De vuelta (Betty POV)

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Me temblaba todo... La voz mas que nada.

-¿Aló?
-Betty, gracias a Dios contesta.
-¿Pasó algo, señor Armando?
-No, no, solo necesitaba recordarle la reunión y confirmar su asistencia.
-No estoy en el país, señor.
-¿QUÉ? ¿COMO QUE NO?
-Tal como oye, pero no se preocupe, dejé a un representante.
-¿Usted cree que con eso basta?
-Debería, porque yo no tengo nada más qué hacer en su empresa.
-Ya somos dos.
-¿Perdón?
-Si, no sé si se acuerde, pero, yo ya no estoy al frente, es Calderón, es más, ya ni he ido desde que usted se fue.
-Pero, señor, usted trabajó mucho por ese lugar, es suyo más que nada.
-Cuando hacemos cosas malas que parecen buenas, todo se voltea en nuestra contra.
"Razón tiene..."
-Eso si...
-¿Cómo está usted?
-Pues, supongo que bien, mejor.
-Yo no.
-Me imagino, perdió la empresa en un chasquido.
-No solo eso, Betty, perdí mi vida entera. Mis padres me odian, mi empresa se me fue como arena entre los dedos, Y MARCELA Y YO TERMINAMOS.
-¿¡QUÉ?! Lo lamento en verdad.
-Lo sé todo, TODO.
-¿De qué habla?
-Usted y Marcela.
-Armando, perdóneme, yo no quería que esto avanzara tanto, no quería lastimar a nadie, solo sucedió.
-Créame que si mi intensión fuera gritarle y recriminarle, desde el primer momento lo hubiera hecho, pero no, no es lo que quiero con esta llamada.
-Aún así hice mal en corresponder a Marcela.
-Uno no manda en el amor, simplemente llega a derribar la puerta, Betty, y ya pasé mi etapa de coraje, de rencor, a decir verdad, estoy llegando a la resignación. Yo tampoco fui una pareja ideal para ella, la engañé muchas veces, pero seguía ahí porque era lo que esperaban de nosotros, yo desgasté el cariño que ella pudo tenerme, amor no era, o tal vez si, de hermanos, pero estiré esa liga hasta que diera de sí, y no estuvo bien. Siendo honesto, sabía de sus preferencias desde hace mucho, solo volví a cerrar los ojos.
-¿Ha hablado con ella?
-No atiende mis llamadas, espero en algún futuro poder hablarlo y disculparme de frente, la traté muy mal la última vez que nos vimos.
-Me sorprende su actitud.
-A mi también, al principio fui muy volátil porque me sentía herido del ego, al "gran Armando Mendoza se le había ido una viva"... Cosifiqué a cada mujer que estuvo conmigo, y me vine a dar cuenta cuando herí a mi hermana hasta que me cansé, porque eso es Marcela al fin de cuentas, mi hermana. Espero que cuando la vea no le diga que habló conmigo, en algún momento la buscaré, creo que ninguno está listo para hacerlo por ahora.
-Disculpe que lo interrumpa, señor, ¿Cuál era el motivo de su llamada?
-Que me tenga informado de lo que pase en V&M, a manera de lo posible, no pretendo quedarme aislado de la empresa, aunque no tengo prohibido ir, no siento correcto estar en un lugar donde me aborrecen. Si me permite, quiero seguir comunicado con usted.
-Está bien, como guste.
-Entre usted y yo debe quedar esto.
-Así será.
-Es más, cámbieme el nombre de contacto. No quiero que de ninguna manera nadie se entere de qué mantenemos contacto.
-Claro que si, señor, no se preocupe por eso.

—FIN DE LLAMADA. DURACIÓN: 00:15:54—

-¿Está todo bien?
-Ni me acordaba que estabas aquí, mmm, si, estoy bien. Disculpa, necesito estar sola, ¿Te molesta?
-No, no, para nada. Me retiro, salgo solo, no te preocupes.
-¿Te veo después?
-Claro que si, me llamas cualquier cosa.

No creo que les tenga mucho que contar, pasaron algunos días desde esa llamada, Dante me hacía compañía a veces, Cecilia cada vez me daba ropa mas linda, teníamos buenas pláticas, realmente me hacía sentir mejor.
Poco a poco recuperé completamente la confianza en mi, sentí que esta intervención mas que nada fue una rehabilitación, y pensar que vine huyendo de mis problemas y... Pues si huí de algunos, pero solucioné otros, estoy muy agradecida con toda la gente linda que me ha apoyado.

"Tengo que llamar a este baboso... Ya hace mucho que no sé nada de NY..."

-¿Bueno?
-¡Nicolás! ¡Hasta que me contestas! ¿Por qué me mandaste a buzón tantas veces?
-Traía perdido el celular, Betty, larga historia.
-Cuéntame, ¿Qué ha pasado? ¿Y la junta?
-Fue hace unos días, no me reportaba porque tu me dijiste que no te buscara, que tu lo harías...
-Ya, aquí estoy, ¿ENTONCES? ¡Dime!
Agarró aire y se soltó hablando un buen rato...
-... Para hacerte corto el cuento, tienes que volver, entré como VP pero necesitamos que vuelvas porque no quieren de vuelta la empresa.
-¿QUE YO QUÉ?
-Efectivamente, quieren que sigamos con esta treta hasta que V&M se levante.
-¿Y eso por cuanto tiempo sería?
-Pues tu mejor que nadie sabes que no son dos o tres días...
-¡Maldita sea, Nicolás!
-Betty, te necesitan acá y tu no puedes fallarnos.
-¿"Fallarnos"?
-Yo ya formo parte de esta empresa, Betty, y creo en el potencial del porvenir que tiene, así como tu creíste en el plan de trabajo de Armando.
"Bueno.. A Armando no le puedo ayudar mucho estando lejos..."
-Algo tienes de razón... Voy a volver.
-¡Yey!
-¿Me he perdido de mucho?
-Pues... He convivido con los Valencia de cerca.
-¿Por qué?
-¿Qué otra me quedaba? ¿Hacerme amigo de las secretarias? Las cuales me han amenazado para decirles donde te encuentras, así que mejor ni me les acerco, además, mi oficina está frente a la de ya-sabes-quién.
-¿Y...? ¿Como está?
-La verdad, puedo decirte que está sufriendo por tu ausencia.
-¡Ay! ¡Por Dios! ¿Ahora eres su amigo?
-No, no, yo estoy de tu lado, pero ella ha demostrado no tener ojos para nadie más que no seas tu, en fin, hasta prometió no molestarme preguntando por ti.
-¿En serio?
-Si... Ella no quiere herirte más, pero bueno, yo ya no te voy a decir más, no quiero que pienses que te quiero lavar el cerebro.
-Yo creo que me voy a regresar ya, Nicolás, ¿Me puedes buscar vuelo?
-Claro que si, hermana.
-El más cercano, por favor, búscame el mas cercano.
-Ya ando en eso, ahorita te mando tu boleto.

Solo negocios: B.E.N.Y. [Parte 1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora