Este si es mi cuento de hadas [BORRADOR]

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Amaris

Damon cerró la puerta de mi habitación y paso el pestillo.
Se acercó a paso vacilante, mientras yo estaba acostada en mi cama.

Cuando estuvo frente de mi no dudo en acostarse encima de mi, apoderándose de mis labios mientras restregaba su erección en mi entre pierna.

Mis caderas comenzaron a moverse al ritmo de las suyas.
Levantaba la pelvis y podía sentir lo duro que estaba Atraves del pantalón.

Quitó mi camisa, mientras yo le quite la suya, me detallo como si yo fuera una maldita obra de arte.

Desabrochó mi brassier, quedando expuesta de la cintura para arriba para el.
Se apoderó nuevamente de mis labios mientras masajeaba mis pechos con sus manos.

Se desace de mi pantalón mientras yo desabrochó el suyo y solo quitó rápidamente, el queda en boxers y yo en bragas, contempladonos el uno al otro.

Besa mi cuello, mandíbula, mordisquea enviando fuertes escalofríos por todo mi cuerpo.
Sus dedos levantan el elástico de mis bragas y se introducen en estas, tocando suavemente mi punto débil, para en mi entrada y sus dedos me penetran con fuerza, haciéndome arquear la espalda por la ola de placer que me dan estos.

Sus dedos entran y salen de mi con rapidez, mientras su boca se apodera de mis pechos.
Yo introduzco mi mano en su boxers, tomando en mi poder su polla.
Leves gemidos salen de mi boca cuando lo escucho jadear por mi tacto en su miembro.

Su boca se pega a la mía, mientras sus dedos siguen haciendo maravillas, mi mano sube y baja al ritmo del movimiento de sus dedos que están penetrandome.

Quitó sus boxers y el hace lo mismo con mis bragas, la ola de excitación y calor que hay a nuestro al rededor no puede evitar nada.
En sus ojos puedo ver el deseo, presiona su polla en mi entre pierna buscando camino.

Abro mis piernas en señal de aprobación, el acomoda su miembro en mi entrada y entra de una sola embestida.
Sus embestidas son bruzcas y placenteras.
Sus labios pegados a los míos mientras sus manos juguetean con mis pechos.

Sus besos se vuelven exigentes, su lengua se torna persuasiva dentro de mi boca, me abraza a medida que se mueve dentro escondiendo la cara en mi cuello e inhalando la fragancia de mi perfume.

Termina de embestirme viniéndose dentro de mi.
Pero yo no logro terminar.

Cuando sale de mi, estaba apunto de levantarme y irme a bañar.

— Quédate quieta, faltas tu — dijo.

Se acomoda en mi entre pierna y pasa un  lametazo que me da placer por mi cuerpo.
Chupa, muerde, succiona y introduce dos dedos dentro de mi.
Acaricia mi clítoris con su lengua mientras su dedos siguen penetrandome una y otra vez.

Siento la presión en la parte baja de mi abdomen y con eso se que estoy cerca.

Alcanzo mi orgasmo mientras el continúa con su ataque haciendo que el orgasmo se espanda mucho más tiempo.

Olas y olas de placer me dejan agotada.

Se acuesta a mi lado, acomodandome en su pecho mientras entraslazamos nuestras piernas y posando la sábana encima de nosotros, me da un beso en la coronilla y mueve sus dedos a lo largo de mi brazo.

El cansancio me gana, mientras mis ojos se van cerrando, no se si fue causa por la imaginación mientras me dormía o lo dijo de verdad, pero lo último que escuche antes de quedarme dormida fue.

— Te quiero ojitos — y caigo profundamente dormida.

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Los rayos del sol entran por mi ventana dandome todos en la cara.
Algo pesado posaba entre mis piernas y al girarme la figura masculina durmiendo a mi lado se hace notar.

Sus cara parece de angel durmiendo.

Pero se convierte en demonio cuando de sexo se trata.

Sus músculos relajados y sus manos rodeandome la cintura.

Miro mi despertador y son las 9:30 de la mañana....

NUEVE TREINTA.

Virgen santísima llegaremos re tarde al instituto.

— Damon — digo sacudiendolo ligeramente.

No se mueve.

— Damon — lo sacudo un poco más fuerte.

Nada.

— DAMON!!! — con ese grito victorioso logro despertarlo.

— Joder, ¿Que pasa? — dice restregandose los ojos mientras de acostumbra a la luz del día.

— Tenemos que ir al instituto — dijo mientras me ponía de pie para buscar ropa e irme a bañar.

— No tengo ganas de ir — respondió colocándose una almohada encima de la cabeza.

— Si no vas, no habrá sexo durante esta semana — Solté.

Se levantó rápidamente y comenzó a vestirse a regañientes y maldiciendo por lo bajo.

— Que forma de sobornar tan fea, ojitos — musitó

Le sonreí con inocencia mientras me diriji al cuarto del baño.

Cuando abrí el grifo deje que el agua fría de la mañana cayera sobre mi cuerpo relajandolo al instante.
Lavé mi larga cabellera y al salir la peine.

Cuando salí del baño, damon estaba sentado en la cama esperándome.

— Debo cambiarme, sal — dije.

Comenzó a reírse a carcajadas y yo lo mire con el ceño fruncido.

— No crees que ya te he visto lo suficiente como para que pueda verte mientras te cambias? — dijo.

— Buen punto — me encoji de hombros.

Debía sacarlo de mi habitación si quería cambiarme tranquila, así que opte por poner mi trasero en frente de el mientras subía mis bragas.

Hizo un ademan de tocarlo pero le quite las manos de un manotazo.

— No toques — dije.

Frunció el ceño y me dió una mirada asesina.

Cuando fui a ponerme el brassier, puse mis pechos los suficientemente cerca para tentarlo.

— Vale, vale, lo pillo, iré a decirle a Hanna que hay para desayunar — dijo saliendo de mi habitación.

Termine de vestirme y maquillarme en menos de veinte minutos ya estaba lista.

Baje a la cocina con mi mochila y me senté al lado de Damon a esperar mi desayuno.

— Te dormiste muy temprano — dijo Paul entrando a la cocina.

— Oh sí, Damon y yo llegamos muy cansados del cementerio, queríamos dormirnos temprano — dije encojiendome de hombros.

— Si a las seis de la tarde te parece bien, pues que le puedo hacer — Soltó.

Mi cara se torno de un color rojo sangre y Damon no más se reía.

Así que me acerque y le susurre.

— Sabe que tuvimos sexo, así que reza para que no te estrangule — dije.

Me aleje y note como tragaba con fuerza, mientras yo solo le di una sonrisa inocente.

Hanna sirvió el desayuno y comimos lo más rápido que pudimos, al salir de la casa, los 5 guardas ya estaban esperando para poder encaminarnos al instituto.

— Este será un largo día — Suspiro Damon.

— Dímelo a mi — solté.

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Nota autora:

Hola chicas, lo siento por actualizar tan tarde, pero he estado algo ocupada con unos cursos.

Mañana no se si podré actualizar, pero trataré de hacerlo.

Chicas, se que algunas han querido enviarme alguna imagen y como no se puede por aquí les dejare este correo malejavillabona22@gmail.com

Si nada más que decir, lxs veo en la siguiente actualización.

Os quiero, Cuidaos ♥️