-¿Seguro que estarás bien sin nosotros?
-Sí
Misa y L se encontraban en la puerta, frente a frente. En el jardín, una camioneta recién comprada era revisada por Watari para evitar inconvenientes.
Misa se iba... por unos días, pero se iba y en parte, todo era para bien de ella.
Desde que había aparecido en televisión por idea de Matt, el teléfono laboral de Misa no había dejado de sonar y eso sólo significaba una cosa: era tendencia en Japón y como tal, podía ser un momento fugaz y debía esforzarse al máximo para posicionarse como una de las idols más rentables.
-Pero... no sé. Yo estaría más cómoda si Watari se quedara contigo. Yo puedo viajar en tren.
-Definitivamente no.
-¿No confías en mi?
-Prefiero que no estés sola.
-Bien, sólo será una semana, ¿de acuerdo? Son dos días de grabación para la serie y luego está...eh...
-La sesión fotográfica, la entrevista para la revista y la entrevista en televisión
-Eso. En la habitación de los gemelos está todo lo que necesitas para cambiarlos, no vayas a bañarlos si estás solo. En la cocina están las fórmulas y dejé preparada algunas cosas para que coman en...
-Espera, ¿Ya comen?
Misa rodó los ojos
-¿Qué edad crees que tienen, Elle? Ellos iniciaron alimentación complementaria hace como cinco meses y dejaron el pecho hace también mucho tiempo. Sólo calienta un poco su comida y dales lentamente, vigila cuando lo coman. Tienen dientes, pero tienes que ver que den bocados pequeños. Matsu se ofreció a traerte algunas cosas para cuando se acabe lo que dejé, así que por lo que más quieras, POR-LO-QUE-MÁS-QUIERAS, no les des nada dulce.
-Comprendo
-Ya saben agarrar cosas, así que mantenlos lejos de objetos peligrosos. Y si tienes alguna duda, no dudes en llamarme. ¿De acuerdo, mi amor?
-Sí
Misa dio un último vistazo a los gemelos que aún dormían en el sofá, grabándose su imagen antes de separarse de ellos por más de unas horas, por primera vez desde que habían nacido.
"Te extrañaré" dijo Misa mirando a L, suplicante de una respuesta similar. L acunó la parte trasera de su fino cuello y la llevó lentamente hasta su pecho. Ella lo abrazó inmediatamente y él siguió el mismo camino.
-Cuídate mucho, Misa.
-Te amo
Misa respiró una última vez el aroma tan particular de L y tomó valor para subirse a la camioneta, pero terminó abrazándolo por mucho más tiempo, pues al querer irse, L no la soltó ni le permitió separarse.
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Ren jugó con sus pies balanceándolos de arriba abajo, con ciertos nervios por haberse quedado solo con su hermana y un hombre extraño que conducía bajo las condiciones que había escrito en su "libreta de deseos".
Uno de sus "ángeles", Light, viajaba en la parte superior del auto, tal como si fuera un sultán llevado por sus sirvientes y el otro, Beyond, había ido a inspeccionar el área justo para localizar el cuarto donde se encontraba el mejor investigador del mundo y buscar una forma de entrar al recinto.
