El cuervo y la serpiente - Severus Snape

El diario

Un preocupado Harry Potter corría por los pasillos de la escuela en dirección a la biblioteca donde iba a encontrarse con sus amigos para una sesión de estudio, tanta era su prisa que no notó lo mojado que estaba el suelo en uno de los pasillos por lo que terminó resbalando y cayendo de cara contra las baldosas. Frente a él había un misterioso cuaderno con un nombre grabado en la tapa, el castaño asumió que se le había perdido a algún estudiante por lo que no dudo en levantarlo antes de seguir su camino.

Una vez en la reunión sacó sus libros, sin notar que aquel cuaderno se había colado entre ellos. Ron, quien había intentado robar los apuntes de su amigo, tomó el diario por accidente, mostrando una expresión confundida al ver el nombre de Tom Sorvolo Ryddle grabado en la tapa y extrañándose más aún al abrirlo y encontrarlo vacío.

- Oye, Harry ¿De donde sacaste este cuaderno?

- Lo encontré camino aquí, pensaba preguntarle a los prefectos si alguien conocía a su dueño para devolverlo.

- Pero está vacío. ¿Te importa si lo uso para copiar mis apuntes? Creo que, quien lo haya perdido, no extrañará un montón de hojas en blanco.

El castaño asintió ante aquella pregunta mientras se disponía a comparar sus apuntes con los de los gemelos Malfoy, siendo interrumpidos nuevamente por el pelirrojo quien trataba de mostrarles los extraños sucesos que estaban ocurriendo. En primer lugar, la tinta se desvaneció en cuando Weasley puso su nombre y, después de eso, una respuesta apareció; Tom Marvolo Riddle, el dueño de aquél diario, se había presentado.

Todos miraron con curiosidad aquel cuaderno, anotando sus nombres para ser saludados de la misma forma que Ron lo había sido. Lyra fue la primera en hacer preguntas al cuaderno, comenzando por lo básico mientras que poco a poco profundizaba en el tema de los accidentes en Hogwarts, varias personas llevaban petrificadas un par de días y eso preocupaba a todos los alumnos, tenían miedo de ser los siguientes.

- Riddle dice que sólo los impuros serán atacados ¿Qué significa eso?

- Se refiere a los sangre sucia, he escuchado ese término varias veces en casa. Así llaman a los hijos de Muggles, lo que significa que casi todos estamos a salvo excepto por...

- Por mi ¿No es verdad?

La rubia asintió mientras observaba a Granger, poco a poco todos comenzaban a ponerse nerviosos respecto a las palabras del diario, temían por su amiga. Fue entonces que Harry tomó el cuaderno, escribiendo con su pluma otra de las preguntas.

''¿El basilisco de Salazar está detrás de esto?''

''Si.''

''¿Sabes donde está?''

''En la cámara de los secretos''

''¿Puedes decirnos donde está?''

''No, pero puedo mostrarles.''

En ese momento el libro cambió de página antes de comenzar a brillar absorbiendo al grupo entero en su interior. En aquella visión apareció un pelinegro quien se veía bastante mayor que ellos y miraba fijamente, al igual que el resto de los alumnos presentes, como sacaban algo en una camilla; al acercarse un poco más el grupo pudo saber de que se trataba, un cadáver.

- Es Myrtle.

Exclamó Euphemia, siendo silenciada por sus amigos, quienes trataban de oír la conversación que el pelinegro estaba teniendo con Albus Dumbledore; en cuanto el director se alejó el chico se apresuró por los pasillos, siendo seguido de cerca por el grupo que miraba curioso cada detalle, intentando recordar cada paso que el mayor estaba dando. El recuerdo finalizó con Hagrid siendo inculpado por lo sucedido mientras una araña fugitiva se alejaba de ellos, el grupo se miró sin comprender lo que habían presenciado, de lo único que estaban seguros era de que el guardabosques tendría que darles una respuesta.