Este si es mi cuento de hadas [BORRADOR]

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Samantha

Ver a Amaris en el estado que se encontraba me achicaba el corazón.

No podía creer que Damon había sido capaz de semejante daño y menos que no se lo hubiera dicho.
Aquí me encontraba yo, escuchando Mirrors, mientras mi mejor amiga Solloza en mi pecho.

Johan ya venía en camino, se lo había contado lo más resumido posible, sin dejar que hiciera muchas preguntas.

Mataría a Damon, lo haré y es más, lo haré en este momento.

Aparte delicadamente a Amaris de encima mio sin ser muy brusca.

- A dónde vas? - Dijo en un susurro.

Diablos, sus ojos estaban hinchados, sus mejillas, nariz y frente rojas, sus labios secos, ni las lágrimas podían ponerle el brillo natural que estos tenían.

- Voy a matarlo - Solté.

Salí lo más rápido de la habitación, sin importar los gritos de Amaris tratando de detenerme, no escuchaba, todo estaba en negro para mí.

Camine hasta la puerta de su casa y como era de esperarse el no habrío.

- Hola señorita - Saludó Angela - Azael está en el jardín trasero.

Negué con la cabeza al escuchar esa respuesta.

- Dónde esta Damon? - Dije sin más.

- Amm señorita, en este momento no creo que el quiera ver a nadie - Dijo amablemente.

- Pues mira, a mí me vale un rábano lo que crea, así que con permiso - Me adentre en la mansión.

Pero me detuve en seco al ver a la persona parada en las barandas de la segunda planta.

- Samantha, Damon no está en sus cinco sentidos, por favor retirate - Dijo su padre.

Pero como si fuera mi casa lo ignore completamente mientras empeze a subir escaleras arriba.
La bulla del piso de abajo no se hizo esperar, al parecer Amaris entro igual que yo, a las malas.

- Damon! - grite mientras caminaba por el pasillo de sus habitaciones - Sal maldito hijo de puta!.

- Que quieres?! - Bufo abriendo la puerta de su habitación bruscamente.

Realmente no me esperaba ver lo que estaba viendo, Damon olía a nicotina, sus ojos rojos como si hubiera estado llorando, pero sabía que no era por eso, era por la ira que tenía, ya que se le notaba a leguas.
Tenía su cabello revuelto y vestía unos trapos horribles.

- Diablos!, Sabes me estoy apiedando de ti - Solté - Pero le rompiste el corazón a mi mejor amiga y eso es imperdonable.

- Crees que mi corazón no se quebró al escucharla decir «Esto a terminado» - Dijo en un suspiro.

- No, porque eres un maldito sin sentimientos - le dije.

- Lo era - Dijo señalandome - Pero cuando ella entro en mi alma, no hubo vuelta atrás.

No sé ni porque, pero cuando se me aclaro la mente, me encontraba con mis manos en el cuello de el.
Pero eso no lo inmutó.

- Samantha Ya! - la voz de Amaris fue como un rayo de esperanza para el - Vámonos de aquí

El trato de acercarse pero ella no se lo permitió.

- Nisiquiera lo pienses - Lo miró con furia.

- Déjame explicarte - Dijo el con voz desgarradora.

Definitivamente se le veía arrepentido, pero eso tenía que haberlo pensado antes de embarazar a esa loca.

- No, Samantha vámonos - Dijo - ¡Ahora!

No quería salir de esa casa hasta que no me diera una explicación.

- Samantha muevete o tendré que sacarte a las malas - Dijo ella con rabia en su voz.

Negué con la cabeza y como ella dijo, empezó a jalarme lejos de Damon, bajamos las escaleras a punta de jalones, y salimos de la casa igual.

- Pero que te pasa? - Bufó - Yo tratando de no acercarme a él y que haces tú?, Hacerme entrar a su maldita casa!.

- Lo siento ¿Vale?, pero no pude contenerme.

La abrace y caminamos de nuevo a su casa, cuando entramos johan se encontraba hablando con Paul y el abuelo de Amaris, ellos dos tenían cara de querer matar a alguien.

- Amaris, mañana comenzarás rehabilitación - dijo su abuelo.

- Vale.... Comenzaré a empacar - dijo en un susurro.

Con Johan la ayudamos a empacar, ella seguía igual, sollozaba a cada nada y con eso me había dado cuenta que Damon se había metido en su alma.

Al parecer ambos habían empezado a quererse tanto, que no podían estar lejos, pero lo que el había hecho ameritaba eso.

— Podremos visitarte verdad? — pregunto Johan.

— Claro, si quieren un dia salir, le dicen a Paul, para que me el me recoja y asi poder salir — dijo ella.

— Voy a extrañarte — dije en un suspiro.

— No me iré lejos y ya saben que pueden visitarme — Me acerque y la abrace, Johan hizo lo mismo.

Cuando ella termino de empacar, nos quedamos un rato hablando con ella, hasta que el abuelo subió y aviso que era hora de que se fuera.

— Samantha quedas acargo de mi auto, si Johan lo va a manejar, por favor con mucho cuidado, no quiero que nada le pase — Dijo — A mi auto

Nos reímos y asentímos.

Con Johan, nos fuimos en una de las camionetas de los guardas, queríamos acompañarla hasta el centro de rehabilitación.

Por el espejo retrovisor pude ver qué una camioneta demás venía detrás de nosotros, pero sabía muy bien que no era una de las camionetas de los guardas.

Al llegar lo comprobé, la figura masculina, vestida completamente de negro, con una chaqueta de cuero negra y unas botas, salió de la camioneta.

Se mantuvo a una distancia prudente, pero de igual forma al Amaris verlo, le afecto, sus ojos se lagrimearon y ella trató de no prestarle mucha atención.
Ella se despidió de la mayoría con besos en la mejilla y abrazos.

A Damon solo le levanto la mano y la agitó a modo de despedida, a lo que el le respondió de igual forma con una sonrisa quebrada, asintiendo dándole a entender que es lo mejor para ella.

—En estos días vendremos a buscarte para que compremos nuestros vestidos — le digo haciendo que aparte la mirada del chico que ella quiere.

— Te esperaré con ansias — Dijo.

La vimos posarse al frente de la entrada acompañada de su abuelo, miro el centro, tomó una boconada de aire y luego la perdimos de vista cuando entró.

— Quiero treinta guardas por todo el centro, sabemos que aunque no esté en casa querrán atacarla — Paul les dijo a los guardas los cuales ellos asintieron.

Con Johan nos adentramos en el auto de Paul y el nos dejó a cada uno en su correspondiente casa.

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Que despedida.

Espero os haya gustado el capitulo, no olvidéis votar y comentar.

Os quiero un montón.

Cuidaos!.

Con cariño....

Mayra ♥️