No fui yo

Parte 6

Lan Wangji veía con demasiada preocupación la herida que no dejaba de sangrar, la piel del omega se ponía cada vez más pálida y sus ojos se empezaban a cerrar. Volaba lo más rápido que podía hacía Yiling.

–Wei Ying, no te duermas, mírame, por favor– trataba de hablarle pero parecía que el otro no le escuchaba.

–¡Wangji!– escucho la voz de su hermano detrás de él, pero no se detuvo, incluso aumentó la velocidad. No sabía las intenciones de su hermano, pero no podía parar a preguntarle, tenía entre sus brazos a un Wei Ying herido y no sabía porque su núcleo no lo ayudaba a detener el sangrado.

Cuando divisó los Túmulos a la distancia empezó a descender sin prestar atención a los gritos de su hermano que seguía detrás de él.

Una vez que sus pies tocaron el suelo empezó a correr hacia la barrera que seguía intacta rezando por que lo dejara entrar. Al no notar resistencia entró sin detenerse ni por un segundo, vio a los Wen en el lugar, pero no encontró a Wen Qing.

Los remanentes Wen vieron con miedo a la figura de blanco que entró al lugar, pero rápidamente lo reconocieron como el alfa que había acompañado a Wei Wuxian meses antes, pero su alivio duró poco cuando vieron las túnicas blancas manchadas de rojo y el cuerpo inconsciente del omega.

Abuelita corrió hacia la pareja lo más rápido que su edad le permitía y jalo del brazo al alfa que se veía más desesperado con cada segundo que pasaba.

–Vamos a la cueva muchacho, ahí está A-Qing, no ha salido desde que el pequeño A-Xian se fue–dándole las gracias corrió hacía el lugar para encontrarse con el extraño cuadro de Wen Qionglin parado como una estatua al lado de su hermana, la cual estaba amarrada en el suelo.

Los dos subieron la mirada y los ojos de Wen Qing se llenaron rápidamente de lágrimas.

–¡Ying-didi!–gritó con desesperación al ver a su hermanito tan pálido y sangrando.

Lan Wangji lo colocó en la cama de piedra y desató a Wen Qing para que lo salvara. Wen Ning no hizo nada por detenerlos ya que técnicamente no estaban saliendo de la cueva, pero corrió junto con su hermana para detener la hemorragia.

–Gracias por traerlo Hanguang-Jun, sigue con vida, pero perdió mucha sangre.–

–No hay por que agradecer.–

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Por otro lado Lan Xichen y Nie Mingjue trataban de entrar pero la barrera les negaba el acceso enviando ligeros ataques de energía resentida que fácilmente esquivaban. Ninguno de los dos entendía como Lan Wangji había entrado tan rápido, aunque los dos sospechaban que era porque estaba cargando a Wei Wuxian.

–No van a poder entrar–dijo una voz sarcástica detrás de su espalda.–Llevo casi una hora tratando de romperla pero el bastardo de Wei Wuxian sí que es un genio– los dos se voltearon con sus espadas listas para atacar, pero se encontraron con un jóven de unos dieciséis o diecisiete años aproximadamente sentado tranquilamente en una piedra del lugar.

–¿Quién eres y quién te envió?– preguntó Nie Mingjue apuntando al mocoso con Baxia.

–Un gusto Jefe Nie, he escuchado maravillas de usted, mi nombre es Xue Yang– dijo mientras se levantaba en un movimiento ágil sobre la roca donde estaba sentado con anterioridad, no parecía exactamente asustado de tener dos espadas tan poderosas apuntando al mismo tiempo.–Con respecto a quién me mandó...digamos que es alguien que conocen muy bien– fue lo último que dijo antes de lanzarse a atacarlos con su propia espada.

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Lan Wangji salió de la cueva más tranquilo de lo que había estado antes, Wen Qing había detenido la hemorragia con éxito y estaba haciendo un chequeo de su condición. La herida había estado tan cerca de perforar su matriz y si ese hubiera sido el caso...Wei Ying no hubiera tenido salvación.

Pero estaba muy confundido, en ningún momento había aparecido el famoso alfa que había marcado a Wei Ying. Tuvo que haber venido corriendo al sentir a su omega herido. Lan Wangji estaba completamente ofendido por ese comportamiento tan deshonroso para ser pareja de Wei Ying, él merecía lo mejor del mundo. Si bien no era su asunto si iba a tener unas palabras con ese alfa descuidado. Ni siquiera tuvo que haber dejado a Wei Ying salir solo a un lugar tan peligroso sin su espada.

–¡Rich-gege!– la voz de A-Yuan lo sacó de sus pensamientos, se veía un poco más alto a comparación de la primera vez que lo había visto y lo confirmó cuando su abrazo le llegó un poco más arriba de la rodilla.

–A-Yuan–le devolvió el saludo, feliz de ver al niño.

–¡Rich-gege!, aún no es mañana, ¿qué hace Rich-gege aquí?– Lan Wangji no entendía a qué se refería el pequeño, pero antes de preguntarle salió de la cueva Wen Qionglin con lo que parecía un pedazo de papel.

–A-Yuan, tu A-Niang llegó temprano, está en su cama, pero está dormido, ve con cuidado–dijo tan pronto como estuvo cerca de los dos. Los ojos de A-Yuan brillaron de alegría.

–Si tio Ning, voy con A-Niang, ¡jugamos después Rich-gege!–el niño corrió dentro de la cueva con una gran sonrisa.

–Han-..Hanguang-Jun...encontramos esta nota a su nombre en la ropa del maestro Wei– en el pedazo de papel se podía ver claramente su nombre escrito con la desordenada letra de Wei Ying.

–Mmm, gracias–dijo mientras tomaba el papel.

–El maestro Wei no tardará mucho en despertar...tal vez debería verlo cuando haya leído la carta– sin más que decir hizo una reverencia y volvió dentro de la cueva.

Lan Wangji desdobló con cuidado el papel y empezó a leer.

Lan Zhan, mi hermoso Lan Zhan, si esta carta está en tus manos significa que falle y estoy muerto o prisionero. Como sea, eres el único en el que puedo confiar para esto...lo más seguro es que con mi ausencia los demás clanes vayan a los Túmulos Funerarios. No sé cuánto soportará la barrera sin mi pero la modifique para que puedas pasar sin complicaciones. Por favor Lan Zhan, salva a los Wen, se que no todos van a vivir, pero te suplico que salves a cuantos puedas. Se que te pido mucho pero no creo poder morir en paz si dejo que toda mi familia muera de nuevo.

También, en el bosque hay un árbol con las raíces salidas creando lo que parece ser un capullo, ahí va a estar A-Yuan escondido. Sálvalo, por favor, él no merece morir.

Lan Zhan, te he guardado muchos secretos y A-Yuan es uno de ellos...¿recuerdas cuando me preguntaste qué había pasado en la Cueva de la Tortuga de la Matanza y yo te dije que nada?, te mentí, en realidad tu y yo nos unimos y me marcaste, de esa unión nació A-Yuan...Lan Zhan, te amo tanto, te amo tanto mi alfa, quería decírtelo pero temía tu reacción. No se si me quieres de la misma forma en la que yo lo hago y lo menos que quería es que te casaras conmigo por culpa. Creeme, si hubiera sido por mi nunca te lo hubiera dicho, te habría dejado ser feliz con quien llegarás a amar en el futuro pero temo por la seguridad de mi rabanito, te amo Lan Zhan y me arrepiento de no habertelo dicho antes, pero ya no importa, sé feliz mi amor.

Con todo su amor, Wei Ying.