En el psicólogo

Capítulo 33 "Expulsión"

(Pov Ruby)

—¿Dia? ¿Mi hermana dices? —estaba sorprendida por lo que dijo Hanamaru-chan.

—Sí zura. —decía mientras miraba a el suelo preocupada.

—No te preocupes Hanamaru-chan, estaré apoyándote siempre en todo, como tú lo has hecho conmigo —le dije con una sonrisa. Ella se giró a verme y me dió un abrazo.

—Gracias Ruby-chan —decía mientras me abrazaba fuertemente.

Siempre me había parecido que Hanamaru-chan sentía algo por mi hermana, aunque pensaba que era admiración, puede que con el tiempo ese sentimiento hubiera cambiado. Me alegro de que al final me lo haya dicho. Intentaré ayudarla lo mejor que pueda.
Pero supongo que antes de eso tengo que hacer varias cosas, como hablar con Dia sobre lo de Yoshiko-chan y solucionar su problema.

Hanamaru-chan y yo seguimos andando por los pasillos de el instituto, hasta que nos encontramos con Dia, quién al parecer había terminado su trabajo en el consejo.

—Ruby, Hanamaru-san, os estaba buscando.

—¿Qué ocurre hermana?

—Riko-san me dijo que tenías que hablar conmigo.

—Es cierto, ¿podemos hablar en la sala del consejo estudiantil mejor? —pregunto. Dia asiente y nos lleva hasta allí.

Por un momento miro a Hanamaru-chan, que parecía un poco nerviosa, entonces cogí su mano para intentar calmarla.

—Está bien —le susurré. A lo que ella me sonrió.

Al llegar nos sentamos enfrente de mi hermana y empezamos a contarle el problema.

—Unos chicos de nuestra clase pegaron a Yoshiko-chan el otro día, por eso no ha venido zura.

—¿Sabéis quienes fueron?

Estuvimos hablando durante una media hora o así, le dimos los nombres y apellidos y la clase de los chicos.

—Tendré que llamar a los padres de Yoshiko-san, luego a el chico que decís que os contó todo eso, ¿cómo se llamaba?

—Haru, está en nuestra clase también, puedo decirle que venga ahora si no tienes mucho trabajo —le digo.

—Claro, cuando volváis a clase os acompaño y le llamo a él, después de confirmarlo todo tendré que hablar con el director, puede que tarde algunos días en hacerlo, pero si todo va bien puede que mañana lo haya solucionado.

Me fijé en la forma en la que Hanamaru-chan miraba a mi hermana, no era la misma mirada de cuando éramos más pequeñas, era diferente. Pero mientras mi mejor amiga fuera feliz a mi me parecía bien. Además, hacen buena pareja.

Dia nos acompañó hasta clase y al entrar le explicó a nuestro profesor porque no habíamos estado durante más de quince minutos, luego sacó a Haru de clase.
Sabía que sería mejor decírselo a ella antes que al director.

Haru volvió después de unos minutos a clase de nuevo, todo el mundo le empezó a preguntar el porque se lo habían llevado de allí.

Él solo dijo que no era por nada, que había ocurrido algo y se habían confundido de persona al llamarle. Por suerte todos le creyeron.

Mi hermana se encargó de llamar luego a los padres de Yoshiko-chan y más tarde habló con el director sobre todo el tema.
Teniendo a mi lado a alguien como ella no puedo evitar pensar en lo increíble que es.

Riko-chan le dió las gracias a la salida, al parecer convenció a el director de expulsar a los chicos.
Pero al día siguiente ocurrió algo antes de que siquiera ellos se enteraran de su expulsión.

Yoshiko-chan nos dijo que seguramente tardaría una semana en volver a el instituto, Hanamaru-chan se enfadó cuando se lo dijo. No tanto como Riko-chan, pero sí se enfadó, el problema en este caso era que Hanamaru-chan sí que conocía a los chicos.

—¿Qué le hicisteis a Yoshiko-chan zura? —volvió a preguntar Hanamaru por segunda vez a el grupo de chicos que tenía enfrente.

—¿Te crees que puedes preguntar eso Kunikida?

—Puedo preguntarte lo que quiera.

—Te podría hacer lo mismo a ti también y peor incluso.

—Entonces, ¿sí le hiciste algo no?

—¿A tí que más te da? Eres una inútil, como Tsushima.—Shiro se levantó de la mesa en la que estaba sentado y se puso justo enfrente de Hanamaru. La diferencia de altura era increíblemente grande, de más de veinte centímetros incluso.

En unos segundos la atención de toda la clase la tuvieron ellos dos, nadie se esperaba esa actitud en Hanamaru-chan, ella se encontraba mirando a Shiro sin transmitir ningún tipo de miedo, más bien parecía estar retandole.

De algún modo sabía que eso iba a acabar muy mal.

—No me retes Kunikida, o te pasará lo mismo que a Tsushima. —Shiro parecía querer empezar una pelea con violencia, estaba dándole a Hanamaru pequeños empujones hacia atrás.

—¡Shiro-san! —Dia entró por la puerta de nuestra clase, llamando la atención de todos nuestros compañeros.— tú y todos tus compañeros de grupo quedáis expulsados.

—¿Hasta cuando? ¿Y por qué? —pregunta Ryo.

—Creo que eso te lo dirá mejor el director.

El director también entró tras Dia y les dijo que fueran con él a su despacho para hablar.

Dia se fue y todos nos sentamos para empezar la primera clase del día como si nada hubiera pasado.

Hanamaru-chan parecía haberse calmado, también parecía aliviada, seguramente porque no tendría que preocuparse por si Shiro usaba la violencia con ella.

Al parecer les expulsaron por dos meses, o más si volvían a hacerlo, lo importante es que Yoshiko-chan y Maru-chan estarán bien y no tendrán que preocuparse.

—Estuve apunto de ir a partirle la cara a ese —nos admitía Riko a la salida.

—Es verdad, Riko-chan fue corriendo hasta vuestra clase y al verles casi entra, menos mal que estábamos ahí —explica You.

—De todos modos ya está solucionado, hablé con Yoshiko-san por teléfono, al parecer volverá en una semana —dice Dia.

Con todo solucionado solo me quedaba una cosa por hacer, tenía que ayudar a Hanamaru-chan.