Capítulo 19 - 20

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Capitulo 19

Zhang Qiming compró un pequeño condominio en una comunidad de gran altura recientemente construida en la ciudad. Los nombres en el certificado de bienes raíces eran de él y de Zhang Hang. Solo había querido escribir el nombre de Zhang Hang, pero Zhang Hang todavía era menor de edad y aún no podía ser completamente independiente. Con la ayuda de la policía de la comisaría, transfirió la cuenta bancaria de Zhang Hang para que estuviera a nombre del niño. Zhao Xiaolian había abandonado a su hijo menor de edad y ya no tenía las calificaciones para criar a un niño. De hecho, podrían responsabilizar legalmente a Zhao Xiaolian por sus acciones, ya que era ilegal abandonar a los hijos. Sin embargo, Zhang Hang inesperadamente no quiso hacerlo.

Zhang Hang dudaba un poco de que Zhang Qiming escribiera su nombre en el certificado, porque no quería aumentar la carga sobre su padre. Su idea había sido alquilar una casa hasta que fuera independiente. Sin embargo, al sentir el estado de ánimo alegre de Zhang Qiming cuando lo llevó a ver el condominio, Zhang Hang se tragó las palabras que quería decir. En esta etapa, no podía hacer demasiadas promesas, pero definitivamente trabajaría duro y le pagaría a su padre adecuadamente en el futuro. Si Zhang Qiming se casara y tuviera sus propios hijos, Zhang Hang sería el hermano mayor y ayudaría a cuidarlos. Mantendría a su padre.

Por supuesto, estas palabras actualmente eran solo una charla vacía. Se desconocía si podía valerse por sí mismo. Zhang Hang solo podía ocultar sus pensamientos en el fondo de su corazón y permanecer decidido.

El nuevo condominio era conveniente y de estructura simple sin demasiadas paredes. Zhang Hang se familiarizó con el diseño de la nueva casa con la ayuda de Da Hei. Zhang Qiming había elegido a propósito comprar un condominio con una decoración y muebles sencillos para que Zhang Hang no chocara con nada.

El rascacielos tenía un piso subterráneo con un supermercado, por lo que los residentes podían ir de compras directamente usando el ascensor. Empleó guías de compras de buena calidad. Si Zhang Hang quería comprar algo, simplemente podía pedir ayuda a los guías. Tampoco tendría que empujar su carrito de compras arriba, ya que solo podría usar el ascensor para llevar las mercancías a casa.

Una vez que llega la suerte, siguen todo tipo de cosas buenas.

Este verano, la Escuela de la Ciudad para Ciegos se había unido a muchas escuelas secundarias vocacionales de la ciudad. Las escuelas para ciegos incluían escuelas primarias ordinarias, escuelas intermedias, escuelas secundarias y escuelas secundarias vocacionales. Muchos cursos se organizaron especialmente para el empleo de ciegos. Esta fue una nueva política a partir de este año. Solía ​​ser muy difícil para las personas ciegas aprender habilidades laborales, pero ahora, la escolarización de los ciegos había abierto una educación especializada conveniente.

El gobierno de la ciudad había emitido una serie de nuevas políticas con respecto a las personas ciegas de una sola vez, una de las cuales era que no se podía prohibir la entrada de los perros guía a un lugar público y había que alojarlos. No deben ser discriminados, tocados o alimentados por personas que no sean su dueño. Esto abriría una puerta para la mayoría de las personas ciegas.

Lu Chengye tenía la costumbre de ver las noticias nacionales y locales todos los días. En el momento en que se emitió esta regulación, Zhang Qiming aún no había organizado el condominio y todavía vivían con Xiao Ren. Mientras Lu Chengye miraba las noticias, Zhang Qiming llevó a Zhang Hang a abandonar su escuela original. Luego se pusieron en contacto con la escuela para ciegos. Xiao Ren, por otro lado, estaba fuera de servicio y había dormido hasta que estuvo completamente descansado. Actualmente estaba en medio de cepillarse los dientes.

Xiao Ren ya no estaba sorprendido por el fenómeno de un perro mirando los canales financieros y de noticias. Da Hei era el perro de Hang Hang de todos modos, así que si era inteligente, cuidaría mejor al niño. Da Hei siempre se mantuvo al lado de Zhang Hang, por lo que no tenía que preocuparse de que se volviera demasiado inteligente y huyera de su dueño. Xiao Ren sintió que lo que realmente debería preocuparle era que el perro se volviera demasiado asombroso y eclipsara a su Hang Hang... Pei (1), ¡qué estaba pensando! 

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