Si, si, si lo sé, no estoy idiota.
Se que el cumpleaños de Bakugo es el 20 de abril y ya ha pasado bastante tiempo, pero la verdad es que se me ocurrió esta idea y quise hacerla.
Espero la disfruten y no lloren mucho, porque yo si llore.
Advertencia: Katsuki de ocho años, ¿Sad?
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Se despertó gracias a los gritos de su madre, el niño de cabello cenizo suspiro desganado, tallando su ojo con cansancio; aquellas semanas habían sido muy complicadas en su casa, problemas de parejas como solían decir sus padres. Miro el calendario que tenia colgado y sonrió con emoción.—¡Al fin!
Grito emocionado levantándose de su cama, hace un año su madre le había prometido llevarlo a una tienda para comprarle los últimos tomos del manga Vida real, junto a una figurilla coleccionable de su personaje favorita. Se bajó de la cama con emoción y salió de su habitación, al llegar al último escalón se detuvo, no había señales de un cartel, ni pastel, ni globos, ni nada que hiciera referencia a su cumpleaños.
Extrañado avanzó un poco a la sala de su casa, escuchando a su madre hablar junto a un mujer que conocía bien.
—Inko cálmate —Sugirió la rubia algo preocupada.
—¡Es que no puedo Mitsuki —Exclamó— Izuku ha estado demasiado triste, no quiere ni si quiera comer, ya no se que hacer y sinceramente temo por su vida.
—¡Yo si —Grito la rubia animandole— Saldremos hoy juntas con Izuku
—¿Pero y tu hijo?
—Oh... —Se formó un silencio— No importa, puede quedarse solo un par de horas, el entenderá.
El corazón del joven rubio se encogió, ¿Acaso su propia madre prefería a otro niño antes que a él? Tal vez si, era lo que pensaba el pequeño rubio. Se acerco ambas mujeres con una mirada algo dolida.
—Mamá —Llamo.
—¿Que pasa Katsuki? —La mujer le miro sonriente.
—¿Iremos a comprar las cosas para...? —No le dejo terminar.
—No cielo, debo hacerle un favor a Inko.
—¡Pero! —Exclamó— Prometiste que iríamos...
—Katsuki por esta vez no
—¡Pero solo hoy venderán figuras de (T/N) —Volvió a protestar con lágrimas— ¡Ve otro día atender al tonto Izuku mamá!
—¡Katsuki te he dicho que no! —Grito molesta sacada de sus cabales.
—¡Mamá no seas... —Se quedó callado al sentir la bofetada que le dio su madre, de inmediato bajo la mirada; mientras la de cabello verde no decía nada.
—Katsuki te he dicho que no, mañana iremos, ahora mismo Izuku esta grave, iré ayudarle a Inko.
—¡Eres una bruja!
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La dueña de mi sonrisa (Bakugou X lectora)
Fiksi PenggemarSe enamoro de un alusión, de algo que no existía. Ella no era real solo aparecía en sueños, pero eso le bastaba a él para poder seguir luchando. Pero poco a poco una terrible verdad descubriría, luego de eso estaba seguro que no habría vuelta atrás...