Capítulo treinta y uno

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—Eva, no sé qué narices hacer. La he cagado muchísimo con mi hermana —le escucho decir hasta que me ve y cuelga el teléfono de inmediato.

No sé cómo reaccionar a esto.

—Ya veo que sigues exactamente igual. ¿Ya lo sabe?

—Nuestros padres la llamaron para ver si sabía algo —se incorpora—, solo estaba preocupada.

Ni siquiera me ha dejado contárselo a mi mejor amiga, van predicándolo como si fuera información de índole público.

Me quito las convers y las dejo en el armario de la entrada.

—Publicarlo en Instagram, que así ahorráis en la factura de teléfono y os llevará menos tiempo.

—Siento como me comporté. Avery ha hablado conmigo y me ha hecho entrar en razón. Lamento no haber estado de tu lado.

—Llevas mucho sin estarlo, al parecer —me siento sobre mi cama.

—¿A qué te refieres? —se levanta y se pone a mi lado.

—A tu mierda de actitud; a que me dejaste tirada para drogarte, a que no me cuentas nada de lo que te pasa y a que encima vienes a criticarme por hacer lo mismo.

—Tu tampoco has hablado conmigo de Ford. Es mi mejor amigo, ¿sabes? —intenta excusarse.

No puedo evitar no ponerme a la defensiva—no pensé que necesitara tu bendición para que me gustase, si te digo la verdad.

—Joder Lizzie, pero no te cuesta nada hablar conmigo del tema, que es como mi hermano tío... Y, además, él tampoco me mencionó nunca que estuviese enamoradísimo de ti. Sabía que os traíais algo raro, pero nunca se me pasó por la cabeza que... bueno... pudieseis tener algo serio.

Mentiroso, sabías que le gustaba y nos separarte. Lástima que no pueda decírtelo así de claro.

—No tenemos nada —digo, con toda la confianza que me queda.

—Es que siento que si lo hubieseis tenido no habría pasado esto —se tensa de repente—. Y si hubieseis hablado conmigo al respecto, quizá lo habríais te...

Una llamada emergente de su teléfono nos interrumpe, no tarda en descolar

—Cris, no puedo hablar ahora.

La vena de la frente se le inflama de repente y sube mucho el tono de voz —te juro que lo mato. ¡Está loco! ¡Es que como lo vea no vuelve a andar! ¡Hijo de puta!

Empieza a chillar de repente, consiguiendo aterarme. Siempre hay que esperarse lo peor.

—¿Qué pasa?

Me ignora —es mi puta hermana, ¿sabes lo que habéis hecho? ¿Cómo que fue un reto? ¡Os mato a todos, os lo juro!—se levanta de la cama y empieza a dar vueltas mientras le grita al teléfono.

Cada vez estoy más nerviosa, no dejo de preguntarle qué pasa y él no deja de jurar y de chillarle a Cris.

—¿Solo se la tenía que follar? Christian, te juro que en cuanto os vea...

Cuelga dándole un golpe al teléfono, para después lanzarlo contra la pared. Después corre a por él para comprobar su estado.

—Ese hijo de puta lo grabó todo.

El mundo se me cae encima de nuevo, siento un gran peso sobre mis hombros.  Me desmayo mientras fijo la mirada en Noah, que está agarrándome  a la vez que pide ayuda.

Despierto con un foco de luz blanca sobre mi cabeza. Alguien está agarrando mi mano, giro la cabeza hacia la derecha y veo a mi padre sentado junto a mí con cara de preocupación.

Él [#1]  (COMPLETA)✓ (Pronombres Que Terminan En Mi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora