En el psicólogo

Capítulo 44 "Una noche juntas pt.2"

(Pov Chika)
Ofrecí a You quedarse en mi casa para pasar la noche, en realidad pensaba hacerlo lloviera o no, pero supongo que la lluvia me ayudó mucho. No puedo dejar pasar una oportunidad así, es decir, pasar la noche con tu novia no es algo que pase todos los días.
Últimamente he estado dándome cuenta de que me gusta mucho You-chan, pasar tanto tiempo con ella me hizo darme cuenta de que quizás si que me gustaba desde un principio, solo que nunca me di cuenta.

Mis padres ya saben de nuestra relación, lo aceptaron bien y no le ven problema a que You se quede a dormir. Quizás no pensarían lo mismo si supieran mis intenciones, claro que sospechan más de You en ese tema, si la conocieran de verdad no lo harían, You-chan siempre se pone muy nerviosa en esas situaciones, aunque no parezca ese tipo de persona.

Hace algunos días estuve buscando sobre un tema que me empezaba a molestar un poco; últimamente estaba sintiendo increíbles ganas de acercarme más a You-chan, físicamente quiero decir, quería abrazarla más, coger más su mano, besarnos de manera más intensa, e incluso hacer más cosas, no sabía que era, así que simplemente me informé sobre el tema. Y resulta que encontré lo que buscaba, ahora solo me quedaba ponerlo en práctica, pero después de la gran sorpresa de You antes no estoy segura de que quiera hacer algo así conmigo.

