Capítulo 29

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Advertencia: pequeños lapsus de tiempo, saltara de mes en mes para una buena continuidad.
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Tiempo después.

2-A

Hoy comenzaba el nuevo ciclo escolar en U.A, habían pasado exactamente seis meses desde que Bakugo Katsuki había “Vuelto a la vida” y mejor que nunca, su cambio era más que notable para aquellas personas que estuvieron a su lado por años; sin duda era raro el ver decir gracias, a regaña dientes pero lo hacía o que no estuviera gritando a los cuatro vientos como solía hacerlo. Estaba por cumplir 17 años, sin duda ese tiempo le habían sentado de maravilla.

Su cabello rubio estaba un poco más largo, sus rasgos se volvieron más fuertes y había crecido en estatura, rozando el 1.79; mirar al rubio en ese estado, era simplemente atrapante y más con ese atrayente cuerpo trabajado. (Imagen en multimedia)

Pero había algo que no podría quitarle al rubio, a pesar de su mejoría y desarrollo en personalidad, seguía manteniendo su característico ceño fruncido y su mal hablado, además de altanero lenguaje.

—Y a mi que me importa que en este nuevo puto siclo lleguen nuevos extras —Dijo desinteresado el rubio, mientras miraba a su amigo pelirrojo.

—Bueno la verdad no te importa —El rubio sonrió divertido, asintiendo con su cabeza, dándole la razón al pelirrojo— Solo quería contanterlo por si vez que te emparejan con alguien extraño.

—Mientras no sea igual que imbécil de la rata eléctrica, todo genial.

Ambos sonrieron con diversión para negar; sin duda estaban mejor que antes. Pero guardaron silencio al ver una chica entrar abriendo la puerta de golpe, su cabello pelirrojo estaba revuelto y venía agitada.

—¡Por dios casi me rompo la boca en la entrada! —Exclamó pensando que estabas sola, pero al sentir dos miradas clavarse en su cuerpo se encrespo— ¡¿eh?! ¡¿Me he equivocado de salón?! —Pregunto alterada viendo que ambos chicos le miraban con algo de extrañeza— No, parece que no...

—Disculpa ¿Quien eres? —Se atrevió a cuestionar el pelirrojo.

—¡Soy Yuki Nishikado estudiante de nuevo ingreso, del curso 2-A! —Informó haciendo una reverencia— ¡Un placer conocerles!

El rubio le forma despectiva, era muy enérgica y eso no le gustaba, sentía que sería igual de molesta que Denki Kaminari o peor; no estaba de humor para lidiar con chicas nuevas, ni mucho menos tenía intención de hablarle o entablar una relación de amistad con aquella extraña. Tenía un sueño por cumplir y así debía ser.

[...]

—¡Vamos Bakugo, solo te pido una cita! —Exclamó la pelirroja.

—¡Que no, deja de ser tan pesada maldición!

Y allí estaban de nuevo, hace dos meses que la chica había llegado y no dejaba de insistirle al cenizo para que salieran a conocerse, como amigos claro, pero este se mostraba reacio al asunto y la ojiazul no entendía porque.

La dueña de mi sonrisa (Bakugou X lectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora