Solo negocios: B.E.N.Y. [Parte 1]

Un mes después. (Marcela POV)

Esta niña Beatriz resultó ser la joya de la corona, es rápida, concisa, entregada a su trabajo, propositiva, en fin, una luminaria en todo el sentido de la palabra. Me alegra mucho haberla contratado, el único problema es compartirla con Armando... Es que resuuuuulta que la secretaria de Armando renunció hace unas semanas porque falleció su padre y se tuvo que regresar a México, al principio Mariana le ayudaba, pero él necesitaba a una economista, así que, ya saben, Beatriz ha estado apoyándolo con lo que se presentara, proyecciones de pago, lidiar con los bancos, etc.

Me estaba maquillando frente al espejo y sus brazos me rodearon la cintura mientras me llenaba de besos el cuello:
-Buenos días, mi leona de la moda.
-Buenos días, mi amor...
*Pues si, ¿qué le iba a decir? ¿Buenos días "señor de la basura"?*
-¿Cómo amaneciste, guapa? ¿Quieres que te haga desayuno?
-Gracias tesoro, pero no, algo le pediré a Beatriz cuando llegue a la empresa, ya vamos tarde.
-Oye, que bueno que la mencionas, ¡Betty es lo máximo! No sabes, entrar con ella a un banco es sinónimo de que vamos a salir con pura buena noticia, no sé cual sea su magia, tal vez los lentes y la ropa de...
*Lo tuve que interrumpir porque no me gustaba que se hicieran comentarios de alguien que no hace otra cosa mas que su trabajo*
-¡QUE BUENO! Me alegro mucho, pero, por favor, no hagas comentarios como el que ibas a hacerme sobre el aspecto de Beatriz o su forma de vestir.
-¿Amanecimos sensibles?
-No, Armando, pero no me gusta que siquiera pienses en expresarte así de la niña, que solo hace mas que sacarte de los problemas que te mete el incompetente de Ricardo o deja sin resolver el baboso de Mata.
-Será que te molesta porque te ves en ella... ¿Te acuerdas?, tu también tuviste tu etapa de oruga.
-Cállate, me voy a cambiar porque ya perdimos mucho tiempo, y ve pensando en quien te va a ayudar porque yo necesito a Beatriz, búscate la tuya.

Llegamos a V&M y cada quien a su oficina, donde a mi me esperaba algo en el escritorio: "Best boss ever" decía la nota que estaba pegada en una barra energética. Me dio ternura, y la verdad no iba a desperdiciarla, era de fresa y a mi me gustan mucho. La tenía que buscar para agradecerle y pedirle el desayuno, estaba en su oficina, solo bastó con asomar un poco de mi cabeza por la puerta:
-Buenos días, señorita Valencia.
-Buenos días Beatriz, ¿cómo está?
-¡Muy bien! Y muy apenada, sé que mi compromiso es con usted, pero ya ve que me comentó que le ayudara al señor Armando, así que decidí madrugar para adelantar pendientes que tengo con usted. ¿Co-como está?
-¿Yo? ¿La "best boss ever"? Jajaja
*La verdad al decirlo no pude evitar soltar una risita, que pensándolo bien, me hizo ver bastante tonta seguramente*
-¡Ah! Ya encontró la barra, si no le gusta puede regalarla o algo, no hay problema, que pena.
-No diga eso, Beatriz, me gustó mucho, es mas, me la voy a comer en lo que me pide algo para comer, ¿Puede?
-Claro que si, ¿lo de siempre?
-Si, por favor, pero sin aceituna el baguette esta vez.
-Perfecto, ahorita que llegue, yo misma bajo a recoger el paquete.
-Graciaaas, best assistant ever.
*"¿Por qué dijiste eso, Marcela?"*

Me senté en mi escritorio a sacar pendientes, cuando me entró una llamada.