Tanjiro Kamado, un joven adolescente inigualable.
Siempre vio por el bienestar de su familia.
A la corta edad de quince años, había quedado a cargo de su hermana menor Nezuko, al morir sus padres y sus hermanos y ser ellos los los únicos sobrevivien...
- ¿donde estará ese maldito niño?- Sabito miraba su reloj, el niño insolente estaba retrasado
- nee, Sabito-kun, relájate, solo han pasado 10 segundos de retraso-
Desde la parte trasera de la camioneta, Shinobu sonreía cínicamente
- usted no comprende Kocho-sama, ese niño es un insolente, siempre llevándome la contraria-
Shinobu se acercó y pasó su dedo índice, por la nuca del wakagashira, causándole escalofríos
- tal vez solo estás celoso - la chica acerco sus labios al oído de Sabito - aparte de ti y tu hermana, Giyu nunca se había preocupado por nadie-
Con la mueca de disgusto de Sabito, Shinobu se rió, era más que obvio que al wakagashira, nunca le iba a agradar el niño prodigio.
Ya había pasado un minuto del tiempo pactado, cuando el de cabellos melocotón, divisó al chico que odiaba, corriendo a gran velocidad hacia la camioneta, subió de inmediato, respirando de manera agitada
- llegas tarde- dijo Sabito, mirándolo con enojo por el espejo retrovisor
- solo fue un mísero minuto, si le pisas al acelerador, no se notarán esos 60 segundos de retraso- dijo Tanjiro rolando los ojos
- 68 para ser exactos- dijo el de la cicatriz, apretando la mandíbula
- y serán más si no arrancas-
Shinobu observaba la situación con una sonrisa, la tensión era tan tensa entre Tanjiro y Sabito, que le resultaba cómica.
- nee Sabito-kun, debemos irnos, nos están esperando-
- lo siento Kocho-sama-
Sabito encendió la camioneta y de inmediato emprendió el camino.
Shinobu no tardó en notar el logo de la bolsa de Tanjiro, ese niño era una cajita de sorpresas
- entonces... Tanjiro-kun ¿llegaste tarde por ir de compras?- dijo la chica intentando tocar la bolsa, pero de inmediato Tanjiro la alejo de sus manos
- solo fui por las cosas para un amigo, nada especial- dijo con una risita nerviosa, lo que menos quería, era que se dieran cuenta de lo que traía en esa bolsa
- aja, Tanjiro-kun, yo también voy a comprarle juguetitos a mis amigas a esos lugares- sonrío pícaramente para luego ver a Sabito - nee, Sabito-kun, trata de ir más rápido, o de otro modo Giyu se molestará-
Sabito vio a través del retrovisor
- no permitiría que las estupideces e irresponsabilidades de un niño - dijo clavando su mirada en Tanjiro - me hagan fallarle a mi señor-
Tanjiro estaba a punto de contestarle, pero Shinobu decidió intervenir
- no le hagas caso, cuando se trata de Giyu, Sabito es como una pared, no cede ante nada-
El chico decidió hacerle caso a Shinobu, ademas era lo mejor, si peleaba, distraería a Sabito y de seguro llegarían tarde.
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