ANTES DE LEER:
-Contiene mucho OoC
-ATENCIÓN: Este es un capítulo corto y está conformado por un flashback.
Tomorrow
Lamió sus dedos con lentitud terminando los últimos rastros de tarta de chocolate que había en el refrigerador, quería comenzar con el de vainilla y fresas el cual seguramente sólo le duraría una hora.
Estaba nervioso, ansioso.
Durante las dos semanas posteriores al parto, Misa había estado cansada y tremendamente irritable. Bastaba cualquier excusa para que ella terminara enojada y eran esos momentos los que Ryuuzaki aprovechaba para pensar con detenimiento lo que pretendía hacer.
Meses atrás había detenido a Misa en el aeropuerto con una propuesta fantasma la cual ella había aceptado sin dudar un poco, pero sabía por las constantes "indirectas" de la chica, que su compromiso debía formalizarse.
Miró la pequeña caja que estaba en la mesa de centro frente a él, justo junto a la computadora que mostraba las páginas principales de los más prestigiosos periódicos electrónicos de Japón, Estados Unidos e Inglaterra.
¿Habría hecho una buena elección? Él no sabía qué tipo de anillo le gustaría a Misa Amane. Tampoco sabía por qué era tan importante formalizar un compromiso, pero si era tan especial como para que Misa Amane no quisiera ni dirigirle la mirada, tenía que hacerlo.
-Ryuuzaki- El nombrado miró el reloj, 4:45 am, habían pasado ya 50 minutos desde que había escuchado a su hija llorar, por lo que seguramente ya debería estar alimentada, cambiada y dormida.- Creo que deberías hablar con la señorita Misa en este momento, casi son las 5 de la mañana
-Sí, eso creo
-¿Estás seguro? Luces nervioso
-Sí... -suspiró- ¿por qué esto es tan importante?
-Bueno, ella es una mujer muy soñadora, le ilusiona mucho este tipo de cosas. Además, no es la única, realmente me siento sorprendido de que quieras hacer algo como esto.
-No pondré en duda mi palabra, Watari.
L Lawliet se levantó del sofá de la sala guardando el estuche negro en los bolsillos de su pantalón y caminó hasta la habitación principal. Logró oír un "sé natural" en un susurro y al entrar, pudo escuchar a su novia cantando con Ren en brazos.
-¿Misa? –Susurró, con manos en los bolsillos de su pantalón-
-¿Qué quieres? –Respondió con agresividad en su voz. En su rostro podía observarse el cansancio que le provocaba cuidar de dos pequeños niños sin la ayuda de su pareja. Sabía que tenía la culpa por sus constantes enojos que alejaban a Ryuuzaki-
-Debo salir- dijo sin inmutarse. Al instante pudo sentir la mirada de Misa clavándose en la suya, visiblemente molesta
-¿Salir?... ¿Con quién?-comenzó a interrogar con tono agresivo- ¿A dónde? ¿Por qué tan temprano?... ¿Sabes qué? Mejor ni me digas, anda y vete. Déjame sola con TUS dos hijos, desobligado...
-No comiences de nuevo, Amane...
Ryuuzaki se dirigió hacia la cama donde estaba recostada la modelo y se subió en ella adoptando su posición típica, justo a un lado de Misa.
-¿Qué yo comience qué? Hace dos semanas que parí y a ti parece no importarte. Me dejas sola, no te encargas de tus hijos, me tratas mal, no me hablas... ¿es porque estoy fea? ¿Acaso es eso, Ryuuzaki?
