No fui yo

Parte 44

–Wuxian, debo de decir que el embarazo te sienta de maravilla–Huaisang estaba sentado en frente de su amigo tomando un té y comiendo algunos pastelitos dulces.

Él había corrido al día siguiente para buscar al omega y evitar que se encontrara con Jiang Wanyin. Lo había encontrado junto con Lan Wangji tomando un paseo para aliviar los mareos del omega. Ya habían disminuido debido a que estaba en el cuarto mes, pero aún habían mañanas en donde se despertaba con algunas náuseas, y siendo uno de esos días le había pedido a su pareja que lo acompañara a respirar un poco de aire fresco.

Le prometió al alfa que se quedaría con su pareja mientras él iba a hablar con su tío de lo que habían discutido ayer con Baoshan Sanren. La inmortal se había quedado en Recesos de las Nubes y lo haría hasta después de la boda, obviamente nadie le dijo que no podía o que debería de haber hecho una carta para preparar un cuarto con antelación, después de todo, ella era la infame Baoshan Sanren.

Por lo que ambos omegas habían continuado con el paseo, el cual estaba siendo dirigido por Nie Huaisang, quien evitaba las áreas comunes o lugares donde aquel omega de ropajes morados pudiera estar. Habían terminado en el Jingshi donde aún había algunos bocadillos que ambos podían disfrutar mientras hablaban de diversas cosas.

Wei Wuxian le había preguntado cómo había estado progresando el cortejo entre Nie Mingjue y Wen Ning y se río bastante ante las quejas de su amigo por la desvergüenza de la pareja. La verdad estaba sorprendido por parte de Wen Ning, pero al mismo tiempo se sentía feliz de que su hermanito pudiera atravesar esas paredes de timidez que la gente solía ver como debilidad.

Nie Huaisang había hecho el comentario ya que el omega realmente brillaba con salud y felicidad. Las mejillas que algunas vez estuvieron huecas ahora se encontraban rellenas y sonrojadas, el cabello maltratado se veía sedoso y saludable. Su piel que parecía haber adquirido un pálido mortal había vuelto a tener más color, y sus ojos, aquellos ojos grises que se habían visto tan apagados y muertos brillaban con amor y felicidad.

–Lan Zhan suele decir lo mismo, pero es porque aún no estoy hecho como una pelota. Cuando A-Yuan seguía dentro de mí me asuste por un tiempo puesto que mi barriga no crecía mucho aún estando en el sexto mes, pero Qing-jie me aseguro que no era nada raro por mi altura. Ahora con dos pequeños a bordo realmente se empieza a notar.–

Huaisang, el cual estaba mordiendo una delicia dulce casi la escupe.

–¿¡Dos!?, ¿cómo sabes que son dos?–

–Ohh, cierto, aún no lo sabes. Mi abuela me contó que es algo normal en nuestra familia, el primer bebé es un alfa, después son dos pequeños, el tercero es un beta y el cuarto es una pequeña. Hubieras visto la cara de Lan Zhan cuando nos enteramos– comentó Wei Wuxian entre algunas risas recordando la forma tan casual en la que Mo Lixue le había dicho.

–Vaya familia Wuxian, ahora tendré que hacer un nuevo bordado– dijo Nie Huaisang, recordando cuánto se había tardado en hacer el primero, buscando una frase bonita para el bebe.

–Por cierto, Huaisang, conocí a varios personajes curiosos durante mi estadía en la montaña de mi abuela. Aprendí una o dos cosas de ellos–el tono que el otro había utilizado le dio a entender que estaba insinuando algo.

–Oh, vamos Wuxian, debes de decirme, no puedo ni empezar a imaginarme a quién conociste en la legendaria montaña.–

–Bueno, no vayas a exaltarte, pero conocí a dioses, reyes y demonios– dijo en apenas un susurro, como si fuera un secreto que nadie más debía escuchar.

Nie Huaisang se tensó un poco cuando escuchó la palabra demonios, pero lo hizo aún más visible cuando el otro continuó hablando.

–Y ellos me enseñaron a detectar la diferencia de olores entre humanos y demonios a forma de juego, pero tal parece que ese juego me ha abierto los ojos, ¿hay algo que me quieras decir Huaisang?–