❀ Especial ❀

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꧁༒☬ SOUL ☬༒꧂

año 845 momento de la caída de la muralla María.

Fracaso. Esa era la palabra correcta para describir esta misión. Un rotundo fracaso.

Habían ingresado a Shiganshina al haber vuelto de la última expedición de este año, la cual se llevó a más de la mitad de la legión de reconocimiento. Al comandante Keith, presionado por la monarquía, le exigían más informes sobre el avance contra los titanes y al no tener nada nuevo que informar, se le ocurrió la brillante idea — por no decir, pésima idea— de crear una base militar en cercanías de un bosque. Pero el plan fracasó apenas llegaron al destino, ya que momentos después, una horda de titanes se dirigía en su dirección según Mike. Pero el comandante, en un acto de locura, decidió que debían enfrentarlos para poder establecer la base. En consecuencia, más de la mitad de la legión fue devorada y cuando parecía que Keith no era capaz de dar alguna orden, Erwin tomó su lugar ordenando la retirada.

Ahora todos caminaban en silencio en dirección a Sina para informar al rey sobre el fracaso. La multitud los abucheaba e insultaba en su pasar. 

La pelirrubia desvió su vista hacia un niño que discutía con un hombre que le doblaba el tamaño, a su lado se encontraba una niña que rápidamente lo alejo antes de que el hombre pudiera golpearlo.

Sonrió ante la escena, le recordaba a sí misma con Levi y todas esas veces que tuvo que alejarlo de superiores antes de iniciar una pelea.

¿En qué piensas? Levi cabalgaba a su lado. Había notado la mirada distraída de Fiorella.

Pastelillos.

¿Qué?

En Sina, venden los Pastelillos más deliciosos y caros que puedan existir en las murallas ─le explicó.¿Qué tal si vamos a comprarlos? ¡Una vez que los pruebes los amarás! 

¿Eres tonta? ¿No ves la situación que tenemos aquí? —espetó con el ceño fruncido.

La rubia gimió en protesta. No entendía cuál era el punto de esto si ya estaban acostumbrados a que fuera así.

Si me acompañas, podemos pasar a comprar de ese asqueroso té que tanto te gusta.

Bien —la rubia sonrió victoriosa, sabía cómo convencer a Levi. ─ pero no pienso pagar por tus tontos pastelillos.

Llegar a Sina, les tomó aproximadamente un día entero, debían parar en varias ocasiones para darle de comer a sus agotados caballos y para que pudieran descansar.

Al llegar al amanecer los altos mandos se reunieron con el comandante Shadis y Erwin apenas entraron en el territorio, se rumoreaba que dejaría el cargo para darle lugar a Erwin, quien estaba más que capacitado después de su increíble actuar en la expedición. Levi dejó a Erd a cargo del escuadrón mientras que junto a Fiorella se desviaban del camino en busca de los famosos pastelillos, los cuales terminó pagando el pelinegro y luego fueron en busca del té.

Entraron en una pequeña tienda donde el pelinegro escuchaba atentamente las recomendaciones del vendedor. La fémina, después de un rato de escucharlos hablar, decidió esperarlo fuera de la tienda. Sacó el pastelillo de mora desde la bolsa y se permitió darle un mordisco, sintiendo el deleite de la crema. Definitivamente valía la pena cada maldito centavo en este pastelillo. Aunque claro, ella no lo había pagado.

¿No podías esperar a llegar al cuartel?Levi llegó a su encuentro, llevaba una pequeña caja que supuso era su nueva colección de té. Partió el pastelillo a la mitad, ofreciéndole una al de ojos grises pero este lo rechazó.

SOUL| Levi Ackerman.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora