Hacía mucho tiempo que no lloraba desconsoladamente. Pero con Ethan me sentía siempre en un espacio seguro para ser yo misma.
Me aparté de él, mirándonos a los ojos. Intente sonreír, sí estaba todo bien, pero claro que no se veía en mi cara.
-Te eché muchísimo de menos.- Confesé.
Ethan asintió con una sonrisa. -Yo también Liv.- Sus manos se posaron en mi mejillas y las apretó burlón. Era su forma de molestarme, era un intento por hacerme reír y salir del mal momento.
Tomé distancia de su cuerpo y él me señaló un sofá para sentarme.
Por fin sentía como el nudo de mi garganta se había desatado, mi cuerpo comenzaba a calmarse poco a poco, lo notaba en los latidos de mi corazón.
-Gracias por invitarme.- Logré pronunciar al notar como el pelinegro se acercaba de nuevo a mi. Se dispuso a inspeccionar mi rostro atento, y con suavidad me volvió a acariciar para arreglar un poco mi maquillaje.
-¡¿Qué?!- Su mirada cargada de sorpresa se encontró fijamente con la mía. -Deberia decirte yo gracias por venir a verme, por fin.- Continuó con alegría. -¿Quieres agua o un té?- Me preguntó volviendo a tomar distancia de mi, con la amabilidad y la tranquilidad que lo caracterizaba.
-No, no, estoy bien, solo es qué me ha brotado el orgullo por ti.- Intenté no preocuparlo.
La verdad no terminaba de entender que me pasaba. Pero ahí estaba en una burbuja cargada de paz gracias a él.
Suspiré intentando liberarme un poco más de los sentimientos amontonados en mi cuerpo. -Te ves tan bello.-
Pude notar como Ethan se ponía nervioso. Cuando acomodaba mucho su cabello era una señal. Además se notaba que sus mejillas se enrojecian.
-¿Segura no quieres nada para beber?- Preguntó con una sonrisa burlona. -También te ves muy bien...- Asintió un poco más serio, y no pude evitar reírme de él.
-Ay pero que inglés educado.- Dije burlona mientras me acomodaba en mi lugar. El estalló de la risa y se encogió de hombros tímidamente mientras se sentaba al lado de mi.
El chiste del inglés era algo nuestro, un chiste interno que teníamos desde la escuela cuando nos burlabamos del profesor de inglés en clases y lo imitabamos con su tono británico. La verdad terminamos sin aprender nada.
Sin pensarlo me lancé sobre él abrazandolo de nuevo. -De verdad no pudo creer donde estamos. Eres una estrella de la música italiana.-
Ahora si, estábamos en nuestro clima de confianza.
-Yo tampoco lo termino de creer.- Confesó rodeando mi cintura con su brazo.
Dejé mi cabeza apoyada sobre su hombro.
-¿Que se siente?- Pregunté en voz baja.
-¿Lo qué?- Me miró con confusión.Me acomodé una vez más en mi lugar y volví a mirarlo a los ojos.
-No sé, todo esto de ser rock star E.T- Contesté haciendo mención del burlesco apodo que solían decirle en mi casa.
-Bueno, de verdad se siente como E.T, de otro planeta.- Entre risas intentó explicar.Sin previo aviso sentimos como la puerta de la habitación se abría. Ethan se levantó enseguida del sofá y avanzó hacia la figura intrusa que nos interrumpía.
-Eeesa, aquí siguen.- La voz de Damiano. El castaño se cruzó de brazos. -Gracias por invitarme a la reunión.- Con sarcasmo expresó mientras avanzaba por la habitación y se sentaba junto a mi. -Olivia, la verdad que nos tienes sorprendidos a todos, no te esperábamos.-
Hasta yo estaba sorprendida de mi misma. Le sonreí y me encogí de hombros.
-De eso se tratan las sorpresas.- Respondí mientras veía a Ethan cerrar la puerta de la habitación antes de que volviera para sentarse sobre el brazo del sofá al lado de Damiano.
-Y la verdad que le diste una buena sorpresa a Ethan, quedó mudo por el resto de la jornada. No reaccionaba que acabábamos de ganar el festival, se quedó colgado con el encuentro.- Muy burlón Damiano no dudó en contar la anécdota. -Le decíamos, reacciona Ethan ganaste San Remo, y él solo movía la cabeza y no decía nada.-
De paso Damiano para hacer más gracioso el cuento hacia mímica mofándose de Ethan.
