ISEKAI: Reencarné como el Rey más pobre del mundo

Capítulo 11: Una historia que terminó

Capítulo 11: Una historia que terminó

Encontré a mi hermana leyendo un libro de cuentos lleno de dibujos y pasajes poéticos, Sora, en cambio, yacía estudiando unos pergaminos viejos que tenían una estructura más complicada.

—Ya terminé la reunión, ¿qué leen? —cuestioné, mientras buscaba un buen librito para matar el tiempo.

—Yo leo un poemario muy viejo de hace 2000 años —contestó Sora, un tanto confiada de sus habilidades lectoras.

—En mi caso leo la genial historia del "Caballero Milenario", un cuento épico donde el protagonista se embarca en una misión sagrada para encontrar la espada del oriente. Tiene acción, romance y aventura, ¡la lectura perfecta! —Alda elevó el libro con sus manos y luego imitó la pose del protagonista: Mano derecha hacia el cielo y la izquierda directo a la cintura... ¿Dónde he visto eso antes?

—Ya lo veré después. —Navegué alrededor del estante, mientras enfocaba la mirada en los diferentes títulos. Había de todo, desde novelas hasta enciclopedias, no existía una organización formal como en mi mundo, donde cada sección tenía contenido exclusivo a dicha zona. Hm, ya me encargaré de hacer reformas bibliotecarias en otra ocasión.

— ¿Eh? —Un enorme libro grueso llamó mi atención, tenía como portada un globo terráqueo con divisiones diferentes a los de mi mundo. Había 4 continentes separados por grandes masas oceánicas y en la parte superior yacía una tipografía con el siguiente mensaje: "UNA HISTORIA QUE TERMINÓ", con letras mayúsculas y rojas.

Al tomarlo entre mis dedos, Sora bajó los pergaminos y se colocó a mi lado.

—La historia que terminó, es probablemente el libro más completo del pasado mítico.

— ¿Pasado mítico? —En mis lecciones de historia solo veía conflictos recientes de este reino, como la sumisión de mi país, o las principales figuras políticas de cada reinado. Nunca escuché nada del pasado mítico.

—No suele enseñarse porque ya son historias muy antiguas, algunos académicos dicen que son solo hechos ficticios o exageraciones de la realidad. —Sora abrió el libro conmigo y luego me señaló las palabras de introducción.

Éstas decían lo siguiente: "En este mundo hay dos historias registradas, la primera ya finalizó y la segunda sigue su curso. En este libro retrataremos todo el pasado mítico que vivió la humanidad; ciudades, reinos, reyes, razas, magia y sueños. Las personas de las que aquí se hablará vivieron en este mundo como tú, querido lector. Que mis palabras sirvan pues, para narrar con lujo de detalle una HISTORIA QUE TERMINÓ"

Menuda introducción.

¿Acaso existía la magia en este mundo?

—Un mundo que terminó —susurré —. ¿Ya no hay magia? —cuestioné con ojitos decepcionados, Sora solo me acarició la cabecita y luego negó con la cabeza.

—La magia ya no existe, eso lo sabe todo el mundo. El único vestigio de esa era son castillos en ruinas que se han perdido entre los mapas y una que otra espada mágica perteneciente a los antiguos reyes del mundo. En ese libro aprenderás sus nombres, sus historias y el trágico final que vivieron. —Sora ojeó unas cuantas páginas con mirada nostálgica —. Yo misma lo leí cuando era más joven, a veces me imaginaba a mí misma como la Princesa de Hielo, o Roxana, la Dama Sombría... Personajes de leyenda cuya historia ya no puede ser comprobada por fuentes reales, pero que siguen alimentando nuestra imaginación.

—Entiendo, entonces la magia ya no existe... ¿Y las otras razas? —volví a cuestionar; en mi mundo solo había humanos, pero durante el proceso evolutivo hubo una divergencia y solo el homo sapiens sobrevivió. Acá, sin embargo, la historia pudo ser muy diferente.