6.- Clases Nuevas, Aventuras y Amigos

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Harry despertó muy temprano a la mañana siguiente y tomó un gran desayuno en el gran comedor, luego se dirigió a sus clases y las disfruto todas. La última del día era pociones con Snape y quería hacerlo muy bien porque sabía que Snape no era un profesor que quisiera decepcionar. Al menos eso era lo que Remus le había dicho hasta el cansancio, se bueno con Snape, trátalo con respeto y Remus le había advertido lo que Snape haría en la primera clase con él. Slytherin y Gryffindor tenían clases juntos y Harry estaba muy contento de que Snape no mezclara las dos casas, los Slytherin estaban en un lado de la habitación, y los Gryffindor en el otro. Él entró y le dio su discurso que tenía reservado para todos los primeros años, y luego mirando a Harry se deslizó hasta quedar frente al chico.

– Ah Sr. Potter nuestra nueva celebridad – dijo tratando de sacar de quicio a Harry algo que Harry sabía que haría

– ¿Dígame Sr. Potter que obtendría si añado raíz de asfódelo en polvo a una infusión de ajenjo? – Hermione levantó la mano pero Snape la ignoró.

– Um, una poción para dormir señor, El Filtro de Muertos en Vida, Cómo el usado en la bella durmiente – Harry dijo inocentemente.

– Ya veo, parece que comencé demasiado fácil, dime cual es la diferencia entre acónito y luparia? –

– Son la misma planta señor, y otro nombres es, um – Harry vio que Hermione prácticamente se paraba del asiento levantando su mano.

– Estoy esperando Sr. Potter ¿cuál es el otro nombre? –

– Nápelo señor – Harry dijo suavemente.

– Sr. Weasley veamos si tiene la inteligencia de alguno de sus hermanos – Snape dijo ignorando completamente a Hermione y dirigiéndose hacia Ron – ¿Dime qué harías si te pido un bezoar? –

– Iría a buscar la piedra dentro del estómago de una cabra y um ¿se usa para antídotos para venenos señor? – Ron dijo feliz de que Remus le hubiera dicho que esperar con Snape.

– Ya veo, ¿así que ustedes creen que por leer un par de libros podrán pasar por mi clase sin problemas? – Snape dijo fríamente – Veamos cómo hacen preparando una simple poción para eliminar forúnculos –

Desafortunadamente aunque Neville era bueno con plantas no tenía ni la menor posibilidad de hacer esta poción correcta. El pobre chico logró derretir el caldero de Seamus y se vacío encima toda la poción. Snape estaba tan enojado que le quitó cinco puntos a Gryffindor y envió a Neville a la enfermería casi en lágrimas. Harry ayudó a limpiar el desastre y recibió otra mirada extraña de Snape que en vez de tener otra razón para comenzar a gritarle a Harry miró cuidadosamente como limpiaba. Snape hizo un movimiento con su varita y Harry lo miró asombrado al ver como el desastre desaparecía.

– No querríamos que el chico dorado tenga furúnculos en las manos ¿no es así? – bufó Snape.

– Lo siento señor – Harry dijo sabiendo que no era buena idea responderle a este temperamental mago.

– En efecto – Dijo Snape.

Ahora Snape estaba encontrando que Harry Potter era un niño muy difícil de descifrar. Él se veía igual a su padre pero no actuaba como él, era tan igual a su madre que dolía. Él estaba sentado en la sala de profesores tomando té una tarde al finalizar la semana cuando McGonagall entró luciendo engreída, oh que alegría ella había encontrado un buscador. Ella tomó asiento al frente de él, él dejó a un lado su taza de té y la miró levantando una ceja. Ellos eran amigos pero también eran Jefes de Casas rivales y les encantaba molestarse mutuamente. McGonagall se preocupaba profundamente por Snape y trataba de hacerse cargo de él cuando él lo necesitaba, eso y le gustaba burlarse de él y molestarlo porque era entretenido. Él también se lo hacía a ella y ahora las noticias que ella tenía iban a hacer que le diera un ataque.

Adoptando a Harry: Ojoloco y el hombre loboDonde viven las historias. Descúbrelo ahora