-¿De verdad te pasó eso? - Estaba en completo shock por la historia que acaba de contar.
-¿Nunca te pasó de quedarte paralizado? Fueron demasiadas emociones para un día solo.- El pelinegro intentó defenderse y explicar un poco más la situación.
-A mi sucede todo el tiempo.- Pensé en voz alta y no pudimos evitar reírnos los tres al unísono por un instante. -Hey, Victoria y Thomas ¿dónde están? Damiano, diles que vengan.-Si, el plan era pasar tiempo con Ethan pero ya estaba Damiano con nosotros y la verdad se me hacía ilusión ver al resto del equipo.
-Thomas decidió acompañar a Vic a buscar a Chili para traerlo al hotel.- Explicó Damiano.
Los observé curiosa a ambos por un momento hasta que luego recordé que se trataba del perrito de Victoria, porque varias veces me había enviado fotos con él.
-Aw, que lindo que pueda tenerlo aquí con ella.- Comenté. Me causaba ternura. -Espero poder verlos cuando lleguen.- Comenté.
-Si, seguro los verás antes de irte ¿te quedas a cenar cierto?- Ethan me recordó como seguiría nuestra juntada.
-Por supuesto, ahora no podrás deshacerte de mi.- Asenti y lo apunté amenazadora por lo cual volvimos a reír.
-¿Viniste sola?- Damiano intrigó sin quitar su vista de mi.Asentí apartando mi vista y volviendo a mirar a Ethan.
-¿Y tu novio sigue en la ciudad?- Me cuestionó Damiano.
Volvi a mirarlo y asentí.
-Si... él vendrá a visitarlos otro día si se puede, pero ahora quería que me tomara el tiempo yo sola de estar con ustedes.- Expliqué con cierta incomodidad.
No quería que mal pensara sobre mi relación con Ethan ni con John, o cualquier suposición que pudieran imaginar.
-John me cae muy bien.- Comentó Damiano con una sonrisa burlona posando sus ojos sobre Ethan.
-¿Qué?- En un tono más alto que lo normal interrogó Ethan.Me quedé viéndolos a ambos de brazos cruzados sin entender que querían decir.
-Bueno, bueno, a mi también me cae bien tu novio, solo que no lo entiendo cuando habla.- Alzando sus manos como si intentara demostrar inocencia, mi mejor amigo me explicó. -Y además, si se pasa contigo, no me va a quedar hacerle entender que a Liv nadie le hace daño.- Continuó explicando con firmeza sin quitar los ojos de mi.
No pude evitar sonreírle, pero no porque me causara gracia lo que decía, todo lo contrario, me lo tomaba muy en serio. Y agradecía tenerlo.
Ethan siempre estaba ahí dispuesto a defenderme ante lo que fuera.
Él jamás dejarían que me hicieran daño.
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Buen día!
Lo único que pienso cuando leo es:
Damiano que te traes entre las manos tan curioso. Ethan tienes mi corazón, bebé. Liv, querida, este viaje recién comienza.Espero que todas se encuentren muy bien queridisimas y disfruten muchísimo de este capítulo.
La verdad estoy muy agradecida, pues la fanfic tiene 1K de lecturas y no puedo más de la alegría! Para mi, que nunca escribí en esta plataforma es algo que no esperaba, significa muchísimo, y obvio que todo el mérito va para los protagonistas sin dudas, que cada día me tienen más y más fanatizada y enamorada 🙊
Gracias por sus lecturas, por agregar la historia a sus bibliotecas, por sus votos y comentarios, de verdad es muy lindo recibirlo ❤
🧚♀️Espero que tengan un hermoso findesemana✨⭐
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Nothing Breaks Like a Heart [Ethan Torchio & Damiano David]
FanfictionEl suceso de Ethan Torchio y su banda, arrastran a la joven Olivia Traverso de vuelta a su hogar, del cual había decidido huir tras experimentar trágicos eventos familiares. Dispuesta a dejar el dolor atrás y a intentar entender que los traumas siem...