- Oye You-chan - le empecé diciendo cuando ya ambas estábamos en mi habitación para "dormir". Ella me vió algo triste y se acercó a darme un abrazo.
- ¿Que te pasa Chika-chan? - me preguntó amablemente mientras seguía abrazándome.
- ¿No quieres hacerlo verdad? - ella se quedó en silencio durante unos segundos, luego se alejó de mi con sus manos en mis hombros y me miró fijamente.
- ¿Hacer que? - me preguntó muy seria.
- You-chan idiota.
- Pero no sé- ah - de repente dejó de hablar y pareció pensar en algo - ¿Te refieres a lo de antes? - yo asentí - bueno, antes de nada me gustaría saber tus razones, es decir, yo también quiero, pero no esperaba que tú...
- Es porque me he sentido rara últimamente, solo pienso en que quiero tocarte You-chan, y ahora que tengo la oportunidad yo... Me gustaría hacerlo contigo, además no quiero que cualquier persona te vuelva a mirar y piense en ser tu pareja, quiero que sepan que eres mía - ella se sonrojó y me miró decidida.
- ¿Entonces lo haremos?
- Si tú de verdad quieres.
- Si quiero, pero no quiero que sea porque quieras marcar territorio, das bastante miedo así, quiero que sea un bonito momento solo para nosotras dos.
- Yo también quería algo así - le sonreí y junté nuestras frentes. Ella me besó mientras me llevaba hasta la cama para colocarse encima de mi - ¿Estás segura de que quieres estar arriba? - le pregunté entre risas.
- ¿Porque no? - me preguntó molesta.
- No por nada - le dije dejando de reírme, pero aún así seguí sonriendo.
- ¿Te crees que no puedo tomar la iniciativa?
- ¿Puedes? - la reté. Al parecer se lo tomó muy enserio, empezó a besarme apasionadamente mientras acercaba su cuerpo al mío cada vez más. Se sentía bien, era algo completamente diferente, y esta vez no habría interrumpciones. You parecía muy desesperada al besarme de esa manera, aunque tampoco puedo decir que por mi parte fuera al contrario, más bien estábamos igual. Seguimos besándonos hasta que nos quedamos sin aire y nos separamos, entonces You me mordió el labio y dejó un último beso en ellos para luego pasar a besarme el cuello y bajar hasta la clavícula dejando algunas marcas en el proceso.
- Llevaba tiempo queriendo hacer esto - me admitió.
- Pero no eres capaz - le dije provocandola de nuevo. Gracias a lo que conseguí que me quitara la camiseta rápidamente. Justo cuando pensé que no iba a parar fue cuando quedó completamente paralizada - ¿Que te pasa? - le pregunté burlándome de ella.
- Cállate - me dijo molesta volviendo a besarme.
- ¿No...Vas...A...seguir? - pregunté mientras ella aún seguía besándome, por lo que introdució su lengua para que no pudiera seguir hablando. Aún así lo intenté, pero solo salían gemidos, creo que podría hacerme adicta a los besos de este tipo con You. Entonces volvió a separarse - ¿Y bien? - le pregunté sin poder respirar bien aún. Ella se puso completamente roja. Sabía que no podía tomar la iniciativa. Solo le volví a sonreír y cambié nuestras posiciones quedando yo encima de ella.
Esta vez yo le quité la camiseta y mientras le besaba el cuello trataba de desabrocharle el sujetador para quitárselo. Cuando al fin conseguí mi propósito empezé a besar uno de sus pechos mientras con una de mis manos masajeaba el otro. Ella comenzó a soltar leves gemidos casi inaudibles ya que trataba de controlarlos lo mejor posible, se me hacía bastante lindo verla tratando de no gemir porque mi familia estaba allí.
Entonces empezé a morderle el pezón y gimió un poco más fuerte, por lo que se tapó la boca con ambas manos.
Al ver eso dejé de hacer lo que estaba haciendo y la miré, creo que jamás olvidaré su cara de excitación en ese momento.
- Tus gemidos son demasiado lindos You-chan - le sonreí al decirle eso. Ella solo desvió la mirada, aún seguía con las mejillas completamente rojas.
Volví a bajar la mirada para continuar, puse mi mano en su abdomen para tocarlo.
- Oye You-chan, tienes el abdomen muy marcado - le dije sorprendida. Ya sabía que lo tenía es decir, es You, hace natación y demás pero me pareció algo extremadamente atractivo en esa situación.
Ella aún siguió mirándome con esa expresión linda que era a la vez molesta y a la vez parecía que me pedía por favor continuar.
Me acerqué de nuevo a su cara y volví a besarla.
- Te amo Chika-chan - me dijo al separarnos.
- Yo también You-chan.
Las dos estábamos igual de excitadas en ese momento, ni siquiera podía pensar con claridad, pero si de algo estaba segura fue de que aquello que le dije es verdad.
Con una mano comencé a bajar hasta llegar a sus pantalones y quitárselos, comencé a besar las piernas de You cerca de su entrepierna hasta que me pidió en voz baja que lo hiciera ya.
- Chika-chan por favor... - me pidió con falta de respiración.
Yo la miré con una sonrisa pícara y con mis dedos empecé a rozar su zona por encima de la prenda de ropa interior.
- Chika-chan... - dijo mi nombre entre gemidos.
Entonces le retiré la prenda y metí mis dedos dentro de ella; comencé a moverlos lentamente y con cuidado de no hacerle daño, ella empezó a gemir un poco más fuerte que antes por lo que tuve que besarla para no hacer ruido.
- Es difícil hacer esto cuando lo que más quiero es esuchar tu voz diciendo mi nombre - le susurré al separarme un momento del beso para luego comenzar otro. Aunque creo que ella no lo oyó.
Comencé a mover mis dedos cada vez más rápido, por lo que los gemidos de You iban haciéndose cada vez más seguidos y fuertes, cuando al fin conseguí que se corriera en mi mano y me volví a alejar de ella.
El verla así era raro, pero era una gran vista para mí, aún en ese estado casi sin poder respirar y completamente roja You seguía siendo increíble a mis ojos. No pude resistirme a la tentación de abrazarla. Y así estuvimos se podría decir que una media hora, hasta que You me agarró las muñecas y volvió a colocarse encima de mi.
- Te toca - me dijo muy segura de sí misma de nuevo.
- ¿Estás segura?
- Esta vez si - me dijo para luego besarme.
- Parece que esta noche no me vas a dejar dormir ¿verdad?
- Tú lo empezaste después de todo.
- Es verdad - dije entre risas. Luego la miré y le sonreí - está bien las veces que sean mientras sea contigo - ella me sonrió también.
- Lo mismo digo.

No dormimos nada aquella noche.