Solo negocios: B.E.N.Y. [Parte 1]

"Un ojo al gato y otro al garabato". (Marcela POV)

Estas semanas han estado llenas de tensión, apenas y saludo a Armando en la oficina, ni hablar de que no he ido a su departamento y mucho menos que hemos hablado de "aquello". La empresa ha sido una locura, al menos las colecciones de Hugo han estado en lo mejor de lo mejor, eso quiere decir que estamos reponiéndonos, supe que Armando la cagó en unos negocios, y adivinen quien le salvó el culo, así es, Beatriz, que por cierto ni a mi oficina ha entrado, todo el trabajo que le pido lo hace en la oficina de él, porque le hizo un espacio, incluso la vi dos veces en todos estos días, yo no sé qué tanto traen esos dos, pero ya ni la he recogido en la mañana ni cuando salimos la he dejado en casa, no se preocupen, de eso hablaremos ella y yo hoy, de mi cuenta corre que me diga qué ha pasado o si algo hice mal, la incomodé o qué, ¿Será acaso Mireyita's case 2.0?!...

Eran las 7:00 P.M. y ya no había nadie en la empresa, ella estaba en la oficina de Armando trabajando:
-Hi! ¿Puedo pasar?
Alzó la mirada con una expresión entre sorpresa y susto, pobre, no me esperaba.
-¡Hola! Perdón, ¿Tienes mucho tiempo ahí parada?
-No mucho, te extraño, a decir verdad, aunque suene tonto... ¿Ya Armando te va a soltar? ¿Te trata bien? Si quieres yo le digo que se está pasando con el trabajo o...
-No me molesta, extraño escuchar tu música rara camino a casa, el dinero extra me viene excelente, ahorita no andan bien las cosas en casa, eso también lo sabes. Creo que no he descuidado mis labores contigo, ¿O si?
-No, no, nada de eso, no me has fallado, pero se me hace raro que ya ni entras a mi oficina, ¿Quieres que hablemos de algo? ¿Te incomodé aquella vez? ¿Ocupas espacio?
Dejó todo de lado para verme a los ojos. Era una mirada diferente, segura, con un fuego a punto de arder, no sé como ponerlo en palabras.
-No me has incomodado de ninguna manera, no sé porque te asusta tanto ese tema. Además parece que soy tu novia, jajajaja.
-Eres mi amiga, no quiero estropear nada o sobrepasar algún límite que tengas establecido, yo no conozco tus políticas personales.
-Ya hemos platicado esto, yo te diré cuando algo esté mal, además ya terminé con lo que necesitaba tu novio, mañana volvemos a la rutina, si gustas, claro.
-Ah, si... Mi novio.
-Disculpa, ¿Terminaron?
-Creo que tu lo has visto mas que yo en estas semanas, ¿Te ha dicho algo?, bueno, no es como que sea el más privado con los problemas de nuestra relación. Te quería ver para que habláramos del proyecto que traigo en mente, ¿Qué dices?
-A ese barco yo me subí antes de que pusieran el primer remache, me imagino que te urge comenzar en algún punto a la brevedad.
-¡Si! Quiero empezar algo pronto. ¿Puedo llevarte a casa?
Me levanté de la silla donde estaba e hice una reverencia extendiéndole mi mano para con ella.
-¡Si, por favor! ¡Sácame de mi torre!

Tomó sus cosas y salimos de ahí entre risas y plática. Me sentía rara con ella, demasiado cómoda con ella, ya era parte de mi rutina, pero demasiado, incluso la extrañaba cuando se ausentaba. Beatriz es muy especial para mi.

-¡Llegamos! Sana y salva en casa.
-...
-¿Beatriz?
Me acerqué a ella, me preocupé que no respondiera, resulta que estaba dormida y poco a poco se reincorporó hasta levantar la cabeza y verme a los ojos, no me pasaba por la mente la idea de apartarme, no sé porqué, y al parecer a ella tampoco. Permanecimos así, congeladas en una estatua de carne y hueso, tiene un magnetismo irremediable y yo siento que soy su polo opuesto. No quiero pasar ninguna línea. A lo mejor es mi soledad hablando y malinterpretando emociones.

Parpadeó suavemente y al fin pronunció palabra:
-Perdóname por dormirme, no volverá a pasar, estoy muy cansada.
-Pasa linda noche. Salúdame a tus padres. Mañana será un día lleno de mucho trabajo para nosotras, señorita, así que la necesito con mucha energía.
-Te prometo que así será. Que descanses.

Salí camino a mi casa y sonaba la canción favorita de Beatriz, la había agregado a mi playlist para conducir en una de esas veces que íbamos a trabajar.