Capítulo 24

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No podía creer lo que Mike me estaba diciendo

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No podía creer lo que Mike me estaba diciendo. Ahora todo tenía sentido. Cuando salí de la oficina, Emma no se había ido, porque su bolso yacía en el escritorio, por eso le escribí y me respondió enseguida diciéndome que todavía estaba allá porque algo pasaba con los documentos que llevó. Sin embargo, Mike dijo que Carter se la llevó arrastras del edificio, entonces eso tuvo que haber sido después que yo salí, pues, no escuché nada, porque para eso se lo hubieran dicho a mi jefe y posteriormente a mí.

Sin decir una palabra, subí al auto de Mike. Solo observaba por la ventana sin dejar de pensar en lo que estaba pasando: Emma desaparecida. ¿Quién iba a pensar algo así sobre Carter? Ese chico tan dulce, amable y cariñoso. Una vez más estaba comprobado lo que leí en una revista que se titulaba: "El amor ciega a las personas" ahí reflejaron la historia de una mujer que vivió una relación toxica durante años, hasta que un día su esposo la asesinó, y luego él se quitó la vida frente a su pequeña de tres años.

Cuando eso sucedió, hubo una fuerte conmoción entre todos los habitantes de la ciudad. A la mujer le hicieron un homenaje, hasta salieron a protestar las feministas diciendo que ya estaban cansadas de los abusos de los hombres.

Yo, solo esperaba que las cosas con Emma fueran diferente. Que Carter solo se la haya llevado para despedirse de ella. Aunque honestamente, algo dentro de mí me decía que no era así, y eso me atemorizaba aún más. Saqué mi teléfono y llamé a Emma, no obstante, sonaba apagado al igual que el teléfono de Carter. Esta agonía, e incertidumbre me estaba consumiendo por dentro, yo quería saber de Emma. Emma se había convertido en mi amiga y solo quería lo mejor para ella.

—Mike, no quiero que le pase algo malo a Emma. —Dije, sobando mi brazo de arriba abajo.

—Todo estará bien. Ya lo verás. —Él sostuvo mi mano llevándose a los labios. —Tienes que calmarte.

Para cuando llegamos a la empresa, nadie se había ido. Miré la hora y eran las diez de la noche. Todos lucían cabizbajos, era sabido que la noticia de Emma los había tomado por sorpresa, la verdad era que todos la adoraban. La policía se hallaba interrogando a algunas personas y mi jefe a penas nos vio, se dirigió a nosotros, él lucía muy preocupado.

La policía le dijo al señor Anthony que iban a hacer una investigación exhaustiva porque Carter se llevó a Emma en contra de su voluntad, por lo tanto se le acusaba de secuestro.

Yo me sentía muy cansada, con ganas de dormir, pero con la presente situación, era poco probable que pudiera conciliar el sueño. Además, mañana viajaríamos a ver a Harper. Mason me envió un mensaje diciéndome que pasaría por mí a las ocho y Mike me propuso irme con él, así que debía avisarle a Mason que se adelantara.

Al llegar a casa, me tomé una pastilla para dormir. El cuello me dolía horrible al igual que la cabeza y la espalda. Harper operada y Emma desaparecida. ¿Luego qué? Quité la ropa quedándome solo en panty y me coloqué el pijama. Pronto, el sueño me invadió por completo incitándome a caer en sus brazos, una invitación muy tentadora que recibí gustosa.

Viviendo un amor entre letras |COMPLETA|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora