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Damon

Me despierto mirando a mi alrededor y al ver prácticamente a todos en la habitación me doy cuenta que estamos en la habitación de huéspedes de mi casa.

Recuerdos de las noche anterior pasan por mi mente.

Nosotros en la discoteca.

Uno de nosotros corriendo mientras somos perseguidos por perros.

Llegamos a seguir bebiendo.

Mis besos alocados con Amaris.

Y de ahí para el resto es borroso.
Tengo ligeras punzadas de dolor en la cabeza, pero nada que no pueda controlar.

— Agh, mi cabeza — escucho a Johan quejarse por la jaqueca que debe tener.

Dos minutos empiezo a escuchar los quejidos de Amaris y Samantha.

Mael, Dante y yo estamos más que acostumbrados a un dolor de cabeza por beber.

— Eso es para que aprendan a medir cuánto beben — regaño al trío que está quejándose como si los estuvieran torturando.

— Cállate — bufa amaris — Vas hacer que me explote la cabeza — dijo mientras se la sostenía como si fuera a caersele.

— Estoy con ella — dice Samantha.

Niego con la cabeza mientras salgo de la habitación.

Me dirijo a la cocina y ahí esta la persona que me apoya en todo momento.

— Angela! — digo.
La chica de ojos claros como el cielo y si cabello oscuro como la noche voltea a verme.

— Hola Damon ¿Que tal? — me pregunta nuestra ama de llaves.

— Muy bien, Angela podrías hacerme un favor? — pregunté mientras sacaba zumo de la nevera.

— El que quieras — suelta.

Mierda, si Amaris estuviera aquí ya la estaría asesinando con la mirada.

— Podrías subir unas Aspirinas y vasos de agua, para mí novia y mis amigos, por favor — No quería ser grosero, pero resalte la palabra novia como si me fuera la vida en ello.

Ella siempre había estado con nosotros y yo no la veía con otros ojos, yo a ella la veía como una hermana más.

— Claro joven — dijo molesta.

Realmente me importaba una mierda que se enojara, pero luego del pequeño problema con Vanessa no quería más mal entendidos con Amaris.

Subí con mi zumo mientras Angela venía detrás con las Aspirinas y el agua.

Cuando entramos en la habitación me quedé quieto, mis piernas no se movían al ver el escándalo que había.

— Como coño se te ocurre tocar un timbre! — le grita Amaris a Mael mientras está sentada encima de su estómago ahorcandolo.

— Ya te dije no fue solo idea mía!! — grita Mael mientras se revuelve para safarze del agarre.

— Suéltalo Amaris! — grita Azael mientras el, Samantha y Johan están tratando de quitársela de encima.

Diablos pero que fuerza chica.

— No!! — responde ella.

— Amaris que lo sueltes! — grita Samantha a su mejor amiga.

No lo pensé dos veces para dirigirme y pararme detrás de ella quitandole a todos de encima y apenas tengo camino libre, la tomo por la espalda y la quito sin ningún esfuerzo.
Patalea y golpea todo lo que ve.

— Ojitos relájate — le digo cerca a su oído y con eso es como si hubiera oprimido un botón que dice Stop — Angela deja las Aspirinas y el agua encima de la mesita de noche y vete — solté.

— Claro joven — suspiro, hizo lo que le ordene y se fue.

Apenas se fue, voltee a ver a Mael y este se escondió detrás de Dante.

— Como coño se te ocurrió tocar un puto timbre — le pregunté.

— Lo siento, parecía divertido en el momento, además había apostado con Dante y sabes cómo soy en eso — dijo.

Nosotros tres somos hombres de palabra cuando de apuestas se trata, pero eso no era justificable, alguien pudo salir herido.

— Está bien, te la paso — Suspiré y negué con la cabeza — Pero para la próxima dejaré que Amaris te arranque la cabeza — solté.

— Gracias — dijo sobandose el cuello el cual tenía las manos de Amaris marcadas.

— Ahora tomense esas Aspirinas — dije.

— No — Amaris se cruzó de brazos.

— No es una pregunta ojitos — tome una Aspirina y un agua y se la acerque — Tomatela — bufé.

— Ya te dije que no! — está chica como que le hace daño tomar tanto.

— Si no te la tomas tendré que embutirtela y sabes que soy muy capaz — dije dando un paso más hacia ella.

— Vale, vale, lo pillo, me la tomo — le di una sonrisa inocente mientras ella me asesinaba con su mirada.

Luego de que todos se tomarán la Aspirina, decidí ir a dejar a todos en su correspondiente casa.
Cuando volví Amaris ya no estaba, supuse que debía estar en la suya, así que opte por sentarme y entretenerme un rato con mi celular.

La revistas que posaban en la mesa del centro de la sala todas decían lo mismo.

Se confirma la relación formal de la señorita Wells y el joven Sellers.

Y de nuevo estábamos en todas las revistas existentes.
Últimamente hasta salíamos en las putas noticias, y todo siempre lo tomaban como parte de un "trato", ya que somos las dos familias más poderosas de este lugar.

Angela apareció en frente mío posando una sandwich y un zumo.

— Para que recobres las fuerzas — dijo.

— Muchas gracias — me límite a responder, tome lo que había traído y me dirigí a mi habitación.

*******
Nota autora:

Holaaaaa
Chicas aquí de nuevo yo.

He visto mucho apoyo, gracias enserio lo agradezco de corazón.

Para las lectoras de Ariana_Godoy Feliz cuatro de julio, icebergs y fuegos.

No tengo mucho que decir, pero me limitare a dar gracias, ustedes hacen que me motive a seguir escribiendo y os quiero por eso.

Sin más que decir, nos vemos en la próxima actualización.

Os quiero, cuidaos ♥️

Este si es mi cuento de hadas [BORRADOR]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora