La dueña de mi sonrisa (Bakugou X lectora)

Capítulo 19

Si quieren sentir el capitulo de verdad, les recomiendo que lo lean escuchando la canción “Lonely” de Justin Bieber.

De verdad le da un gran toque, yo la escuché varias veces mientras escribía y me sentí identificada con el capítulo.

La canción me inspiró.
••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••

¿Gritar? No, él ya no gritaba, por lo menos no en el exterior, ¿Insultar? No, él ya no hacia aquella barbaridad, ¿Respirar? No, ya no más. Tal vez te preguntes ¿Que pasó? Yo puedo responderte eso, solo necesito que te sientes, te arropes con una manta junto con las luces apagadas, una caja de pañuelos y solo reza para no llorar en el proceso.

[...]
Ocho meses antes.

El rubio de ojos rubíes se encontraba sentado mirando una foto tuya, una pequeña sonrisa surcaba sus labios, un destello de admiración y emoción sobresalía de sus ojos. ¿Por qué estaba feliz? Fácil, se había enterado que tu anime iba a estrenar una nueva película.

—Que bueno que compre esto por adelantado —Sonrió viendo el boleto para la próxima semana.

—¡Oye Bakugo! —El rubio escondió sus cosas debajo de la almohada, al escuchar la voz de su amigo rubio.

—¿Que pasa Kaminari? —Le pregunto neutro suspirando.

A veces él deseaba dejar esa farsa, no le gustaba estar calmado, odiaba cuando interrumpían su privacidad, cuando tomaban sus cosas sin pedirlas o hablaran de cosas que a él no le interesaban; ahora él era invisible, las personas comenzaron a dejarlo de tomar en cuenta, su presencia dejaba de ser existente, ya ni participaba en clases, solo si se lo pedían.

De lo contrario se mantenía callado, mirando la ventana o mirando su celular con una sonrisa genuina. Miró al rubio con un rayo en su cabello, este sonreía con emoción, cosa que desconcertó un poco al de ojos rubí.

—¡Nos vamos de excursión a Osaka durante tres semanas! —El rubio abrió sus ojos asombrado.

—¡¿Qué?! ¡Yo no quiero ir! —Dijo molesto.

—Lo siento amigo, ya se decidió, toda la clase voto y así va ser.

—¡P-pero yo no vote! —Protestó.

—Lo siento Bakugo, gano la mayoría,  Aizawa-sensei está de acuerdo así que empaca, nos vamos dentro de dos horas.

Le dijo feliz, antes de salir de la habitación del rubio, este puso seguro en su puerta, tomó el boleto para el cine y frunció su ceño; pequeñas lágrimas comenzaban acumularse en sus ojos y la impotencia le invadía ¿Por qué justo tenía que ser esa semana? Suspiro tragando las ganas de gritar.

—Maldita sea.

Susurro dejando salir sus lágrimas, cerró fuertemente sus ojos, esperando a que su llanto se detuviera, pero simplemente las lágrimas seguían cayendo, rodando por sus mejillas, mentón y finalmente descendían hacia su cuello, perdiéndose en el comienzo de la tela de su camisa, mojándola.

—Son unos estúpidos... —Murmuró pasando la manga de su suéter por sus ojos, limpiando todo rastro de debilidad— Supongo que ya no sirves —Dijo mirando el boleto con pena.