❀ 13 ❀

7.7K 779 604
                                    

SOUL

Al abrir sus ojos, lo primero que Fiorella vio fue a Kenny, quien estaba sentado en una silla a unos pasos de la cama en la que ella estaba. Intentó ponerse de pie, pero se dio cuenta de que sus pies estaban encadenados entre sí. Escuchó la risa del hombre al presenciar la escena que ella estaba montando para liberarse.

— Por fin despiertas — habló Kenny, colocándose de pie y acercándose a la cama —. Llegue a creer que te golpeo bastante fuerte.

— Si lo hicieron, aún me duele como el infierno — reclamó Fiorella, sobándose la parte de su cabeza que había sido golpeada, notando un enorme chichón —. No podrás obtener nada de mí, no diré nada.

— No es necesario preciosa, no me interesa ninguna información que puedas darme. Solo quiero ver la cara de ese enano cuando te vea conmigo.

—Debo advertirte que el capitán es muy amigo mío, te matará apenas descubra que fuiste tú quien me mantuvo aquí en contra de mi voluntad.—sin embargo, Kenny no lucía para nada intimidado.

— ¿Oh? ¿Levi es tu amigo? —preguntó con burla—. Es curioso, ¿sabes? He escuchado a mucha gente comentar acerca de ustedes dos. Incluso, en los bares que he visitado hacen apuestas sobre el año en el que se van a casar.

—Son unos tontos.

— Yo diría lo contrario —dijo con una sonrisa maliciosa—. He estado observándolos desde hace mucho tiempo. Ustedes dos tienen una definición de amistad bastante...peculiar. 

La menor puso los ojos en blanco.

— Ve al grano. ¿Qué es lo que quieres? —preguntó en un intento de cambiar de tema, sintiéndose incomoda por la mención del pelinegro — ¿Acaso me vas a matar?

—¿Matarte? —su rostro burlesco cambió de pronto a uno de total indignación —. ¿Y de qué me serviría haberme tomado tantas molestias por ti, entonces? No tiene sentido tu pregunta.

—Disculpa... ¿Qué?

—Vamos. No me digas que el idiota de Mike no te contó nada —a pesar de que Erwin dijo que fingiera que no sabía nada, no pudo ocultar su sorpresa, aquello la tomó totalmente desprevenida—. Supe que fue devorado por titanes, es una lástima.

—Espera. ¿Estás tratando de decir que fuiste tú todo este tiempo?

—¡Claro que fui yo! —exclamó alegremente.

—Es imposible. Le pediste a Mike que me oculte de la policía militar y ahora estas trabajando para ellos.

—Eso es lo que ellos creen —dijo guiñándole descaradamente un ojo—. Bueno, me temo decirte que debemos irnos de aquí. Así que no podré responder a ninguna de las preguntas que puedas tener, aunque tampoco pretendía hacerlo de todos modos.

Kenny la cargó al hombro. Ella no pudo reclamar, todavía estaba en shock tratando de procesar lo que le había revelado.

¿Qué relación tenía con ese hombre?

—Por cierto —continuó hablando cuando la dejó dentro de una carroza vacía después de haber salido de la casa en la que se encontraron—. Lamento esto.

Acercó un pañuelo a su rostro. Ella intentó esquivarlo, pero él la tomó de los brazos, impidiendo que se moviera. Contuvo la respiración todo lo que pudo, sospechando que el pañuelo estaba impregnado de algún químico para dejarla inconsciente.

Sin embargo, no pudo aguantar la respiración por mucho tiempo. Su garganta ardió cuando el olor ingresó por sus fosas nasales. Sintió los ojos pesados ​​y lo último que vio fue a Kenny sonreír.

SOUL| Levi Ackerman.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora