Parte 14

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La pregunta descolocó a ambos. No sabían a qué venía eso de repente, pero decidieron seguir con la plática para descubrir el propósito de todo esto.

–No, solo el líder Jiang y Wangji estuvieron ese día–respondió con una aparente calma Lan Xichen.

Los ojos negros de Wen Qing seguían desprovistos de emociones.

–Una lástima, eso hubiera sido un ejemplo perfecto para lo que les voy a decir–hizo una pausa dramática que tan solo puso más nerviosos a ambos jefes.–Obviamente sabrán que fue Wei Wuxian quien lo mató y yo no soy quien para criticar lo que hizo después de que el bastardo haya matado e incinerado al que alguna vez fue su hogar...Wen Chao fue encontrado completamente loco con úlceras en la piel que le habían desfigurado el rostro, le faltaban cachos de piel en las manos que habían sido arrancados por cadáveres feroces, su cabello había sido arrancado desde la raíz poco a poco, sus piernas eran inútiles, había tantos agujeros hechos por fantasmas que podían ver el hueso blanco... entre muchas otras cosas.–

Si bien habían escuchado el estado deplorable de Wen Chao cuando murió nunca recibieron el informe completo y nunca preguntaron por el, en esos momentos eso significaba un enemigo menos, nada más...pero esa era información que los impactó.

Si bien los omegas no eran débiles y se les permitía cultivar un núcleo dorado como cualquier otra raza, si había cierto estigma. Tenían entrenamientos especiales para evitar que fueran heridos con las espadas por accidentes y se habían creado guantes especiales que cuidaban sus manos para que no terminaran callosas por el constante entrenamiento, recibían clases especiales para controlar su aroma e incluso tenían ropa especial para que estuvieran protegidos durante las cacerías nocturnas.

Saber que un omega había sido capaz de matar a alguien de esa manera tan salvaje había creado una nueva imagen de Wei Wuxian en la cabeza de ambos líderes.

–¿A qué viene eso?–preguntó Nie Mingjue.

–Sé que en su secta, Líder Nie, es donde más guerreros omega hay. También sé que la secta Lan es famosa por los espectáculos de espada dirigidos por omegas, pero el que ustedes esten acostumbrados a un omega con una espada no significa que no los hayan menospreciado un poco– ambos líderes bajaron la cabeza un tanto avergonzados, pero toda su vida les habían enseñado a ayudar a los omegas y no pelear con ellos porque herirlos era una falta de respeto tan grande que podía terminar en la muerte.–No los estoy culpando... eso es culpa de mi secta hasta cierto punto.–

Con la última declaración ambos alfas levantaron sus rostros para ver sorprendidos a la alfa que veía detrás de ellos donde su familia trataba de actuar con normalidad después de todo lo que había estado ocurriendo los últimos días.

–¿A qué se refiere señorita Wen?–pregunto Lan Xichen intrigado en como los Wen podrían ser los responsables de la discriminación escondida hacía los omegas.

–Como sabrán, Wen Mao fue un hombre amable y fuerte, un alfa ejemplar, es una pena que sus ideales hayan sido ignorados por las últimas generaciones de los Wen–lo último lo dijo en apenas un susurro, pero Wen Qing estaba orgullosa de su apellido puesto que no todo había sido malo en su secta; hubo una época dorada para ellos donde existían los valores.–Su pareja de cultivación fue un omega que es relatado como una joya en la batalla. Abuelita solía contarnos a A-Ning y a mi cuando eramos niños de sus batallas contra los espíritus vengativos y cadáveres feroces saliendo siempre victoriosos, eran una pareja de ensueño. Cuando el omega, Wen Tian, quedó en cinta hubieron algunos que trataron de hacerle daño para debilitar a Wen Mao pero el plan salió muy mal, veinte cultivadores errantes murieron en la batalla de manera tan atroz que la gente llegó a pensar que Wen Tian estaba poseído por un espíritu sin precedentes, pero solo eran sus instintos omegas cuidado de sus crías.–

No fui yoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora