea con eso.
— ¿Fue un error?
— ¿Qué?
Miró a los ojos a Izuku, sus lágrimas comenzaban a resbalar por sus mejillas y el pecho de Katsuki sintió una presión, había lastimado de nuevo a Midoriya. Se supone que los alfas tienen que proteger a sus omegas. Pero, definitivamente, Katsuki no estaba listo para marcar a su omega.
— Deku, no es eso — suspiró y miró el piso, podía escuchar los sollozos de Deku y se sintió aún peor, — Estoy en la cima, es lo que siempre quise... Pero no dejaré que lo arruines dándome pruebas de un hijo que no es mío.
Vió los zapatos de Izuku acercándose a él y levantó la mirada.
Una fuerte cachetada recibió en su mejilla derecha, miró a Izuku y su mirada llena de enojo y tristeza hizo que su estómago se revolviera.
— ¡Idiota! — gritó el peliverde y se alejó de él comenzando a caminar hacía la salida de su despacho, tiró las pruebas en el basurero que se encontraba a un lado de la puerta y miró a Katsuki, — No cambiaste nada, Bakugo.
🌩️
Había pensando mejor las cosas y en verdad había metido la pata, el lado alfa de su interior lloraba y gritaba en busca de su omega. Los instintos lo estaban dominando y si no le ganaba, iría a buscar a Izuku. Es lo que se supone que debía hacer, eran pareja, iban a tener un hijo.
Sentía como si alguien le hubiera lanzado agua fría, sentía un extraño sentimiento que jamás había sentido, con nadie.
Se sentía solo, triste y un completo imbécil. En su adolescencia se había metido con varias muchachillas pero sólo era para pasarla bien porque ni siquiera sabía como se sentía realmente el estar enamorado.
