El cuervo y la serpiente - Severus Snape

Vacaciones familiares

El final del año llegó y Jessica, a pesar de haber sido comprendida por sus padres, no tuvo permiso de ir con sus amigos a la mansión Malfoy ya que sus padres no habían tenido oportunidad de conocerlos; para remediar esto el grupo formuló un astuto plan, pasarían las primeras semanas en casa de los Potter.

Euphemia Potter estaba feliz de que su hija al fin tuviera amistades con quien pasar el tiempo por lo que, asiendo caso omiso a las ''advertencias'' de su hijo, aceptó que el grupo completo pasara parte de las vacaciones en su casa. Mientras tanto, Fleamont Potter, quien no se veía muy feliz de que su hija tuviera novio, no pudo objetar ya que él mismo invitaba a los merodeadores a pasar tiempo en su casa durante el verano, además de haber celebrado la relación de su hijo. Sabía que, como padre, debía apoyarlos a ambos por igual.

Una vez en King Cross el grupo se separó, buscando a sus familias para llevarlas al punto de reunión acordado, uno de los bancos de la estación. Severus era quien se veía más nervioso puesto que no solo conocería a sus suegros, quienes también eran padres de su peor enemigo, sino que también presentaría a sus amigos con su madre, quien nunca había tenido oportunidad de conocerlos. Sin embargo, a pesar de que la esperó por mucho tiempo, ella nunca apareció.

- Sev ¿Estás bien?

Oyó la voz de su novia y asintió en respuesta mientras tomaba su mano para acercarse a los demás, tenía un muy mal presentimiento y la preocupación en su rostro era evidente, cosa que los Potter notaron enseguida.

- Oye, chico ¿Tus padres no vendrán por ti?

- Lamento que mi madre faltara a la reunión, señor Potter. Ella no suele tener este comportamiento, ha de haber pasado algo.

- Calma, lo entiendo ¿Quieres que te lleve a ver como está? Puede que no sea nada pero es mejor estar prevenidos.

Fleamont Potter puso una mano sobre el hombro del chico para tratar de convencerlo mientras lo veía pensar, Severus no quería llamar la atención pero realmente estaba preocupado por ella, su madre lo esperaba en la estación siempre que regresaba, incluso cuando sus amigos lo invitaban a pasar el verano con ellos. Sin decir más ambos partieron, junto con Abraxas Malfoy quien, a pesar de no estar de acuerdo en la relación que Eileen tenía con aquél muggle, también creía extraño que ella no fuera a ver a su hijo.

Los tres magos se apresuraron al oír el escandalo que provenía dentro de la casa Snape en La Hilandera, siendo Fleamont quien tomó acción contra el muggle al verlo golpear a la mujer que se veía indefensa. Eileen corrió a ellos al ver a su hijo, abrazándolo con fuerza mientras se disculpaba por no haber ido a su encuentro, Severus correspondió al abrazo de su madre con fuerza mientras todos salían de aquella casa, sabiendo que no tendrían problemas ya que Potter usó la pelea Muggle para dejar inconsciente al hombre.

Mientras iban de regreso Abraxas Malfoy, contrario a lo que todos creerían, usó su magia para curar a aquella mujer que alguna vez había sido su amiga; ya que era solo por el estrecho vinculo que había tenido con Eileen en sus años de escuela que permitía que su hijo se juntara con un ''sangre-sucia''. De regreso a King Cross Druella Black, madre de Bellatrix y Narcissa, seguía hablando con Euphemia Potter quienes parecían amigas de toda la vida aunque apenas se hubieran conocido.

- ¡Severus!

Sus amigos gritaron al unísono al verlo regresar, notando a la mujer que lo acompañaba, el Slytherin tomaba la mano de su madre de forma sobreprotectora mientras trataba de calmarse, pero no fue hasta que Abraxas Malfoy habló que pudo distraer su mente de lo que había pasado.

- Eileen, por tu seguridad, permanecerás en la mansión Malfoy durante el verano o al menos hasta que recuperes la cordura. No quisiera decir que te lo dije porque no sería educado de mi parte en esta situación, pero lo hice, te lo advertí.