Tanjiro Kamado, un joven adolescente inigualable.
Siempre vio por el bienestar de su familia.
A la corta edad de quince años, había quedado a cargo de su hermana menor Nezuko, al morir sus padres y sus hermanos y ser ellos los los únicos sobrevivien...
La fiesta sin duda había sido espectacular, Tanjiro se había emocionado al ver a los ejecutores en su faceta de personas normales, la familia del oyabun agradecía la presencia de los más allegados al clan, se notaba el respeto que los ejecutores le tenían al oyabun y el cariño que este le tenía a su familia.
Al abrir los regalos, todos se emocionaron, desde costosos viajes a lugares exóticos, hasta un nuevo auto, fueron algunos de los regalos que recibido, Tanjiro sintió que su regalo era insignificante al lado de tanto lujo. Pero al abrir el regalo de Tanjiro, el oyabun se mostró alegre.
Al finalizar, todos se despedían del oyabun daban sus felicitaciones, deseaban a la familia del oyabun salud y se retiraban deseando una agradable noche.
Cuando Tanjiro se acercó al oyabun, este lo abrazó.
- fue un gran regalo joven Kamado, sin duda algo que atesoraré, las cosas de la tienda de Urokodaki son excepcionales, un día me daré la vuelta para comprar regalos para los ejecutores y el saiko-komon-
- será un honor recibirlo y atenderlo como usted se merece señor-
Luego Sabito se despidió del oyabun
- cuida a tu hermana, sabes que apreciamos mucho a Makomo-
- lo haré señor-
Giyu fue el último en despedirse
- mi señor, espero que este día esté lleno de alegría y bendiciones para su familia-
- siempre tan correcto y formal, sin duda eres excepcional joven Tomioka, nadie podrá nunca superarte-
- sin usted ni el saiko-komon, yo no sería nada señor-
- cuídate mucho y cuida al joven Kamado-
- lo haré señor-
Los tres salieron al auto y Sabito le abrió la puerta a Giyu, para luego el subirse al volante y esperar a que Tanjiro subiera al lado del sarro-kai.
En el camino, Giyu se notaba tenso y Sabito sabía lo que significaba.
- antes de dejar a Tanjiro, llévame al salón de Tamayo, tengo cosas que hacer-
- si mi señor-
Sabito apretó el volante y se dirigió a su destino.
- pero ya es muy tarde, debería ir a descansar Tomioka-san-
- deja de molestar a mi señor, el puede hacer lo que desee-
- solo veo por su salud, debe descansar y...-
- silencio, Sabito solo maneja y Tanjiro, mi vida personal es algo que se llevar muy bien, no necesitas inmiscuirte en ella, sé cuidarme bien-
El resto del viaje fue silencioso, al llegar con Tamayo, Sabito bajó y le abrió la puerta a Giyu, este bajo y dio su última orden.
- irás a dejar a Tanjiro y luego ve a descansar, recuerda que Makomo debe levantarse temprano, yo regresaré solo-
Sabito asintió y Tanjiro vio al hombre que amaba entrar y como una mujer rodeaba el brazo de este y le sonreía.
Ya solos, Tanjiro no dudo en decir lo que pensaba
- deberías cuidar más a Tomioka-san, es peligroso que esté...-
- cállate- Sabito apretaba con furia el volante y subía la velocidad, solo quería dejar a ese chiquillo en su casa e irse a dormir
- no me callaré, ahora mismo él está teniendo sexo con esa...-
-¡QUE TE CALLES!- dijo Sabito y frenó de golpe - ESTOY HARTO DE TI-
- A MI NO ME GRITES-
- entonces cállate, crees que no se lo que va a pasar, se más de él de que tú sabes, se lo que lo aflige por las noches, se lo que lo lastima, se lo que puede hacerle salir una sonrisa y muchas cosas más que tú nunca sabrás y por eso soy leal a él, él nos salvo a mi y a mi hermana y ahora te callarás y dejarás de criticar todo lo que haga Giyu Tomioka, por que sin él no estarías aquí, estarías muerto y tú hermana también, Urokodaki moriría de cancer terminal, así que cierra la boca y solo obedece-
Sabito manejo rápido y llegó a la casa de Tanjiro, este ya no dijo nada más, solo cuando estuvo en su casa, bajo del auto y entró.
Tanjiro vió el auto alejarse y subió, cuando llegó a su cuarto y se metió a la cama, donde lloró, lloró de nuevo, debido a Giyu Tomioka, pensaba que él sentía algo por él, pero ahora, él estaba en la cama con otra mujer, sentía sus lágrimas salir, pero también su corazón dolía, las lágrimas de amor eran las más dolorosas.
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A unos kilómetros, Sabito se encontraba llorando, tenía un dolor aún más grande que el de Tanjiro, tenía años amando a Giyu, pero nunca interpondría su amor por demostrarle a su señor su lealtad, él era fiel, Giyu podría acostarse con mujeres, pero sabe que ninguna tendría el afecto que Giyu le tenía a él y a Makomo, nunca nadie lo ocuparía.
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Mientras tanto, Giyu se encontraba en cama, esa noche debía estar en los brazos de una mujer, pero no había pasado, algo estaba mal, lo sentía, estaba demasiado estresado para pensar en lo siguiente.
Sacó su billetera y sacó su más valioso tesoro, entonces la vio, sus preciosos ojos azules y la hermosa cabellera azabache, abrazándolo, en ese entonces ella trabajaba para poder salir adelante y él amaba el mundo marino.
- te extraño tanto onee-san, desearía que estuvieras conmigo-
Una lágrima todo por la mejilla de Giyu, solo una, no podía llorar el pasado, pero era difícil olvidar, lo único que lo mantenía vivo era vivir por el sacrificio de su hermana y hacer feliz a Makomo, nada más importaba, ni el mismo...
